El alcalde barranquillero Álex Char y el gobernador liberal del Altántico Eduardo Verano De la Rosa. (Foto tomada de Zona Cero)

En la elección de nuevo rector, el gobernador liberal del Atlántico Eduardo Verano respalda a un candidato distinto al que tiene evidentes vasos comunicantes con el alcalde vargasllerista Álex Char.

La accidentada puja por la Universidad del Atlántico, que lleva 32 meses en interinidad, evidencia lo que podría ser el primer desacuerdo entre el gobernador liberal del Atlántico Eduardo Verano De la Rosa y el vargasllerista alcalde barranquillero Álex Char, quienes viven luna de miel política desde la elección de ambos en octubre de 2015.  

Como lo contamos en La Silla Caribe, Verano, quien ya había sido gobernador en el periodo 2008 – 2011, llegó nuevamente al cargo por el respaldo de la casa Char y en recompensa a ese apoyo el mandatario departamental le ha dado tanto juego al grupo del Alcalde, que hoy éste es un súper poderoso en la Gobernación por las cuatro dependencias clave en las que tiene como cabezas a aliados suyos.

Sin embargo, en lo que concierne a la elección de la apetecida Uniatlántico, parecen estar en orillas distintas.

En esa puja, el Gobernador está apostando por un candidato a rector distinto al que tiene evidentes vasos comunicantes con el alcalde Char, y que además es visto en la Barranquilla política como su carta para lograr poder en la principal institución pública de educación superior del departamento.

La elección de nuevo rector de la Universidad del Atlántico, que debió hacerse el 9 julio de 2015, se ha retrasado por varias trabas jurídicas. La principal de ellas fue una acción de nulidad que presentaron el 8 de julio, un día antes de la elección, un docente y una estudiante ante el Tribunal Administrativo del Altlántico.

Esa acción fue fallada a favor de ellos en primera instancia y como medida cautelar el Tribunal ordenó suspender la elección de rector, lo que congeló todo el proceso hasta finales de abril de este año, cuando el Consejo de Estado falló en última instancia y ordenó reactivar el proceso.

Manejar la rectoría de la Uniatlántico no es poco, porque desde ahí se ejecutan unos 280 mil millones de pesos para garantizarle la educación a unos 24 mil estudiantes. Por lo que es vista por los políticos como un potencial botín electoral, como ocurre con varias universidades a nivel nacional.

 

Los candidatos y sus lazos políticos

Los candidatos a ser rector de la Uniatlántico son: Rafael Castillo, quien fue docente de la Universidad y estuvo de rector encargado; Carlos Prasca, exsecretario de Educación departamental de la Administración pasada; y el docente Salim Mattar, quien ya fue candidato a rector en 2011.

La elección la tiene que hacer el Consejo Superior de la Uniatlántico, que es el principal órgano de gobierno de la universidad. Ese consejo está conformado por 11 miembros de los cuales nueve tienen derecho a votar: el Gobernador, un representante del Presidente, uno del Ministerio de Educación, un representante de los estudiantes, de los docentes, de los egresados, el de los exrectores, de las directivas académicas y uno de los gremios (que como ya contamos está vetado para hacerlo en esta oportunidad). Los que también hacen parte del Consejo, pero no votan son el rector y el secretario general de la U.

Aunque en esta contienda de frente todos los candidatos niegan respaldos políticos, por aparte cada uno señala al otro de tener lazos con corrientes políticas.

Castillo, quien se vende como independiente en medio de la puja, es relacionado con movimientos de izquierda. Además, él tiene relación con casi todas las trabas jurídicas que han impedido la elección de rector en propiedad, como lo contamos en La Caribe.

Los otros dos candidatos tienen vasos comunicantes con políticos más fuertes.

A Prasca lo ven como el aspirante cercano a los Char, especialmente entre los simpatizantes de Castillo. En La Silla Caribe no encontramos evidencia de que el Alcalde, lo esté impulsando. Pero sí hay varios lazos entre ellos.

El primero y más fuerte es que Prasca fue, por ocho meses y hasta diciembre del año pasado, asesor de la Alcaldía de Char en el proyecto de universidad al barrio, que adelantan desde la Secretaría de Educación Distrital. Para esa asesoría tuvo un contrato por 90 millones de pesos.

Además de eso, el mismo candidato a rector le reconoció a La Caribe que su amistad con Char es de vieja data. De hecho, según nos contó Prasca, él fue quien asesoró al mandatario para que el Itsa, que era una institución del Departamento, se convirtiera en la Universidad Distrital que es presentada por Char como uno de sus principales logros.

