“Fue una elección rara”, fue la conclusión en común de las diferentes campañas en Neiva. Aunque hubo movimiento de carros y buses de campañas como las de Rodrigo Villalba a la Gobernación, o Germán Casagua en Neiva, la sensación es que las maquinarias estuvieron contenidas.

Hay diferentes versiones del porqué. Por un lado, la suspensión al alcalde de Neiva, Gorky Muñoz, por presunta participación en política a favor del candidato Wilker Bautista, contuvo a su equipo. De hecho, en la mañana apareció un audio en el que Muñoz, al parecer, dice que “no hay nada, porque nosotros estamos cercados, estamos en un problema verraco”.

Otro factor es el de los pasos de las autoridades. Desde dos campañas nos aseguraron que durante la semana notaron seguimientos “sospechosos”, de personas que creen eran agentes encubiertos. Y que eso asustó a la gente. Eso sumó a la campaña que promovió el gobierno para pagar a denunciantes de compra de votos.