Comunicador social con especialización en Alta Gerencia y Gestión Pública y maestría de Políticas Públicas del Territorio. En las elecciones de 2019 quedó de segundo en la carrera por la Alcaldía de Bucaramanga con 40 mil votos (90 mil menos que el ganador). Aceptó la curul en el Concejo y con ese completó tres periodos como concejal de Bucaramanga.
Beltrán arrancó en el Partido Liberal pero se distanció porque no respaldaron sus intenciones de ser alcalde y entró al partido cristiano Colombia Justa Libres en 2019. En esa campaña intentó recoger firmas pero no le alcanzaron. Es pastor en la iglesia de su papá, Camino a la Libertad.
Las dos veces que se postuló para concejal fue el más votado de toda la corporación. Su base electoral son los votantes cristianos. Es conocido por hacer debates de control político sobre seguridad. En su primer periodo como concejal manejó burocráticamente el Instituto de Salud de Bucaramanga (Isabú) y en 2017 tuvo participación burocrática en la Unidad de Víctimas como parte de un acuerdo político con el senador liberal Jaime Durán.
Se declaró en oposición al gobierno de Juan Carlos Cárdenas, pero no lideró el control político a esa administración. Además del aval de su partido Colombia Justa Libres y de Salvación Nacional, otro partido cristiano, recibió el aval del Partido de La U directamente con la baronesa de esa colectividad Dilian Francisca Toro, para blindarse de la pelea jurídica que atraviesa su partido Colombia Justa y Libres, que podría invalidar su aval. Por eso, varios de sus candidatos al Concejo van por la lista de La U, en la que es coequipero del clan Aguilar (llevan sus candidatos al Concejo y Asamblea por ese partido y están respaldando al pastor).
Fue elegido alcalde con el 34 por ciento de los votos.