Durante las jornadas de protestas los actos de vandalismo han afectado la infraestructura en varias ciudades. En Bogotá, las instalaciones más impactadas son las del sistema de transporte público. 

Así lo muestra un informe de la Contraloría de Bogotá. Según el ente de control, 130 estaciones, de 139, han sido vandalizadas. 660 buses de Transmilenio y 407  buses del Sitp  tienen algún tipo de daño. Esto a su vez ha impactado la movilidad de al menos 500 mil ciudadanos.  

La recuperación de esta infraestructura podría tomar entre tres y seis meses y costará cerca de 20 mil millones de pesos.