La encuesta desconocida de Fajardo
La pelea de Fajardo con las encuestas terminó siendo el palo en la rueda de su alianza con Rodolfo Hernández. Para Fajardo, la cuarta posición en la que lo ubicó tanto la encuesta de Invamer –pagada por Caracol Televisión, Blu Radio y El Espectador– y la de Guarumo y EcoAnalítica – autofinanciada y publicada en El Tiempo– estaba errada.
“Tenemos una información distinta y esa información yo la creo”, dijo. El candidato de la coalición de centro dice que en su campaña han hecho encuestas internas que lo favorecen. La empresa encargada fue Connecta, una encuestadora avalada por el Consejo Nacional Electoral (CNE), que, a diferencia de las publicadas en medios que hicieron mediciones nacionales, hizo las muestras en 10 ciudades principales.
El primer estudio –dicen en la campaña– lo hicieron antes de Semana Santa. En ese momento Fajardo superaba a Rodolfo en el margen de error, según una persona de la campaña que solo relató los supuestos resultados. La segunda medición la hicieron la semana pasada y, según ellos, muestra que Petro está en 44 %, Fico en 23% y Fajardo y Rodolfo empatados en 15 %. El 3 por ciento restante se divide en los demás candidatos y el voto en blanco.
La información de la encuesta todavía no es pública y eso le resta credibilidad e impacto porque no se habla de la metodología ni de las preguntas que podrían inducir a los resultados. Fajardo ha dicho en medios que no pueden publicar ese estudio porque tendrían que revelar información que es solo de uso privado.
Más allá de la encuesta interna de la campaña de Fajardo, ese estudio contrasta con otras tres encuestadoras que lo muestran a la baja.
Tres encuestas contra una
Los resultados que Fajardo ha tenido en las encuestas de Invamer, Centro Nacional de Consultoría (CNC) y Guarumo desde marzo del 2021 muestran que su desplome va más allá de una sola medición. Estas tres encuestadoras encabezan el Semáforo de las Encuestadoras Electorales de La Silla Vacía, que evalúa su metodología y desempeño.
En las 16 encuestas de Invamer, Guarumo y CNC– financiada por la revista Semana– que han preguntado por la intención de voto de Fajardo muestran que Fajardo se mantiene mientras que los demás crecen, y en la última medición se cae en todas las casas encuestadoras. Si se tratara de una manipulación coordinada, como sugiere Fajardo, sería una que tendría que involucrar a tres casas encuestadoras y cuatro medios de comunicación que las pagan.
Al criticar la encuesta Invamer, que frustró su acercamiento a Rodolfo, Fajardo no aportó argumentos puntuales, sino preguntas críticas. En una entrevista en Blu Radio respondió, cuando le preguntaron por detalles, que “Yo no soy el que hace la encuesta. Ni tengo preguntas, ni la forma como se seleccionó”.
Pero esa encuestadora, a diferencia del CNC y de Guarumo, fue más precisa anticipando los resultados reales de Fajardo en las consultas interpartidistas. En la última medición antes de las consultas presidenciales, Invamer de hecho sobreestimó por 1,4 puntos porcentuales el resultado de Fajardo. En la medición del 4 de marzo aparece con 37,8% en su coalición, con un margen de error de casi 3 puntos porcentuales, y Fajardo obtuvo 33,5 por ciento de los votos.
Esta encuestadora también mide la intención de voto en veredas y otras zonas rurales, cosa que no tiene la medición interna de Fajardo que solo revisó zonas urbanas.
Jorge Robledo, de la Coalición de la Esperanza, sí dio unos argumentos más técnicos sobre sus reparos con Guarumo. Según él, está viciada porque hay una mayor representatividad de los municipios de Santander, donde Rodolfo es muy fuerte, en comparación con Bogotá, donde Fajardo es más popular.
En la capital entrevistaron a 286 personas, mientras que en Bucaramanga, Floridablanca y Girón, a 174. “No hay que ser experto en estadística para concluir que esta encuesta se manipuló para inducir electores a favor de Rodolfo Hernández y en contra de Sergio Fajardo”, escribe Robledo. No recibimos respuesta cuando le preguntamos por las dudas técnicas con Invamer.
Pero Javier Restrepo, especialista en encuestas y exdirector de la encuestadora Napoleón Franco, defiende el método usado por Invamer y Guarumo. Según Restrepo, la selección de municipios se realiza de manera aleatoria. Esta selección llega a la muestra representando una región geográfica a la que pertenece. El número de encuestas en estos municipios son proporcionales al total de habitantes de la región que representan.
Por ejemplo, en el caso de Invamer, las encuestas que se hacen en los municipios de Santander son representativas de toda la región central oriental en la que se hicieron en total 468 encuestas.