La imagen malinterpreta unos datos de la Sociedad Américana de Cáncer.

Desde hace unos días está circulando en Facebook una imagen que habla sobre las consecuencias de utilizar tapabocas.

“Las mascarillas quirúrgicas desechables que usa la mayoría de la población están esterilizadas con óxido de etileno y hechas de PTFE (politetrafluoretileno, más conocido como teflón), un carcinogénico hecho a partir de fluoruro sintético”, dice la imagen. 

Añade: “De acuerdo con este material aumenta el riesgo de tumores de hígado, testículos, páncreas, riñón y pecho, además de colitis ulcerosa, enfermedades tiroideas, preeclampsia y colesterol alto. Una exposición prolongada puede causar síntomas gripales y hemorragias en los pulmones, que podría conducir a la asfixia”.

Como usuarios de Facebook calificaron la imagen como falsa, le aplicamos nuestro Detector de Mentiras y encontramos que es falsa porque la información que replica no es cierta. 

Así se ve la imagen que circula en esa red:

La Organización Mundial de la Salud indica que los tapabocas quirúrgicos están hechas de tejido hilado o paño y por capas de materiales no tejidos, como polipropileno, polietileno o celulosa.

Por ejemplo, entre los componentes de los tapabocas de la marca colombia GB Biopacol están: tela no tejida hidrofóbica (polipropileno), banda elastizada (polipropileno – hilos de poliuretano). 

La OMS no menciona ni el óxido de etileno ni el Ptfe (teflón) entre los componentes de los tapabocas. 

Sin embargo, algunos comerciantes de tapabocas (que no son las quirúrgicos ni los FFP2 extendidas entre la población) sí anuncian en internet que los que venden llevan teflón, como reportó el portal de factchecking Newtral.

Así que, de entrada, no hay pruebas de que sean las mascarillas “que usa la mayoría de la población”, sino algunas de ellas.

Pero el error mayor es que la imagen dice que el teflón causa cáncer y es no es cierto, según Sociedad Estadounidense del Cáncer (ACS, por su siglas en inglés)  

De acuerdo con la ACS, el teflón es una marca utilizada para un grupo de productos químicos artificiales, de los que el más común es el politetrafluoroetileno (Ptfe). 

Dice que tiene una variedad de usos porque no reacciona con otros productos químicos y puede proporcionar una superficie casi sin fricción.

Por eso, se utiliza es como una superficie antiadherente en utensilios de cocina y como protectores de telas.

La ACS dice que el ácido perfluorooctanoico (Pfoa), también conocido como C8, es otro químico artificial que se utiliza a veces en el proceso de fabricación de teflón y que tienen productos químicos similares (los fluorotelómeros).

Según esa entidad, cuando se usa Pfoa en la fabricación del teflón, “se quema durante el proceso y no está presente en cantidades significativas en los productos finales”. Es decir, el Pfoa que queda en el telfón, cuando se usa, es en una cantidad marginal.

“Si el teflón y otros revestimientos antiadherentes por sí mismos causan cáncer no ha sido el principal foco de preocupación. Las principales preocupaciones han sido con PFOA, así como con sustancias polifluoroalquilo similares (PFAS), como sulfonato de perfluorooctano (PFOS), sulfonato de perfluorobutano (PFBS) y productos químicos “GenX”, dice la entidad. 

Es decir, el posible riesgo cancerigeno no está en el el Ptfe es sino en el Pfoa. 

La Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer (Iarc), que hace parte de la OMS, clasificó al Pfoa como “posiblemente carcinógeno para los humanos” (Grupo 2B), basándose en evidencia limitada en humanos de que puede causar cáncer de testículo y riñón, y evidencia limitada en animales de laboratorio.

Y la Iarc no califica al Ptef como cancerígeno. 

Calificamos la imagen que circula en Facebook como falsa porque la información que replica no es cierta. 

Soy periodista y desde 2019 hago parte del equipo del Detector de Mentiras de La Silla Vacía. También enseño sobre fact-checking y seguridad digital en la Universidad de La Sabana. Me interesa el debate sobre la regulación de las redes sociales y su incidencia en la libertad de expresión. Estudié...