Revisamos las empresas dueñas de cada medio, sus socias o accionistas, las socias o accionistas de éstas y así sucesivamente, hasta encontrar las personas de carne y hueso propietarias o hasta estrellarnos contra sociedades extranjeras en paraísos fiscales.
Obtuvimos la información revisando en las Cámaras de Comercio las actas más recientes de cada empresa para conocer la información más actualizada de sus socios o accionistas. En algunos casos esa información es de 2021, en otros tiene dos, tres o más años; y no siempre pudimos conocer el 100 por ciento de los dueños.
Con la información de participación en la propiedad de cada compañía calculamos qué porcentaje de las acciones del medio representan, directa o indirectamente, cada una de estas personas, teniendo presente la existencia de acciones readquiridas y de enroques empresariales (compañías que son socias mutuamente o que son indirectamente propietarias de sí mismas).
En el caso de la Casa Editorial El Tiempo hicimos este ejercicio hasta el sexto nivel, cuando faltaba encontrar el beneficiario final de menos del 10 por ciento de la propiedad y había más de 2 mil empresas.
La información de vistas se refiere al mes de octubre y es la tomada por el servicio Similarweb, que tiene acceso público y sirve como comparativo. Puede ser diferente al que usen los medios con sus servicios privados. Cada uno tiene metodologías distintas.
La información financiera de cada empresa viene de fuentes oficiales cuando fue posible (estados financieros entregados a la Superintendencia Financiera o de Sociedades, según el caso) o con sus reportes anuales a las Cámaras de Comercio.
En el caso de Red+, como el medio está totalmente integrado a Claro y por lo tanto no tiene balances aparte, tomamos el 5 por ciento de los ingresos y utilidades para dar una idea de la dimensión financiera del canal.
Y para medir las redes de QHubo, que están separadas por las ciudades en las que tienen ediciones, sumamos los seguidores de todas ellas.