Con el llamado de Álvaro Uribe a no llamar a Petro neocomunista ni al Centro Democrático como la ultraderecha, el líder del Centro Democrático levantó ampolla en su propio partido. Rafael Nieto Loaiza dijo que la reunión de Petro y Uribe le pareció desafortunada, y que Uribe no debería ser el único líder de la colectividad. La división llega en un momento en el que el partido ha perdido fuerza en el Congreso: pasó de tener 52 curules en 2018 a 28 en 2022, y es, por ahora, el líder solitario de la oposición.
Mientras la derecha en Colombia pasa a la retaguardia, en otras partes del mundo, como Italia, llega al poder en una gran coalición de partidos, y en las contiendas electorales latinoamericanas, como en Brasil, sigue teniendo fuerza, como demostró el paso de Bolsonaro a segunda vuelta.
Para entender mejor la derecha colombiana, la Silla Académica entrevistó a Manuel Alejandro Rayran, profesor de la Facultad de Finanzas, Gobierno y Relaciones Internacionales de la Universidad Externado de Colombia y autor del artículo “El nacional-populismo y sus consecuencias en el orden internacional” y a Mauricio Jaramillo Jassir, profesor del Centro de Estudios Políticos e Internacionales de la Universidad del Rosario y autor del artículo “La desilusión democrática en la región andina”.