La columna dominical de ‘Juan Paz’ en el diario El Mundo, que como contó La Silla era una de las más leídas en Antioquia y en muchos círculos políticos, fue suspendida indefinidamente por las directivas de El Mundo este fin de semana. La noticia, que pasó relativamente desapercibida en medio del puente de Reyes, marca la salida definitiva del uribismo de los principales medios, pero coincide con el surgimiento de varios medios cercanos a Álvaro Uribe o a sus aliados.

La columna dominical de ‘Juan Paz’ en el diario El Mundo, que como contó La Silla era una de las más leídas en Antioquia y en muchos círculos políticos, fue suspendida indefinidamente por las directivas de El Mundo este fin de semana. La noticia, que pasó relativamente desapercibida en medio del puente de Reyes, marca la salida definitiva del uribismo de los principales medios, pero coincide con el surgimiento de varios medios cercanos a Álvaro Uribe o a sus aliados.

“Los pájaros dormidos”, y especialmente William Calderón (al medio) han manifestado su molestia por la suspensión indefinida de la columna de Juan Paz.

Libardo Botero es uno de los uribistas que se lanza al periodismo. Es el líder del proyecto del periódico digital Debate.

La decisión de El Mundo, que publicó inicialmente el portal periodístico Eje 21, se debió a una decisión editorial del diario, según su editora Irene Gaviria, hija del director y dueño, Guillermo Gaviria Echeverri, y hermana del alcalde de Medellín, Aníbal Gaviria. La editora argumentó que el periódico quería menos chivas y más periodismo que analice y que construya ciudadanía, un enfoque en el que la columna de Juan Paz no cabría.

Pero William Calderón, que era uno de los colaboradores de Juan Paz, dijo en su columna de ayer en El Nuevo Siglo que la decisión se tomó por presión de la Casa de Nariño. Irene Gaviria respondió esta mañana. Afirmó que eso es “totalmente falso” y que la decisión se venía planeando desde hace varios meses.

Ese revuelo, y el que esta mañana Gaviria haya sido entrevistada en Caracol y en La FM, muestra que la columna de Juan Paz no era una columna cualquiera.

¿Quién era Juan Paz?

Bajo la coordinación de Jaime León García, jefe de redacción de El Mundo, desde hace casi 20 años todos los domingos salía una sustanciosa columna de confidenciales políticos. Aunque era muy exitosa en círculos políticos y periodísticos, afuera de Antioquia no era muy leída.

Como la firmaba un seudónimo, la responsabilidad del contenido estaba en cabeza de la dirección del periódico que, según dijo Irene Gaviria, tuvo que rectificar en varias ocasiones los contenidos de la columna. Eso le quitaba credibilidad a la columna pero no fue el motivo directo de su suspensión, según Gaviria.

Aunque la columna estaba firmada por Juan Paz (quien se refería a si mismo en tercera persona, como si fuera una persona real), en la práctica se trataba de un espacio colectivo. El papel de García era recibir contribuciones de diferentes personas, seleccionarlas y unificarlas. Y esa variedad de fuentes, según dijo Gaviria en Caracol mostraría que la columna no era uribista.

Sin embargo, dos hechos indican que, por lo menos, en ella sí había voces uribistas o de derecha, y claramente críticas del gobierno de Juan Manuel Santos. Según José Manuel Acevedo, analista de RCN Radio, algunos de los colaboradores más usuales eran Gustavo Álvarez Gardeazábal, ex gobernador del Valle del Cauca y periodista de La Luciérnaga, el ‘barquero’ William Calderón, Óscar Domínguez y el periodista antioqueño Orlando Cadavid Correa, todos ellos críticos de Santos.

Pero también se habla de José Obdulio Gaviria y de Gabriel Jaime Rico, ex precandidato de La U a la Alcaldía de Medellín cercano a Álvaro Uribe.

Además, la columna era muy cercana al grupo de derecha “Los pájaros dormidos” , como explicó el portavoz de ese grupo y periodista William Calderón en su columna de El Nuevo Siglo de ayer . Calderón dejó ver su molestia con la suspensión de la columna: habló de un “golpe de mano” y anunció que Los pájaros dormidos van a elaborar “una declaración de rechazo a este proceder contra la libertad de expresión”.

