Este blog, que se caracteriza por lanzar productos de un día y secciones de una sola entrega, se embarca a partir de hoy en un ambicioso proyecto: dirimir litigios de primicias y exclusivas entre periodistas. Créese por medio de la presente el Tribunal Superior de la Chiva.
Ya no será necesario que usted, amigo periodista, pase cuentas de cobro en cocteles ni que mendigue reconocimiento en las Denominadas Redes Sociales. Tampoco habrá más ‘chivas’ huérfanas o en manos de farsantes de la información. De manera sumaria, objetiva y transparente, acá se impartirá justicia y se dará a cada quien lo suyo, y viceversa.
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10 de septiembre de 2012
El Tribunal Superior de la Chiva avoca conocimiento inmediato del primer caso, conocido en autos como ‘La primicia de icopor’ o, si se quiere, la ‘La exclusiva de poliestireno expandido’. El autor de la pieza es ni más ni menos que el debutante Blu Radio (en adelante, ‘Blu’ a secas). Según varios testigos, el seis de septiembre de 2012, antes de completar las primeras dos horas de su debut, Blu ya reclamaba la autoría de tres primicias. Una cifra sospechosa para los peritos forenses.
Concretamente, a las seis horas y cuarenta y dos minutos de la mañana la cuenta @BluRadioCo trinó lo siguiente a través de la Denominada Red Social Twitter de la Súper-Autopista de la Información:
Unos minutos más tarde. Néstor Morales afirmó:
El Tribunal Superior de la Chiva considera que se cumplen los dos elementos sine qua non de la exclusiva informativa: i) la información en tiempo modo y lugar determinado, y ii) la auto-celebración o auto-homenaje o felicitación mutua por ser el primero en decirlo. En presencia de estos elementos, la ‘chiva’ se presume, y es menester de los demás interesados probar en contrario.
En el caso de marras este Tribunal no tiene conocimiento de medio de comunicación o periodista alguno que haya querido disputar la propiedad de la ‘chiva’. Esto alertó todavía más a los peritos forenses, acostumbrados a lidiar con el foto-finish y el falso positivo informativo (el fenómeno de ‘chivas’ clonadas preocupa seriamente a las autoridades).
Sin embargo, poco despúes del suceso una periodista de Caracol Radio intentó desvirtuar a Blu, lo que inicialmente hizo creer que se trataba de un acto lamentable de envidia profesional:
Caracol Radio se apersonó de la causa de manera desinteresada, y sin otra motivación diferente a que se supiera la verdad, entrevistó al presidente del Sindicato de la Contraloría –Ascontrol– (así es, Ascontrol) Carlos Saavedra:
La sana crítica de las pruebas, la revisión del documento fotográfico y de otros insumos similares (como éste y éste) indican que Blu Radio es el único autor mediato e inmediato de una primicia inexistente. El iter criminis de la actuación configura una tentativa de embuste y un concierto para improvisar. En consecuencia, el Tribunal Superior de la Chiva ordena:
Primero: descuéntese del Registro Nacional de Chivas la primicia de Blu Radio. Teniendo en cuenta que se trataba de la primera, el saldo de ‘chivas’ es menos uno (-1).
Segundo: teniendo en cuenta el tamaño del desaguisado, impóngase castigo de diez ‘chivas’ en contra de Blu Radio. En consecuencia, el saldo de ‘chivas’ es menos once (-11).
Tercero: ordénese que en la próxima emisión de Blu Radio Néstor Morales diga tres veces seguidas “El ataúd era de icopor”, y que Felipe Zuleta agregue casualmente: “La embarramos, ala”.
Cuarto: compúlsese copias a las autoridades para que investiguen la entrevista de Mabel Lara con El Espectador por posible caso de perjurio. Allí la periodista de Blu Radio aseguró: “Aquí no existe la chiva, lo importante es ir al fondo”.
Quinto: reconózcase el valor patriótico y desinteresado de Caracol Radio.
Sexto: contra este fallo no procede recurso alguno.
Notifíquese y cúmplase.
