Por décima vez en 22 años y por primera vez para Petro, los empresarios, el Gobierno y los sindicatos lograron acordar un incremento concertado del salario mínimo en quince días.
Como lo contó este jueves La Silla, las tres partes acordaron subir el mínimo 16 por ciento, un poco más de dos puntos por encima del piso, que era de 13,77 por ciento.
El acuerdo estaba listo desde el medio día cuando la ministra de Trabajo, Gloria Inés Ramírez, salió de la mesa de concertación en Cafam Floresta a decir a los medios que ya había un acuerdo.
En ese momento, Jaime Alberto Cabal, presidente del gremio de los comerciantes, Fenalco, también le dijo a los medios que ya había un acuerdo, pero que Petro saldría a hacer el anuncio oficial hacia la una de la tarde.
En ese periodo de tiempo, varios medios salieron con el dato de que el mínimo subiría 16 por ciento, pero que faltaba el visto bueno del presidente Petro para hacer oficial la cifra.
El anuncio de Petro
Finalmente, casi a las 2 de la tarde Petro hizo el anuncio desde Catam al lado de la minTrabajo, los representantes de los gremios empresariales y de los sindicatos. La alocución duró casi cinco minutos y Petro sacó pecho de lo que significa para el país haber llegado a un acuerdo en estos momentos.
“Espero que con esto se recupere el poder de compra que se ha perdido en los últimos meses en virtud de la inflación”.
Después de la intervención de Petro, la ministra de Trabajo, Gloria Inés Ramírez, anunció otros acuerdos a partir de los cuales pretenden que la inflación, que está disparada, no se termine comiendo el aumento concertado.
Primero, seguirán desvinculando del aumento del mínimo el aumento de otros factores, lo que se conoce como desindexación. Ramírez dijo que el lunes darán a conocer un decreto con el que van a desindexar 50 productos y servicios.
También, y como lo había adelantado La Silla Vacía, revisarán cómo bajar los precios de los medicamentos, de la energía eléctrica, subsidiar los fertilizantes (claves en la producción de alimentos) y cambiar el cálculo de la tasa de usura para que no sea tan alta.
Para llegar a esos acuerdos, a la mesa de concertación invitaron a delegados del ministerio de Hacienda, de Agricultura, de Minas y Energía para revisar la viabilidad de las propuestas y hacer un compromiso ante los trabajadores y empresarios.
La negociación sin la cifra
Esas medidas antinflacionarias fueron la carta de negociación más poderosa que usaron el Gobierno y los empresarios con los sindicatos, que fueron los que llevaron esas propuestas a la mesa.
Las mesas de negociación se centraron en revisar esas medidas, pero no en la cifra. Los empresarios cambiaron su estrategia en la era Petro y nunca destacaron públicamente su carta de negociación, pero en privado estaban en el 16 por ciento.
Al final, esa postura funcionó para que el Gobierno tomara el liderazgo de la negociación y asumiera el costo del tire y afloje con los sindicatos, que propusieron un aumento del 20 por ciento.
