En Cartagena la campaña a la alcaldía se prendió desde Bogotá. La decisión del partido de Roy Barreras, lanzado en el Hotel Tequendama, de avalar la candidatura del exgobernador liberal Dumek Tubay resonó entre la ciudad amurallada.
Al interior del Pacto Histórico surgieron dos posturas. Por un lado, están quienes ven a Turbay como un fiel representante de la clase política tradicional y clientelista de Bolívar, responsable del desgreño institucional que ha padecido la ciudad. Mientras que otros, ante la ausencia de figuras electorales fuertes en la izquierda cartagenera, lo ven como un político con experiencia en lo público que puede hacer que el Pacto Histórico acceda a espacios de poder en Cartagena, si triunfa.
El debate cartagenero refleja lo que pasa a nivel nacional en el Pacto Histórico entre figuras como el senador Roy Barreras, con una visión pragmática de la política, y el exsenador Gustavo Bolívar, que ha sido crítico de ese tipo de alianzas.
“Nos están robando el Pacto Histórico”, dijo Bolívar tras la presentación del partido de Roy, La Fuerza de la Paz, que incluyó el nombre de Dumek Turbay, un político que lideró la campaña presidencial de Álex Char en Bolívar.
Dumek Turbay, entre Roy y las críticas del petrismo
El miércoles pasado, una vez se conoció el respaldo del partido de Barreras a Turbay, en el Pacto Histórico hicieron una reunión exprés. Al final, Hernando Samudio, integrante de la Secretaría Técnica del Pacto Histórico en Bolívar, publicó un comunicado que dice: “Rechazamos de forma contundente y sin ambigüedades, la postulación del señor Dumek Turbay Paz a la Alcaldía de Cartagena”.
No es una posición unánime pues varios sectores del Pacto no comparten el comunicado, incluyendo a Dagoberto Polo, uno de los secretarios del Pacto en Bolívar cuyo nombre aparecía en el documento.
Dumek Turbay Paz es un político de 52 años, que fue gobernador de Bolívar entre 2016 y 2019 con el aval del Partido Liberal. Su aspiración, en ese entonces, estuvo respaldada por los clanes parapolíticos y corruptos del departamento, con los que cogobernó tras su triunfo.
Así le entregó la administración de la educación al clan de William Montes, condenado por parapolítica en 2012. La salud se la dio al clan del ya fallecido Juan José García, condenado por corrupción. Y el servicio de agua al clan de Vicente Blel Saad, condenado por parapolítica en 2010.
En medio de esa repartija, el golpe más fuerte a la imagen de Turbay fue por unos audios filtrados del exsenador condenado por parapolítica, Vicente Blel Saad, hablando de puestos, plata y prebendas en la administración de Turbay.
“Dumek se ha brincado a todo el mundo, hasta el mismo primo se ha brincado. Lidio (García) dice que hay mucha gente que dio plata y ni siquiera se la ha devuelto (…) Se ha ganado 300 mil millones, es el que más ha contratado, con la vaina de las víctimas y El Salado y a todo el mundo le quita la plata por delante”, se escucha a Blel en uno de los 19 audios publicados por La W. Turbay se defendió diciendo que esos audios no corresponden a la realidad de lo que sucedía en su administración.
Son esos antecedentes de Turbay los que hacen que en varios sectores del Pacto Histórico su apellido sea intolerable. Sumado a eso, han empezado a circular supuestas investigaciones en la justicia de Turbay en redes sociales, por lo que Roy tuvo que salir a dar explicaciones de su apoyo. Sin embargo, esas investigaciones están inactivas o en etapas preliminares.
Hernando Samudio, militante petrista desde hace más de una década e integrante de la mesa técnica del Pacto en Bolívar, dice: “Tú no puedes entregar resultados distintos si siempre haces lo mismo. Todos sabemos cómo ellos hacen la política: empobrecen a la gente, se ve la compra y venta de votos, la salud y la educación quedan como cenicienta, se reparten la burocracia y los más perjudicados son los mismos”.
“Ese cambio, así como llegó a nivel nacional, también tiene que llegar a los territorios. Nosotros no cerramos la puerta a todo el que quiera venir a sumar a este proyecto, pero no vamos a soltar las banderas y que ellos lideren”, agrega Samudio. Él es un político petrista de 51 años, cercano al exsenador Gustavo Bolívar y representante de las organizaciones sociales dentro del Pacto.
Otro que salió públicamente a cuestionar el aval de Roy a Turbay fue el alcalde de Cartagena, William Dau. El alcalde, un veedor anticorrupción que llegó a la alcaldía por sus denuncias temerarias, ha sido duro crítico del exgobernador, con el que tiene varias disputas legales. Dau, que un principio se presentó como una figura sin ideologías políticas, está cerca del petrismo desde las elecciones a Congreso, cuando puso candidata en la lista del Pacto Histórico de Bolívar.
“Roy no metas la nariz donde no te han invitado, tú o no conoces la gente o estás cortado por la misma tijera…quiero aprovechar el momento para preguntarle al precandidato Dumek Turbay que nos diga si es o no cierto que él se jacta de que tiene 20 mil millones de pesos para la campaña”, dijo Dau en un video.
