Nuestros usuarios no son periodistas. Sin embargo hacen lo que hasta hace pocos años era privilegio de quienes ejercían este oficio: ofrecer a los ciudadanos información nueva y claves de interpretación de la realidad. De eso se trata el periodismo del futuro –del presente, en realidad.

Nuestros usuarios no son periodistas. Sin embargo hacen lo que hasta hace pocos años era privilegio de quienes ejercían este oficio: ofrecer a los ciudadanos información nueva y claves de interpretación de la realidad. De eso se trata el periodismo del futuro –del presente, en realidad.

Los cerca de setenta usuarios que se han sentado en La Silla durante estos meses han contado el poder desde su propia perspectiva. Han hecho crónicas desde sus , en las que seguramente muchos se han visto reflejados. Han aportado sobre asuntos públicos relevantes. Han develado para asuntos ya conocidos. Han “conectado los puntos” para contar historias desde su

No cualquier historia tiene valor periodístico. En eso el periodismo conserva su esencia heredada del siglo pasado. El valor periodístico sigue estando en la información original que aporta elementos nuevos al debate público. Las historias de usuarios que hemos publicado tienen este valor periodístico en común.

Pero también tienen en común que exploran nuevas formas de relato. Solo unos ejemplos: contar las elecciones como un ; hacer reportería a través de las ; rezarle a las divinidades locales la tradicional ; y, claro, .

Las historias de nuestros usuarios tienen en común que ofrecen nuevas formas de contar.

Quienes conocimos el periodismo antes, ahora estamos aprendiendo, descubriendo e inventando cómo hacerlo ahora. Y en La Silla lo están inventando también los usuarios.


Para proponer una historia: