La captura de Ramiro Suárez es una victoria para Juan Manuel Corzo

 

 

El ex alcalde de Cúcuta, Ramiro Suárez, estaba haciendo campaña en los barrios de Cúcuta. Con su estilo del “puerta a puerta” acompañó la aspiración del liberal Andrés Cristo para la Alcaldía de la ciudad. Todas sus manifestaciones estaban llenas de gente que lo invitaban a que fuera él quien se lanzara.

Foto Portada: La opinión / Fotos interiores: La Lupa Cúcuta

Hace ocho días, Ramiro Suárez acusó al presidente del Congreso Juan Manuel Corzo de haberle presentado al narcotraficante extraditado Jensy Miranda como si fuera un empresario. Ese fue el punto más alto al que llegó la reciente pelea entre los dos ‘pesos pesados’ de la política de Norte de Santander donde hoy están enfrentados por la Gobernación y la Alcaldía de Cúcuta. Por eso cuando hoy se conoció la condena y captura del ex alcalde por orden del Tribunal Superior de Bogotá, a Juan Manuel Corzo se le vio como un ganador.

La disputa mediática de las últimas semanas entre Corzo y Suárez se originó a raíz de un artículo de La Silla Vacía que hizo una serie de cuestionamientos a Corzo antes de su elección como Presidente del Congreso relacionados con seis investigaciones de la Corte Suprema de Justicia, tres de ellas ya precluídas a su favor. En sus declaraciones a La Silla Vacía, Corzo dijo que Ramiro Suárez lo estaba persiguiendo. Suárez le respondió en El Tiempo el viernes ratificando sus señalamientos.

Édgar Díaz, quien se inscribió por firmas para la Gobernación de Norte de Santander, también era apoyado por Ramiro Suárez Corzo.
El candidato del liberalismo, Andrés Cristo, ha recibido muchas críticas por recibir la adhesión de Ramiro Suárez, pues su hermano el senador Juan Fernando fue uno de sus más recios contrincantes e incluso dijo en alguna ocasión que el ex alcalde lo había amenazado de muerte.

Aunque hoy son enemigos, Corzo fue fundamental en el ascenso político de Ramiro Suárez. De hecho, fueron Corzo y el senador Manuel Guillermo Mora quienes llevaron al que antes era un líder comunal, contratista y sin mayor poder político a la Alcaldía de Cúcuta en 2003.

Lo que hoy los separa son las elecciones de octubre. Los dos están en orillas opuestas tanto para la Gobernación como para la Alcaldía. Y, por eso, la captura del ex alcalde Ramiro Suárez cambia la movida política en la capital y en el departamento.

Corzo está impulsando a la Alcaldía al candidato del partido de La U Rafael Angarita y para la Gobernación al conservador Juan Alcides Santaella, quien ya fue gobernador en el período donde ocurrieron los hechos por los que hoy Ramiro Suárez fue condenado.

Y Ramiro está detrás de las candidaturas del liberal Andrés Cristo, el hermano del senador Juan Fernando Cristo, a la Alcaldía de Cúcuta y de Édgar Díaz, quien se inscribió por firmas para la Gobernación de Norte de Santander.

La captura de Suárez no significa la pérdida inminente de las dos campañas. Pero sí es un descalabro para ambas porque era Ramiro Suárez quien hacía la política en los barrios, de puerta a puerta, llevando mercados y repartiendo regalos. Lo que explicó un seguidor de Suárez a La Silla Vacía es que las campañas con él “iban en coche” no sólo por la campaña persona a persona en los sectores populares, sino también en la parte económica.

Y los votos de Ramiro Suárez en Cúcuta no son tan fáciles de endosar. Su popularidad entre la gente de estratos más bajos es tan alta que cuando comenzó su campaña en los barrios por Cristo, muchas personas le preguntaban que para qué les llevaba candidatos cuando él mismo podía lanzarse y contar con sus votos.

