Con una votación de 6 contra 3, la Sala Plena de la Corte Constitucional amplió el derecho a la eutanasia a quienes no tengan una enfermedad terminal. Lo hizo después de estudiar una demanda contra la norma llamada ‘homicidio por piedad’ que da entre 16 y 54 meses de prisión a las personas que causen la muerte de otras por piedad.
La demanda decía que esos limitantes generaba impedimentos para la eutanasia, pues al no ser pacientes terminales, algunas personas no podían acceder a ésta y eso vulneraba el derecho a la integridad física, la dignidad, la igualdad y otros.
Según El Tiempo, el Ministerio de Salud le dijo a la Corte que al extender la eutanasia “genera riesgos penales para los profesionales de la medicina ante una conducta que difícilmente puede ser justificada de manera objetiva por medio de parámetros clínicos específicos, en tanto reduce la solicitud al sufrimiento y la competencia mental”.