Pero no solo varias de las fuentes son cercanas a Uribe, sino que Juan Paz era un duro crítico del gobierno Santos. Sólo en la más reciente columna se encuentran varios dardos, incluyendo una frase muy fuerte: “Juan Paz se los había anticipado desde que Santos se posesionó: este es un gobierno para los ricos. La reforma tributaria lo confirma”. Otro ejemplo: “Al presidente Santos no le faltaron sus puyas contra Uribe el jueves en la rendición de cuentas. Sobre todo, para decir que su gobierno no ha bajado la guardia en seguridad. Aunque otra es la percepción de la gente que se atreve a salir a las carreteras”. Ese tipo de críticas hacen que no extrañe la acusación de Calderón de que la Casa de Nariño está detrás de la suspensión.

En contraste con esa actitud frente a Santos, para Uribe hay claros guiños. Un ejemplo de marzo del 2012: “El público que llenó el pasado martes el inmenso auditorio de la Universidad de Lima, aplaudió el ingreso al escenario del expresidente Álvaro Uribe Vélez, igual que si fuera la aparición de un ídolo del rock”.

Juan Paz fue  un permanente crítico de la negociación con las Farc, le dio importancia a lo que opinan uribistas como Luis Carlos Restrepo (antes de exiliarse) o José Obdulio Gaviria y no dejó de recordar escándalos como el de Fondelibertad, recordando siempre la vinculación entre el ex director de esa entidad enredado en malos manejos, Harlan Henao, y la campaña presidencial de Santos. 

Por eso, aunque Juan Paz haya mostrado cierta diversidad y haya sido más antisantista que uribista, su suspensión le cierra al uribismo uno de los pocos espacios que mantenía en los medios.

Lo que se viene en los medios

La barrida del uribismo de los grandes medios, con salidas como la de Pacho Santos de RCN Radio, la de José Obdulio Gaviria de El Tiempo, no es nada nuevo. Aunque se ha mencionado poco, La Hora de La Verdad, de Fernando Londoño Hoyos, también sufrirá recortes: como la Cadena Super le va a arrendear frecuencias a RCN, al parecer su programa ya solo se emitirá en Medellín, Cali y Bogotá. En esa medida, la suspensión de Juan Paz muestra la fuerza de esa tendencia.

Pero los grupos cercanos a Uribe no se han quedado quietos. Como cada vez tienen menos espacios en los grandes medios (aunque mantienen algunos, como las columnas de Fernando Londoño Hoyos en El Tiempo o la de Ernesto Macías en El Espectador), han ido surgiendo varias iniciativas de medios propios. Aunque la noticia más sonada sea la del posible noticiero en televisión, al parecer dirigido por Francisco Santos, no es la única.

Un medio cercano al uribismo es la Revista Posición, que nació en julio pasado y dirige Federico Hoyos, quien trabajó en la campaña de Federico Gutiérrez a la alcaldía de Medellín en 2010. La Revista ha defendido la reelección de Alejandro Ordóñez en la Procuraduría, solamente ha entrevistado a uribistas (empezando por Álvaro Uribe, y luego a Alfredo Rangel, JJ Rendón, Óscar Iván Zuluaga y César Mauricio Velásquez) y tiene columnistas muy cercanos al ex presidente como Jaime Jaramillo Panesso, Alfredo Ramos (hijo del ex gobernador de Antioquia Luis Alfredo Ramos) la tuitera Erika Salamanca, el ex viceministro de Defensa Alejandro Arbeláez o el ahora precandidato presidencial del Puro Centro Democrático José Félix Lafaurie.

Por otro lado, el Centro de Pensamiento Primero Colombia está a punto de lanzar un periódico virtual. Libardo Botero, director académico del Centro, está detrás de ese proyecto, y le dijo a La Silla que aunque la idea viene de tiempo atrás, la barrida del uribismo de los grandes medios (que para él incluye la suspensión de la columna de Juan Paz) aceleró la puesta en práctica. El periódico se va a llamar Debate y, aunque tendrá secciones de información y de opinión, quiere tener su fuerte en lo segundo. Y eso gracias a columnas de reputados uribistas como Plinio Apuleyo Mendoza, Saúl Hernández, José Obdulio Gaviria, Rafael Guarín, Jaime Jaramillo Panesso y Eduardo Mackenzie.

Este año, en el que se definirá si Santos va por la reelección y si logra un acuerdo con las Farc, su oposición desde la derecha arranca con mucha menos presencia en los medios establecidos. Y aunque tiene el potencial de posicionar medios propios que, de resultar exitosos, podrían ser claves para las campañas de 2014, los malos resultados en rating de experimentos como el de ‘Pacho’ Santos en RCN muestran un camino cuesta arriba.

Fui usuario y luego periodista de La Silla Vacía. Tras más de una década haciendo de todo en esta escuela de periodismo, de la que fui director editorial, me fui a ser lector y SuperAmigo. Ahora me desempeño como redactor jefe de El País América Colombia.