Esta historia se la contó a La Silla Vacía un político que estuvo con el ex alcalde en varias de sus correrías por los barrios. Nos explicó que esa admiración no es gratuita. Dice que es producto del carisma de Suárez y de los cientos de empleos que creó para la gente más pobre, muchos de ellos a través de asociaciones de mujeres que podían trabajar en múltiples labores. “Él no les solucionó los problemas a los pobres, ni a la ciudad, pero mientras estuvo en el cargo como Alcalde, hizo de todo para ponerlos a trabajar”.

Y ese dividendo siempre pesa en la contienda electoral. Mientras el ex alcalde Suárez estuvo en la cárcel en septiembre de 2007, en vísperas de las elecciones de Alcalde, sus seguidores se multiplicaron. En el sitio donde estaba encarcelado, en Cúcuta, a diario había filas de centenares de personas que pedían verlo y ese carcelazo duró dos años.

Y eso es lo que van a aprovechar los seguidores de Corzo que tiene su fortín electoral en Cúcuta.

El asesinato de Flórez

A Suárez lo capturaron hoy después de que el Tribunal Superior de Bogotá revocó una decisión de un juez especializado que le había levantado una condena como autor intelectual del homicidio de Alfredo Enrique Flórez.

Su captura se dio un poco después de las 3 de la tarde, cuando se bajó del carro que lo llevaba a participar en el acto de lanzamiento de Andrés Cristo y de Édgar Díaz. En el coliseo del Colegio La Salle lo esperaban cerca de diez mil personas y afuera un grupo de agentes del CTI que lo llevaron a la Policía y probablemente lo trasladarán a la penitenciaría de La Picota, en Bogotá.

Alfredo Enrique Flórez era asesor jurídico de la alcaldía de Cúcuta en la administración de Manuel Guillermo Mora, a la que Ramiro Suárez impulsó. Su asesinato se dio cuando Suárez hacía campaña para reemplazar a Mora.

Según se deduce de los testimonios entregados en el proceso por los asesinos de Flórez, el entonces candidato Ramírez Corzo y Flórez tuvieron una discusión muy fuerte el 6 de octubre de 2003, quince días antes del asesinato. El origen de esa discusión habría sido la falsificación de la firma de Flórez en unos conceptos para autorizar una serie de construcciones en Cúcuta y que se habría hecho cuando Ramirez Corzo era asesor de la administración municipal. La discusión terminó con la amenaza de una denuncia penal contra el candidato.

El paramilitar que confesó haberle disparado a Flórez contó que cometió el asesinato por orden de su comandante Carlos Rojas Mora, el ‘Gato’, quien les dijo que era un “favor a Ramiro Suárez por su colaboración con la organización”. Después de asesinar al asesor, huyó del sitio y después de eso el ‘Gato’, lo llamó para preguntarle “si habían recogido la maleta” y como eso no había pasado, lo hicieron devolver. Esa maleta nunca apareció y nunca se supo exactamente qué había descubierto Flórez.

La situación jurídica de Suárez Corzo ya es complicada. La condena que validó el Tribunal Superior es de 27 años de cárcel, aunque todavía tiene el recurso de casación. Sin embargo, una fuente cercana a Suárez Corzo le dijo a La Silla Vacía que el ex alcalde estaría pensando en acoger una invitación que en 2005 le hizo la Fundación Progresar. La ONG de Derechos Humanos le hizo una carta pública pidiéndole que se desmovilizara, que se postulara como miembro de las autodefensas y contara la verdad. Una de las defensas que podría utilizar Ramírez Corzo es esa, la de solicitar su postulación con base en la investigación que adelanta en su contra la Corte Suprema de Justicia por parapolítica. El costo para que lo acepten es que tendría que contribuir con la verdad.

Soy periodista. Lo que más me apasiona es la investigación. Hago parte del comité directivo y soy socia fundadora de Consejo de Redacción, una organización de periodistas que promueve el periodismo de investigación. Desde que me gradué, en la Universidad...