Nunca antes un ministro había reconocido y explicitado la torpeza de su gestión. Hoy lo hace el ministro Palacio. Además, ha evidenciado su ignorancia plasmándola en un instrumento público, el decreto 131 de 2010, revelando que el problema de la salud en Colombia es de liquidez -ver segundo párrafo del decreto- lo que está significando que para el sector  existe plata pero no disponible.  Así que en consecuencia  los colombianos no deberíamos esperar impuestos adicionales para financiarlo, lo que ya resultó ser falso. ¿Sabrán lo que es liquidez?
Mediante el citado decreto y de cara a la emergencia, se crea un Sistema Técnico Científico en Salud cuyas funciones pueden equipararse con las de un ministerio. Se ha creado, enhorabuena,  un ministerio de la salud. Enumeraré algunas de las importantes responsabilidades del nuevo y dichoso comité:
Coordinación de actividades tendientes a la generación de conocimiento para la prestación del servicio publico en salud… buscar el mejoramiento de las condiciones de salud de la población…a través de la entrega de prestaciones científicamente validadas  y técnicamente aplicables… realizar el control científico y técnico y la evaluación … para el mayor bienestar social posible Y sigue:
Articular los estudios de base poblacional y de carga de la enfermedad para la identificación del perfil epidemiológico y demográfico…, articular la evaluación de los medios técnicos y de procedimientos …y su impacto en la reducción de la morbilidad y la mortalidad del país …, articular los estudios e investigaciones en ciencias básicas y sociales…, adoptar los estándares basados en evidencia científica y la doctrina médica por ser aplicados en las diferentes  instancias ….proporcionar asistencia técnica y científica (…)
Pero, si las anteriores y nuevas funciones no eran ejercidas por el ministerio de la protección social, pregunto: ¿a qué cosas estaba entonces dedicado el señor ministro? ¿Su ministerio? Comienzo a entender las causas de la crisis. Y que lo que seguramente se necesitará para comenzar a salir de la misma, y no lo único, será un buen ministro. Un ministro al menos. Pero lo que no se puede aceptar es que por culpa de una pésima gestión y del negocio que llena los bolsillos de las pocas eps que van quedando en el país, que rayan en el monopolio, se eche mano de nuevo a los ya menguados ingresos de los colombianos.
Pero no todo puede ser malo en el decreto. El nuevo sistema será transparente. Como el señor Ministro.