“Como es una coalición de cambio y de oposición, es una coalición que quiere mantenerse alejada de lo que significan los partidos tradicionales que acompañan al Gobierno Duque”, dijo Juan Fernando Cristo la semana pasada en una entrevista radial.
En Norte de Santander Cristo sigue haciendo política tradicional

Cristo, quien es hoy uno de los precandidatos de la Coalición de la Esperanza, ha logrado construir una apariencia de distancia con la política tradicional. Primero fue su renuncia al Partido Liberal y la creación de su movimiento En Marcha, en 2018. Luego su acercamiento y apoyo a políticos alternativos. Empezó con Claudia López, durante las elecciones locales de 2019. Y luego entró a la Coalición de la Esperanza, la coalición de centro que lidera Sergio Fajardo.
Todo esto, enmarcado en su imagen de progresista, alimentada por ser el autor de la Ley de Víctimas cuando fue senador y su trabajo por el Acuerdo de paz desde su rol de ministro del Interior de Juan Manuel Santos.
Pero la casa Cristo mantiene representación en el Partido Liberal, con una curul en el Senado que ocupa su hermano, Andrés Cristo, desde 2014. Es la misma curul que ocupó Juan Fernando, entre 1998 y 2014, quien, a su vez, la había heredado de su padre, Jorge Cristo Sahium, asesinado por el ELN en 1997.
Y aunque públicamente Andrés Cristo también se ha apartado de la dirección del partido, el trabajo político de la casa Cristo en Norte de Santander, donde tienen la mitad de los votos de su Senado, sigue dependiendo de acuerdos clientelistas y transacciones de favores con el Gobierno Nacional, incluso el de Iván Duque.
A diferencia de la oposición de la Coalición de la Esperanza a incluir en el bloque de centro a Alejandro Gaviria, por su afiliación con los liberales, frente a la casa Cristo hasta ahora no hay reproche.
La cara de los Cristo en Norte de Santander
“Los Cristo están jugando al dios y al diablo. Por un lado, posan de alternativos con los verdes y la Coalición de la Esperanza pero por otro, siguen usando su espacio en el partido Liberal para mantenerse en la esfera de poder. Llevan 30 años en esa curul, ¿cómo la van a soltar así de fácil?”, nos dijo un político y empresario de Norte de Santander que fue parte del grupo político de los Cristo, y que pidió no ser identificado para discutir dinámicas internas.
Cuando Juan Fernando Cristo renunció al partido Liberal, tras el apoyo del expresidente César Gaviria a la candidatura de Iván Duque, su hermano acababa de ser reelegido. Andrés Cristo continuó en la curul familiar hasta hoy, a pesar de que su hermano ha lanzado ataques al partido y a César Gaviria.
Hoy, como parte del grupo que fundó, llamado En Marcha, es precandidato presidencial dentro de la Coalición de la Esperanza desde que nació.
Según el representante a la Cámara por Dignidad, Jorge Gómez, quien hace parte de la Coalición de la Esperanza, nos dijo que la impresión que le daba es que Juan Fernando y Andrés eran dos toldas aparte.
Pero entre políticos de Norte de Santander la visión es otra. Que Juan Fernando sigue manejando los hilos del poder en su departamento.
“Juan Fernando podrá no tener votos pero es un estratega ni el hijuemadre. Por eso es que eso se habla directamente con él”, nos dijo uno de los políticos que ha acordado espacios burocráticos con el exministro.
Cristo no respondió a llamadas y mensajes dejados hace varios días buscando su versión.
Tal y como nos dijeron dos congresistas, dos políticos locales y un exmiembro de ese grupo, esos espacios son:
- La secretaría de Agua Potable y Saneamiento Básico departamental, en cabeza de Francisco Bermont.
- La dirección regional del Sena, a cargo de Wilmar Cepeda, nombrado hace cinco meses.
- La Procuraduría Regional con Libardo Álvarez.
- El Instituto Departamental de Salud, a cargo de Carlos Martínez.
- La Universidad Francisco de Paula Santander, en alianza con su director Héctor Parra.
Y mientras Juan Fernando está en Bogotá haciendo política contra la política tradicional y a favor del Acuerdo de Paz, su hermano Andrés ya empezó a hacer correrías para una posible reelección.
Lo más visible es la reciente actividad del senador Andrés, quien lleva un par de meses haciendo correría por las distintas provincias de ese departamento donde sacó la mitad de los 67 mil votos que tiene.
Incluso, un miembro de su equipo en esa región nos contó que están focalizando el trabajo en los municipios donde ven que tienen opción de crecer en número de votos.
“La orientación que me han dado es trabajar. Yo sigo viendo cómo puedo ayudar a la gente y en el momento que haya que recoger (apoyo para las elecciones) pues recoger”, nos dijo.
Aunque no nos explicó de qué manera su grupo ayuda a la gente, en Norte de Santander, tanto los Cristo como las demás casas políticas, como la del exgobernador William Villamizar o la del exalcalde condenado por un homicidio Ramiro Suárez, mantienen cohesionado a su equipo a través de espacios burocráticos que acuerdan y se reparten entre ellos.
El de la política menuda es un rol que conoce bien el exministro del Interior de Santos. Para la segunda vuelta reeleccionista, empujó el acuerdo con los verdes, el Polo y Petro para que lo apoyaran. Y también alineó congresistas que movieran maquinaria en los santanderes.
Como ministro del Interior fue puente para concretar la mermelada entre congresistas y Presidencia, y así mantener las mayorías en el Congreso.
Incluso hoy, cuando lidera una oposición abierta al Gobierno Duque, Cristo tiene tan buenas relaciones en Bogotá que encuentra cómo moverse en función de favorecer a su grupo político en Norte de Santander.
Así quedó en evidencia con el audio que La Silla reveló el año pasado, en el que el exministro Aurelio Iragorri hablaba de la negociación entre el partido de La U y Duque para nombrar defensor del pueblo nacional.
En el audio, Iragorri explica que Cristo le pidió ayuda para arreglar una cita con alguien de Gobierno para “un tema de la caja de compensación de Norte de Santander”, uno de los fortines que los Cristo estaban disputándose en la región en ese entonces.
Desde esas entidades, pescan votos. Un político cercano a contratistas de prestación de servicios del Sena nos contó que el director en Norte de Santander, Cepeda, ya ha empezado a dejar en el aire la idea de que quienes trabajen allí tienen que votar por el senado de los Cristo.
“Les ha dicho así, entre conversaciones informales cosas como que ‘el Senado aquí, por gratitud y compromiso, se les respeta a los Cristo’. Y se lo ha dicho a gente que no es del grupo de ellos sino que entró a través de otros”, nos dijo esa fuente.
Además, está la gestión ante el Gobierno Duque para conseguir inversión que ha hecho el propio Senador Andrés Cristo. Un político que lo sabe de primera mano y un congresista de la región nos dijeron que el Gobierno le aprobó a Andrés recursos para el nuevo hospital de Villa del Rosario, municipio del área metropolitana de Cúcuta, clave porque allí está ubicado el principal paso fronterizo del país.
Le preguntamos al Alcalde de Villa del Rosario, Eugenio Rangel, y nos dijo que aún no cantaba victoria, porque no tenía la resolución en la mano, pero que sí, el senador Cristo le había ayudado a gestionar esos recursos.
Sobre cómo lograron esa gestión, una fuente que lo sabe de primera mano nos dijo que había sido una retribución: “El Gobierno le dio esos recursos a Andrés Cristo y a Jairo Cristo (representante a la Cámara por Cambio Radical, no es de su grupo) porque le votaron sí a la reforma tributaria”, nos dijo una de esas fuentes.
Le preguntamos al senador Cristo, y aunque nos reconoció que votó a favor la reforma, nos dijo que no estaba relacionado.
“Le pregunta a un Alcalde y él cómo va a saber de eso. Esa fue gestión del gobernador de Norte de Santander, Silvano”, dijo.
Contexto
Dos caras, un solo Cristo
Cristo ha asumido una defensa férrea contra la entrada de otros partidos de centro a la Coalición de la Esperanza, como en el caso de Alejandro Gaviria apoyado por el partido Liberal. “Esa unidad no puede ser a costa de nuestros principios, ni de cálculos electoreros y mucho menos de terminar unidos con partidos que han apoyado el mal gobierno uribista de Duque”, dijo en una entrevista reciente con El Tiempo.
En cambio, ha empujado la idea de una lista cerrada de la Coalición para el Congreso. El movimiento En Marcha de Cristo tiene un grupo de precandidatos al Senado, entre los que figuran exministros de Santos y el hijo del expresidente Samper, Miguel Samper, que le apunta a hacer parte de la lista de la Coalición. La semana pasada ese grupo, junto a otros líderes como el exalcalde de Bogotá Lucho Garzón, cerró filas en apoyo a la precandidatura presidencial de Cristo con una carta pública.
Pero Juan Fernando, además de reunirse con ellos en sus respectivas regiones, no está promoviendo activamente a ninguno en particular, por ahora. Le preguntamos a aliados de Juan Fernando en tres regiones distintas a Norte de Santander y nos dijeron que él se ha limitado estrictamente a hablar por el proyecto presidencial de la Coalición de la Esperanza.
Aunque mantenga esa distancia hasta las elecciones, “va a ser muy difícil que Juan Fernando esté haciendo campaña contra los tradicionales y Andrés la esté haciendo dentro de los tradicionales”, nos dijo un político que está ayudándole a Cristo entre políticos locales en el Caribe. Otro que está haciendo lo propio en Santander coincidió.
Un miembro del grupo de los Cristo nos dio la posible fórmula a la que le apunten:
“Varios me han preguntado eso y lo que les decimos es: eso es como hacían los hermanos Galán que estaban en Cambio Radical y en el Partido Liberal pero representaban era al Nuevo Liberalismo. Andrés mantiene su curul donde toca por ley pero lo que se representa es otra cosa”, dijo.
El senador Andrés Cristo dice que aunque lleva ya meses encampañado, la decisión de aspirar nuevamente no quedará en firme sino hasta el día de inscripciones, a finales de este mes. Su aval depende del visto bueno de César Gaviria, el presidente del partido.
De cualquier forma, el trabajo que ha ido adelantando en Norte de Santander mantiene activo a su grupo político. Eso le funciona a Juan Fernando Cristo en la eventual consulta presidencial. Si bien Andrés Cristo nos dijo que está haciendo su campaña separada de la de su hermano, sí nos aclaró que ahora mismo, como el Partido Liberal no tiene candidato presidencial oficial, sí apoya su aspiración.
“Es el candidato del departamento y la gente lo conoce y lo pueden ir a apoyar en una consulta”, dijo Andrés Cristo.
Además, ese trabajo regional, con o sin Andrés al Senado, también les funciona para buscar mantener representación en Norte de Santander, incluso en la anticlientelista Coalición de la Esperanza.
En ese sentido, allá está sonando la candidatura a la Cámara de Jairo Alberto Castellanos, exalcalde de Toledo, Norte de Santander y miembro de esa casa política. Castellanos, quien fue alcalde por Cambio Radical, está buscando aterrizar en una eventual lista a la Cámara de Norte de Santander por la Coalición de la Esperanza.
El senador Cristo no nos negó ni afirmó que él o su hermano le buscarán el cupo a Castellanos en esa eventual lista de la coalición de la Esperanza, pero sí dijo que Castellanos era su amigo y que le parecía una buena opción. Tanto, que le había sugerido que buscara el aval Liberal, suponiendo una posible fórmula entre ellos.
Al final, donde sea, en el Liberal o en la Coalición de la Esperanza, estará bajo el techo de la casa política de los Cristo.