La decisión la tomó esa cartera el 9 de junio. Según se lee en el acto administrativo, la decisión la toma para analizar las observaciones que varias empresas internacionales y nacionales enviaron criticando las condiciones del proceso.

¿Por qué había alertas sobre esa licitación?

Porque las condiciones en los pliegos definitivos del proceso de contratación favorecían al actual proveedor, Thomas Greg & Sons.

El ganador de la licitación debía montar todo el andamiaje para empezar a trabajar en dos meses, por lo que el actual proveedor tenía la ventaja.

Los candidatos a la licitación tenían que mostrar modelos de pasaporte con “la misma línea de diseño y temática del pasaporte ordinario actual”.

La evaluación que hace la Cancillería está basada en un puntaje, que, con las condiciones actuales de Thomas Greg & Sons, favorece a esa compañía.

Aquí les dejo los detalles sobre cómo la Cancillería favorecía a esta compañía.

¿Qué sigue ahora?

Como el contrato actual con la proveedora va hasta el 31 de agosto, por lo que lo más probable es que tengan que alargar el actual bajo la figura de urgencia manifiesta (para no afectar el trámite de pasaportes) y utilizar ese tiempo adicional para adelantar la licitación.

La pregunta es si la Cancillería cambiará las condiciones de la licitación para abrir la competencia.