Candidatos que van por firmas: “No queremos que nos dejen sin aval”

Candidatos que van por firmas: “No queremos que nos dejen sin aval”
2testimonios-candidatosconfirmas.jpg

Liliana Rendón en Medellín; Humberto Sánchez en San Vicente del Caguán; Guillermo García Realpe en Nariño y Fabián Gómez en Pereira, optaron por el camino de las firmas.

Con las elecciones muy lejos ya hay una explosión de las candidaturas por firmas. Faltan nueve meses para las regionales y en la Registraduría ya hay inscritas 323 candidaturas que se quieren avalar por firmas. Es el doble de las registradas para esta fecha en 2019.

El camino de las firmas, que fue pensado originalmente para permitir candidaturas independientes, podría ser el más transitado en estas elecciones. Todo apunta a un nuevo récord. Al mismo tiempo, también hay una explosión de nuevos partidos políticos. Dos fenómenos que se suman para generar una gran fragmentación política que no se veía desde hace décadas.

La tendencia de las firmas ya no es solamente el camino natural de los debutantes independientes en la política. También se volvió el plan de políticos de carrera que se salieron de los partidos alegando falta de garantías o que no quieren que los marquen.

Además, entre los candidatos regionales hay cada vez más conciencia de las ventajas que supone ir por ese lado. Permiten al aspirante hacer campaña desde mucho antes, durante la recolección, sin tener que reportar gastos hasta inscribir la candidatura. Además, el número de firmas que deben recoger en las regionales es relativamente fácil de conseguir: un 20 por ciento del censo electoral de la circunscripción o un máximo de 50 mil firmas.

De las 323 candidaturas que están recogiendo firmas, 277 son para alcaldías, 19 para gobernaciones, 4 para asambleas, 18 para concejos y 4 para juntas locales.

La Silla recogió voces en cuatro regiones del país para explicar este nuevo boom. 

— “No quiero que me dejen sin aval como en el 2015”

Liliana Rendón, exsenadora conservadora y excandidata uribista. Va por la Alcaldía de Medellín.

Yo vengo de una línea conservadora. Fui elegida para el Concejo de Medellín dos veces, a la Cámara de Representantes y al Senado una vez. Siempre por la línea conservadora ¿Qué pasa aquí en este momento? Que no hay garantías en el partido Conservador, que acá está absolutamente dividido. La base conservadora no está de acuerdo con las alianzas del director nacional del partido, Carlos Trujillo, con el alcalde Daniel Quintero.

Lo otro por lo que decidí inscribir mi movimiento ‘lilianista’ es que no quiero que me pase lo de hace unos años. En 2014 yo era senadora y renuncié para presentar una candidatura a la Gobernación de Antioquia por el Centro Democtrático. En esa época el Centro Democrático no existía. El departamento lo empecé a recorrer yo con el doctor Álvaro Uribe. Empezamos a fundar los equipos cuando no existían ni las Paolas Holguin ni las Palomas Valencia.

El expresidente Uribe como jefe político puso cinco pruebas para los precandidatos que queríamos el aval del Centro Democrático. Yo las gané todas. Una prueba de foros, y la gané. Una prueba de debates en televisión, la gané. Un evento que se hizo con 5 mil personas, gané. Una encuesta, la cual yo gané con el 42 por ciento a Andrés Guerra que tenía el 12 por ciento. O sea, que fue una barrida total. Como les gané a todos en mayo, me entregaron el aval firmado y ese día me fui para mi finca tranquila.

Pero esa misma tarde me llega un mensaje de Bogotá donde me decían que por razones políticas no podían darme el aval. No había ninguna razón de eso, nunca tuve problemas dentro del equipo. Me dejaron tirada sin ninguna razón válida, solo por presión de unos empresarios. Yo iba a ser la gobernadora, en todas las encuestas marcaba eso, y me quitaron la gobernación de la mano.