El alcalde, que en el pasado ya ha tenido que retractarse por calumniar a Turbay, fue denunciado por presunta participación en política por esa declaración.
Por su lado, el exgobernador Turbay dice que es contradictorio que los petristas de Cartagena lo rechacen cuando el propio Petro ha hecho alianzas con sectores tradicionales a nivel nacional. Incluidos los grupos cuestionados de Bolívar, con los que Turbay ha hecho política. Por ejemplo, en la campaña presidencial, en primera vuelta, Petro recibió el apoyo del clan parapolítico Montes, según reveló La Silla.
“Lo único que hoy les puedo decir a los petristas que hoy se rasgan las vestiduras es que esos mismos aliados políticos son los aliados del gobierno Petro aprobando las reformas en el Congreso. Yo les pediría más coherencia”, le dijo Turbay a La Silla.
La fuerza de Dumek seduce a una parte de la izquierda
Frente a la llegada de Dumek Turbay al Pacto Histórico, hay voces más diplomáticas en Cartagena. El secretario técnico del Pacto en Bolívar, Dagoberto Polo, rechazó el comunicado que sacó su compañero Samudio contra Turbay.
Contexto
“El señor Roy Barreras tiene el derecho natural, como presidente de un partido adscrito al Pacto Histórico, de postular al que él crea conveniente”, dijo Polo a La Silla Vacía. Polo tiene 43 años, ha militado en la izquierda desde el 2005 y hace parte de la Unidad Democrática, un movimiento que recoge fuerzas sindicales.
Para el aterrizaje de Dumek Turbay a La Fuerza de la Paz y el Pacto fueron claves sus vínculos con el santismo. Turbay tuvo una muy buena relación con el entonces presidente Juan Manuel Santos. “Tengo un socio en nuestro querido gobernador Dumek Turbay impecable”, decía Santos en 2017. Santos también lo calificaba como el “gran campeón” de las vías terciarias en el país.
El propio Turbay le dijo a La Silla: “Todos conocen mi cercanía al gobierno Santos en lo misional, en la definición de un proyecto como era un anhelo para todos los colombianos: la oportunidad de una paz real y duradera”.
Turbay es muy cercano al ala liberal del santismo, concretamente al exministro Juan Fernando Cristo. Y fue Cristo el que hizo el puente con Roy Barreras para que La Fuerza de la Paz le diera su respaldo a Turbay.
De hecho, en marzo el partido de Cristo, En Marcha, hará su respaldo público a la aspiración de Dumek Turbay en Cartagena, según el propio candidato.
Pese a los cuestionamientos por sus relaciones con clanes cuestionados, Turbay también tiene un perfil de político experimentado, capaz de sacar adelante proyectos grandes de infraestructura y que abanderó iniciativas nacionales como la Ley de Regiones.
Es algo que contrasta con la gestión del actual alcalde William Dau, que se eligió y ha gobernado con la bandera contra la corrupción, pero que no ha presentado ninguna obra grande para Cartagena. Además, sus cifras de homicidio son las más altas en una década y será recordado por sus peleas públicas y lenguaje vulgar.
La popularidad de Dau está golpeada. Y Turbay quiere presentarse como un candidato que representa lo contrario: gestión y eficacia. “La ciudad está en un desgobierno absoluto, un desmoronamiento de la estructura institucional, apoderada de los bandidos. Estamos planteando es convertirnos en la fuerza de las soluciones”, dice Turbay.
Sin hacerlo público aún, dentro del Pacto hay quiénes sí reconocen que Turbay es la posibilidad real que tiene el Pacto de ganar en Cartagena y de tener representación en un eventual gobierno. No lo hace público aún para evitar choques internos y prematuros. “(Turbay) sea consulta o consenso muy probablemente se gane el aval del Pacto”, dice una fuente del Pacto que pide no revelar su identidad para no abrir un frente temprano de pelea en una campaña que aún está lejos.
“Mi posición es que yo no puedo pelear con el jefe del Congreso. El Pacto tiene su decisión, y voy a apoyar al candidato que salga del Pacto. A mí no me desagrada Dumek en qué aspecto, en que fue una decisión de Roy. Y si miramos objetivamente, Dumek cumple con los requisitos técnicos: ya gobernó, tiene recurso, tiene experiencia, tiene una propuesta programática que ofrecerle a la ciudad”, dice la fuente.
Turbay va a intentar entrar en la mecánica interna del Pacto Histórico, pero su plataforma política no depende exclusivamente de ellos. De hecho, el 10 de marzo Turbay le presentará su proyecto en Cartagena a varios parlamentarios de Cambio Radical, uno de los partidos más críticos de Petro. Eso a través de su aliado el senador Jorge “el Yoyo” Benedetti.
Por eso Turbay dice: “Si desde el Pacto Histórico finalmente se impone el sectarismo y el radicalismo, solo tendría que decirles ‘nos vemos el 29 de octubre en las urnas’”.
