El líder chocoano aseguró que no están dadas las condiciones de seguridad para mantenerse en el país. Eso, ante la tercera amenaza de muerte que recibe en menos de dos años. “Es un país que en estos momentos me está mostrando que las posibilidades de que yo siga viviendo aquí son muy nulas y las amenazas son muy graves. Pero este es un país que también me está mostrando unos niveles de impunidad muy altos frente a las investigaciones de lo que me está pasando. Estoy considerando la posibilidad de salir de Colombia”., dijo en rueda de prensa en las oficina de la ONU. 

Este es otro campanazo sobre la situación de seguridad que viven los líderes sociales. Como contamos en nuestro balance anual de asesinatos de líderes sociales –lo pueden consultar acá– el año pasado fue el más violento para los líderes desde 2016.