Entonces, tratando de alejarme de esa dependencia de los partidos para aspirar en estas elecciones, ¿qué hago?. Decidí recoger mis firmas. Ya llevo casi 40 mil firmas. Nadie me dice que no. Solamente un señor un día me dijo que no, ¿sabe que me contestó? Me dijo que no, que las viejas cogieran oficio y que mejor me fuera a cocinar.

Pero la verdad estoy muy contenta. Así no hay riesgo, en este momento que hay esta polarización tan grande, de uno entrar a un partido y que lo dejen tirado como me pasó en 2015.

— “Es mejor que lo que venía haciendo con una militancia cerrada”

Guillermo García Realpe, exsenador del partido Liberal. Va por la Gobernación de Nariño.

Yo ya no tenía ninguna cercanía con el partido Liberal al que pertenecí por tantos años y del que fui senador hasta el año pasado. Al menos con la actual dirigencia de César Gaviria que no me quería por ser el patito feo, el hombre rebelde. Ellos votaron tratados de libre comercio, votaron reformas tributarias, reformas Carrasquilla. Estuvieron con Iván Duque, votaron por Fico, luego por Rodolfo. Yo voté por Gustavo Petro. Ahí dije no hay nada que hacer. Renuncié al partido Liberal y en esta aspiración a la Gobernación decidí irme por firmas.

Opté por un movimiento ciudadano. ¿Por qué razón?. Para que la gente no diga que yo me paso del Partido Liberal a otro partido de manera intempestiva. Para que no me digan que bueno, que me la paso de rama en rama. De pronto me mezclan con otros y me van a criticar.

Entonces nos tocó desde la base, desde la calle, desde, digamos, desde la ciudadanía. Y me siento contento, muy motivado, algo nuevo para mí, mejor que lo que venía haciendo con una militancia cerrada, arraigada al partido Liberal.

En este camino de las firmas la gente se siente convocada, se siente invitada. La firma para la gente implica un mandato, dice yo firmo por usted, pero usted tiene que asumir, pues, una actitud decente, decorosa y eficiente.

Tampoco es que sea un camino de rosas. Por este lado el trabajo es bien fuerte y sobre todo en regiones como Nariño, que es un departamento de la cordillera, con carreteras complicadas de difícil movilidad para ir a los pueblos a conseguir las firmas. La movilidad es en ríos, en bajamar y en mar. Y nos toca, nos toca, porque hay que recoger 200.000 firmas para que valga la pena.

— “No votar por un partido, sino por una persona”

Humberto Sánchez Cedeño, uribista. Va la Alcaldía de San Vicente del Caguán, Caquetá.

Me fui por firmas por el mismo desgaste que tienen los partidos políticos. Yo creo que la gente ha cambiado su visión y percepción. No votar por un partido, sino por una persona, por un personaje. Avalarse por ahí es enmarcarse uno dentro de una casilla de un partido, defendiendo unos ideales, una filosofía, un pensamiento. Y cuando ese partido lo deja a uno solo, lo deja botado, lo ha tirado, no justifica darse la pelea por ese partido como me pasó el periodo pasado que fui alcalde por el Centro Democrático.

Entre 2016 y 2019 que fui alcalde ¿se acuerda que tuvimos gobierno? Tuvimos presidente al doctor Iván Duque, tuve representante a la Cámara con Edwin Valdés y la verdad nos dejaron solos. Yo me la pasaba defendiendo a la gente y defendiendo al partido de la guerrilla y nunca hubo apoyo para los proyectos de inversión. Nunca.

Afortunadamente un municipio como San Vicente del Caguán no depende exclusivamente del Gobierno Nacional. Tienen regalías, tienen un buen recaudo de impuestos del comercio. Con esa autonomía territorial y presupuesto se pueden hacer cosas sin necesidad de un partido.

Acá el Centro Democrático tiene mucha resistencia por parte de los mismos disidentes. En el área rural las personas no iban a poder hablar de un candidato del Centro Democrático.

Entonces tomamos la decisión de hacer un grupo de recolección de firmas. Por ese lado hay más libertad, certeza y probabilidades de ganar. Usted con las firmas hace una precampaña, avanza porque la gente lo va conociendo más y cuando usted ya esté listo para inscribirse prácticamente tiene media campaña hecha.

