La magistrada del Tribunal de Bogotá Ximena Ortega revocará la decisión de una juez de garantías que decidió que se debía incluir a Deyanira Gómez, expareja de Juan Guillermo Monsalve, testigo estrella en el proceso contra el expresidente Álvaro Uribe por presuntamente haber torcido testigos, como víctima.
La decisión de la magistrada se basó en que Gómez no es víctima directa ni inderecta de los dos delitos por los que el expresidente es investigado: fraude procesal y soborno a testigos en actuación penal.
La argumentación fue muy parecida a la que hicieron en la audiencia de primera instancia tanto la Fiscalía, como el delegado de la Procuraduría y Jaime Granados, y se basó principalmente en dos razones:
1.Los hechos que detalló el abogado de Gómez para pedir que la acreditaran como víctima ocurrieron después de que se configuraran los presuntos delitos que Uribe habría cometido.
2.Las afectaciones a Deyanira no están relacionadas directamente con los hechos jurídicamente relevantes por los que la Corte Suprema de Justicia llamó a indagatoria a Uribe (presuntos ofrecimientos a testigos a través de terceros para que declararan a su favor y en contra del senador Iván Cepeda)
Lo que el apoderado de Gómez argumentó fue que ella debía ser reconocida como víctima porque a raíz de su participación en el proceso (fue la que le entregó el reloj grabadora a Monsalve y se reunió con Diego Cadena –abogado de Uribe– y lo grabó), empezó a sufrir hostigamientos e incluso tuvo que salir exiliada del país porque existían riesgos para su vida.
Sin embargo, la magistrada determinó que esos son hechos que pueden ser investigados y que se enmarcarían en presuntos delitos como “constreñimiento ilegal o amenaza a testigos”. Pero aclaró que debían ser esclarecidos en un proceso diferente al actual.
En el caso del periodista Gonzalo Guillén, la magistrada consideró que no podía estudiar de fondo la petición porque parte de la argumentación de su abogado se basó en trasladarle al Tribunal una demanda de constitución de parte civil que había sido radicada en la Corte Suprema de Justicia -cuando ese tribunal tenía el proceso- para ser reconocido como víctima, cuando en la primera instancia no usó esa argumentación.
Además, dijo que, en todo caso, Guillén tampoco era víctima de los dos presuntos delitos por lo que Uribe está en el proceso.
Esto quiere decir que, por ahora, no habrá nuevas víctimas en el proceso contra el expresidente, quien se anota un triunfo.
Lo que viene
Tras la decisión, tanto el abogadode Deyanira Gómez, como el de Gonzalo Guillén, anunciaron que interpondrán una tutela para revocar el fallo porque consideran que a sus clientes se les violaron derechos fundamenatales al no ser reconocidos como víctimas.
Si las tutelas piden que como medida cautelar no se adelante la audiencia de preclusión en el caso Uribe hasta que no se resuelva por esa vía si Gómez y Guillén deben ser reconocidos como víctimas, el proceso podría alargarse aún más si los jueces que estudien esas acciones consideran procedente esa medida.
Esa demora dependería de lo que tarden en resolverse esas tutelas en primera y segunda instancia.
Por ahora, el proceso deberá regresar al Juzgado 28 de Conocimiento que es el que tiene en sus manos la decisión de primera instancia sobre la solicitud de la Fiscalía de pedir la preclusión en el caso Uribe.
Eso se hará en una audiencia que deberá ser programada en los próximos días, pero cuyo avance dependerá del trámite de las tutelas que ya anunciaron los abogados de Gómez y Guillén.