La publicación de Facebook presenta datos ciertos o sustentables, pero sin el contexto completo.
En Facebook está circulando una publicación que habla sobre Pablo Escobar, el M-19 y toma al Palacio de Justicia.
Parte del texto de la publicación dice: “Se cumplen 36 años de la toma del Palacio de Justicia, un acto terrorista del grupo narco-guerrillero del M-19, que cumplía órdenes de “El Patrón” Pablo Escobar.
Escobar necesitaba que quemaran los expedientes judiciales que reposaban en el edificio del Palacio, y que ajusticiaran los magistrados de la Corte Suprema y del Consejo de Estado que estudiaban su caso para extraditarlo a los Estados Unidos”.
Como usuarios de Facebook calificaron la publicación como falsa y como se ha compartido 400 veces, decidimos pasarle el Detector de Mentiras.
Encontramos que es más cierta que falsa porque aunque los datos que expone son verdaderos omite contexto de algunos.
Así se ve la publicación que circula en redes:
Hay sustento para hablar de una conexión entre el Cartel de Medellín y el M-19 en la Toma al Palacio
La toma del Palacio de Justicia ocurrió el 6 y 7 de noviembre de 1985. Se saldó con 94 muertos, entre ellos 11 magistrados de la Corte, según el Centro de Memoria Histórica.
El informe que la Comisión de la Verdad del Palacio de Justicia entregó a la Corte Suprema indica que probablemente sí hubo una relación entre el Cartel de Medellín y el M-19 en la toma.
“Todo indica, entonces, que hubo conexión del M-19 con el cartel de Medellín para el asalto al Palacio de Justicia”, afirma. No obstante, no concluye en qué nivel se dio el apoyo del Cartel que encabezaba Pablo Escobar al grupo guerrillero, como contamos aquí.
La publicación de Facebook dice: ““El Patrón” le encargó la tarea sicarial a dos de las cabecillas del M-19: Álvaro Fayad e Iván Marino Ospina, el padre del actual alcalde de Cali, a quienes les pagó US$2 millones y les facilitó las armas y el entrenamiento para toma.”
Sobre este punto, la Comisión cita el testimonio del lugarteniente de Pablo Escobar, ‘Popeye’, quien aseguró que el capo pagó dos millones de dólares al M-19 por la toma. “Él [Pablo Escobar] le entregó dos millones de dólares a Iván Marino Ospina, pero esa plata fue perdida porque Iván Marino Ospina murió antes de la toma y la plata nunca la encontraron”, dijo a la Comisión.
Si bien hay versiones de que Escobar sí le entregó los 2 millones de dólares a Ospina, la publicación no aclara que Iván Marino Ospina murió en un operativo militar en Cali en agosto de 1985, unos meses antes de la toma.
La Comisión también cita el libro ‘Mi confesión’ del líder paramilitar Carlos Castaño, según el cual en mayo de 1985 Carlos Pizarro y el Cartel acordaron la toma por iniciativa de Escobar. Según Castaño, Pizarro ‘cobró’ un millón de dólares por eliminar al presidente de la Corte Suprema, Alfonso Reyes, y un millón de dólares por destruir todos los archivos.
La Comisión encontró que Popeye y Castaño se contradicen en parte, pero encuentra que hay más indicios de la cooperación entre el Cartel y el M-19, como que del Palacio salía una humareda antes de la primera hora de la toma, cuando el Ejército no había llegado, lo que al parecer indicaría -el informe no lo afirma – que era por la quema de expedientes.
Ese día, además, la Sala Constitucional de la Corte iba a discutir la constitucionalidad del tratado de extradición con Estados Unidos, al que se oponían tanto los narcos por interés propio como el M-19 por su ideología antiimperialista. De hecho, fue una de las proclamas que hizo el M-19 cuando se tomó el Palacio.
La Comisión también retoma los testimonios de los ex guerrilleros Otty Patiño y Rosemberg Pabón, que afirmaron que sí había algún tipo de relación con los narcotraficantes, pero limitada a temas como apoyo de transporte o suministros y sin que el M-19 se sometiera a la voluntad de los carteles.
Para ese grupo, la motivación de la toma era hacerle un “juicio” al presidente Betancur por el incumplimiento de los acuerdos de tregua suscritos en 1984.
Lo que dice de Petro es cierto
La publicación de Facebook dice: “Existen varias leyendas urbanas que dicen que Gustavo Petro participó en la toma, y que logró escapar del Palacio. Una de ellas dice que asesinó a sangre fría a un magistrado, y que usó su ropa y sus documentos para salir, otra versión dice que salió vestido de mujer, pero la verdad es ese entonces, alias Aureliano estaba preso y no era más que un guerrillero raso”.
El ahora Senador no estuvo implicado en la toma del Palacio pues para esa época estaba pagando 20 meses de prisión por porte ilegal de armas.
En prisión, Petro se enteró de la toma. Aunque pertenecía al M-19, sus compañeros de entonces no lo recuerdan como un hombre de guerra sino como uno de los militantes que más le apostó a la paz.
“Es el Petro que nadie recuerda, que era el Petro del M-19”, dice Álvaro Jiménez, activista de Derechos Humanos y ex M. Otros excompañeros coinciden en que también fue un ayudante muy cercano al asesinado líder de esa guerrilla, Carlos Pizarro.
Petro estuvo preso hasta febrero del 87. Tras la desmovilización asesoró la Asamblea Nacional Constituyente que creó la Constitución del 91, como contamos en este perfil.
La caricatura es real
Una búsqueda inversa de la imagen muestra que la caricatura fue publicada en diferentes portales como la Otra Cara y El Bogotano en 2020.
Por lo anterior, calificamos la publicación de Facebook como más cierta que falsa porque aunque los datos que expone son verdaderos omite contexto de algunos.

La Silla Vacía es parte del International Fact-Checking Network (Ifcn), la alianza global de verificadores de datos. Como parte de la alianza, firmamos y acatamos un código de principios, que pueden conocer acá