Ha concluido el proceso que puso en la calle al Contralor de la ciudad y que decreta su inhabilidad para contratar con el Estado por muchos años, -y vaya uno a saber si más que castigo será un premio-, dejando al descubierto esa escalofriante cadena de coimas y chanchulleros nacionales y locales, que ya tocan y desde hace rato a la familia del Alcalde mayor de la ciudad, y a él mismo.
Ha concluido el proceso que puso en la calle al Contralor de la ciudad y que decreta su inhabilidad para contratar con el Estado por muchos años, -y vaya uno a saber si más que castigo será un premio-, dejando al descubierto esa escalofriante cadena de coimas y chanchulleros nacionales y locales, que ya tocan y desde hace rato a la familia del Alcalde mayor de la ciudad, y a él mismo.
Y después del hueco que deja la partida de Moralesrussi, no sólo financiero si no de control fiscal en la ciudad, vaya ironía, debía surtirse ipso facto el nombramiento temporal de un Contralor por parte de los honorables Concejales, en tanto la designación de aquél que postule el H. Tribunal de Cundinamarca. Pero no. Se han tomado su tiempo.
¿Qué ha sucedido? Pues que ayer, entre risas y aplausos, el Concejo, socio y partícipe de la putrefacción de la ciudad, dejó al señor Alcalde Mayor en libertad para que nomine a la persona que va a vigilarlo fiscalmente durante ese interregno. Así que ahora no sólo tenemos a un Personero amigo personal del Alcalde, a un Concejo de su bolsillo, si no que también al Contralor!!
Pero no todo será para mal. Ya sabemos que siendo el Concejo en esencia de factura uribista, movimiento cuya cabeza el opcionado candidato a la Alcaldía, ahora verde, añora como co-equipero, pues que mejor que un empalme desde ya y por todo lo alto. (¿O por lo bajo?. Ya no sé)
Y usted… y yo…de brazos cruzados.