Aunque el ministro de Hacienda sonaba insistentemente y estaba entre los candidatos a votar hoy, la junta directiva del Banco central no lo eligió.
La elección se hizo de manera virtual y secreta, a través de un sistema informático que, según nos dijeron fuentes del Emisor no permitió ver cómo quedó la votación final, solo el resultado.
Así, un pulso que pasó incluso por la Corte Constitucional y en el que Carrasquilla pintaba fuerte porque el saliente gerente, Juan José Echavarría, renunció a la reelección, terminó con una decisión que baja la espuma.
Eso porque Villar es un economista reputado que no solo fue codirector del Banco por doce años, sino que también fue director de Fedesarrollo y actualmente es miembro del directorio del Fondo Monetario Internacional.
Pero también porque la posibilidad de que un ministro de Hacienda pase directamente a manejar una entidad clave en la política macroeconómica y que la Constitución (y la ortodoxia) definen como autónoma, había prendido muchas alarmas.
De hecho, el fin de semana el debate se calentó por este trino del expresidente Álvaro Uribe, esta columna del presidente de Fedegán, el uribista José Felix Lafaurie (ambos a favor de elegir a Carrasquilla como gerente del banco) y esta editorial del diario El Espectador, en contra.
Claro que, mientras tanto, un par de horas antes el presidente Iván Duque logró que el Senado eligiera a otra amiga: Paola Meneses, cercana desde que estaban en el colegio, es la nueva magistrada de la Corte Constitucional. Acá pueden saber más de ella.