¡Buenos días a todos! Soy Julián Huertas y estaré contándoles todas las noticias de la mañana. 

Cuenta la W esta mañana que la familia del líder conservador, Álvaro Gómez Hurtado, puso una tutela ante la sección de revisión de la Justicia Especial de Paz para tratar de frenar las audiencias de los exguerrilleros Carlos Antonio Lozada y Rodrigo Londoño en las que explicarán su versión del asesinato de Gómez. 

La familia argumenta que no se pueden hacer esa audiencias porque la JEP no ha creado un macrocaso, por fuera de los siete que ya tiene, sobre el asesinato de Gómez Hurtado y otros asesinatos que hayan cometido. Ya habían puesto un recurso con este mismo argumento pero lo perdieron. 

Además, insisten en que Lozada, al ser senador, debería ser investigado por la Corte Suprema luego de que aceptara participación en el asesinato del líder conservador. 

La familia, como hemos contado en El País en Vivo, está tratando de evitar que los testimonios queden oficialmente en la JEP, pues ellos consideran, como dijo Enrique Gómez en esta entrevista, que dejar esas versiones en manos de esa justicia es como dejarlas en manos de las Farc. 

Algo que es absurdo en la medida en que la JEP no fue creada por la extinta guerrilla de las Farc y es independiente de los comparecientes.

El objetivo de esos recursos es deslegitimar a esa justicia, pues se alinea con la narrativa que el uribismo ha tratado de impulsar desde antes de que se integrara la JEP. 

Su pelea es para que los exguerrilleros vayan a la justicia ordinaria. 

Les dejo el auto de la JEP del recurso que ya perdió la familia Gómez: 

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