Está demostrado que es más exitoso recoger firmas porque usted le traslada la responsabilidad a los ciudadanos. Y gran parte de las personas que firman y le ponen la huella ahí en el formulario tienden a votar por uno después.

— “Los partidos ya tienen unos liderazgos muy definidos a su interior”

Fabián Gómez, consultor político. Va para la Alcaldía de Pereira.

Yo tengo una formación académica en ciencia política. Tengo experiencia como consultor y estratega político de unas 50 campañas nacionales. Pero he aclarado que a pesar de eso no tengo militancia política. Al no tener esa condición de militante ni de partidista pues vemos en la posibilidad de las firmas el camino más indicado para tramitar nuestra candidatura a la Alcaldía.

Soy respetuoso de los partidos políticos, reconozco que cada uno de ellos en su interior tienen sus reglamentos, sus estatutos, su capacidad de escogencia de candidaturas a los cargos de elección uninominal. Pero pues para nosotros, al no tener historia política, historia de militancia, historia de los partidos, es complejo ingresar a cualquiera de ellos.

Los partidos ya tienen unos liderazgos a su interior muy definidos, gente que ha venido haciendo procesos políticos o procesos partidistas abiertos y respetamos y reconocemos ese trabajo y por eso no consideramos la opción de ingresar a ninguno de ellos.

Ir por firmas permite la posibilidad de representar un proyecto realmente ciudadano y poder hacer tempranamente una campaña o un despliegue, pues de este trabajo, de campaña electoral. Lo cual creo que está bien porque uno se enfrenta a rivales que vienen con proyectos políticos de muchos años.

También tiene desventajas. Como el tema de financiación, que eso siempre es uno de los puntos fuertes que tenemos nosotros en el debate político. Los costos que significa tener una campaña de esa naturaleza tan anticipadamente. Y también, pues las dificultades de no contar con una estructura política como sí lo tienen los grupos o los contendores a los que uno enfrenta.

Para mí ha sido importante y relevante acompañar proyectos políticos que surgen con independencia y que enfrenten a castas o elites políticas, que han tenido el dominio y el poder en ciertas regiones del país. Ahora me propuse liderar una en nombre propio, en primera persona.

Yo vengo desde hace varios años expresando públicamente mi oposición al gobierno actual que tiene la Alcaldía de Pereira, que ya son ocho años de ese grupo gobernando. Tenemos una meta de 100 mil firmas para consolidar la campaña.

— “La gente lo interpreta como que esta persona no es política”

Marco Orozco, emprendedor digital. Va por la Alcaldía de Barranquilla.

El proceso independiente le permite a uno expresar más su identidad y no venir de una vez salpicado con los pecados o las acciones negativas que han hecho los partidos y que terminan adjudicándose al candidato.

Ante eso prefiero el camino de las firmas. Me permite conectarme con los ciudadanos, que para mí es la base a la que estoy apuntando. Con eso las personas sienten que uno no tiene una familia política, que no tiene, digamos, una clase política o alguna asociación específica con algún partido. La gente lo interpreta como que esta persona no es política.

Yo en eso tengo un marco de referencia. Me gustó mucho el modelo de comunicación y estrategia de marketing que implementó Rodolfo Hernández en su campaña presidencial por firmas. Es un modelo que me parece que conecta mucho con el ciudadano común. Adicionalmente, que facilita campañas como la mía, que no tienen un exceso de recursos y nos lleva a optimizar recursos en redes sociales. Entre más creatividad y más cercanía con el público en redes se permite que se optimice el alcance político.

Dicho esto, la meta inicial es recolectar 100 mil firmas para entregar en julio y así buscar la Alcaldía de Barranquilla.

Publicaciones

Únase a los Superamigos

El periodismo independiente que hace La Silla Vacía se financia, en parte, con contribuciones de nuestros lectores. Conviértase en SuperAmigo de La Silla, para que podamos seguir escribiendo sobre cómo se mueve el poder en Colombia. Adquiera su membresía aquí.

Compartir