Por otro lado, al candidato a rector Mattar lo relacionan con el liberalismo porque fue postulado por el representante de los exrectores, el dirigente liberal Antonio Vallejo, cuya militancia en el trapo rojo es bien conocida en el Atlántico. Vía esa relación con el liberalismo a Mattar lo han visto siempre como el candidato cercano al gobernador Verano.

Esa relación entre ellos no es nueva. Cuando Mattar intentó ser rector en 2011, Verano, quien entonces también era Gobernador, fue el único de los nueve miembros del Consejo Superior que le dio su voto.

El pasado 9 de mayo, durante la última reunión del Consejo Superior en la que se intentó elegir rector, hubo una movida que confirmó que el mandatario departamental está jugado por la aspiración de Salim Mattar. Además, que toma distancia del candidato con vasos comunicantes con Char.   

La movida de Verano

Para elegir rector votan los nueve consejeros que tienen facultad para hacerlo, pero como en esta oportunidad hay uno vetado (el representante de los gremios) sólo participan ocho consejeros y para que alguno de los tres candidatos sea elegido necesita cinco votos.

Resulta que en el intento de elección del 9 de mayo hubo dos rondas para votar, porque se necesitaba que alguien sacara esos cinco votos. En la primera Prasca consiguió cuatro votos (el del Gobernador, representante del Presidente, del Mineducación y del representante de egresados), Castillo tres votos (el de los representantes de estudiantes, docentes y directivas académicas) y por Mattar sólo votó el representante de los exrectores.

En la segunda votación Verano le quitó el voto a Prasca para dárselo a Mattar.

Como ninguno obtuvo los cinco votos para ser el ganado, se citó para una nueva reunión el 22 de mayo en la que se espera que esté la propia ministra de Educación Yaneth Giha.

Lo que nos dijo el Gobernador sobre su cambio de opinión durante la elección es que intenta “generar consenso alrededor de un nombre, para que consiga los cinco votos que se necesitan y no empantanar el proceso de elección de nuevo rector”.

Pues en efecto Verano se está moviendo en esa dirección y confirmamos que ese nombre es el de Mattar.

La Silla Caribe confirmó que el mismo día de la fallida elección, Verano se reunió con el decano de la facultad de arquitectura Wilson Annicchiarico, representante de las directivas de la Universidad en el Consejo Superior, quien había votado en las dos rondas por Castillo.

Ese encuentro nos lo confirmaron por separado tres consejeros que lo vieron porque se dio a final de la reunión, en la Gobernación.

Según nos contó uno ellos que asegura que lo sabe porque el representante de las directivas lo comentó después, el objetivo del acercamiento de Verano a Annicchiarico habría sido para convencerlo de darle su voto a Mattar.

El Gobernador nos negó ese encuentro (en el que coinciden tres fuentes), pero nos reconoció que está intentando dialogar con la Ministra de Educación porque su intención es conseguirle cinco votos a uno de los candidatos para que se destrabe la elección.

Como su más reciente voto como miembro del Consejo fue para Mattar, no es difícil adivinar que es a él a quien está impulsando.  

A Verano le interesa hablar con la Ministra porque ella y el delegado del Presidente, con sus dos votos, podrían definir la elección.

Por esa movida del mandatario liberal, en la misma Gobernación empiezan a ver esta puja como su primer distanciamiento de la casa Char, algo que es clave en un año preelectoral en el que Verano debe mostrarse más afín a su partido que al grupo vargasllerista que lidera el Alcalde de Barranquilla.

“Eso (la distancia de Char) es algo que el Partido Liberal le viene pidiendo (a Verano) desde hace rato y acá (en la Gobernación) el apoyo a Mattar se ve como el primer paso”, fue lo que nos dijo al respecto alguien de la Gobernación que es del grupo de Verano.

Sin embargo, la lectura del propio Gobernador es distinta: “En esto todos tenemos nuestro punto de vista y yo creo que en nada altera tantas responsabilidades y proyectos que estamos avanzando juntos (él y Char)”.

Char, sin tener asiento en el Consejo Superior de la U, se ha pronunciado varias veces sobre la elección y ha pedido públicamente que se destrabe, algo que algunos sectores han interpretado como su interés en la rectoría, aunque sus pronunciamientos no signifiquen necesariamente eso.

Si el aparente distanciamiento de Verano de la casa Char es un hecho o no se podría ver después de  la elección del nuevo rector.