Es abogado e ingeniero de sistemas con maestría en gestión de tecnologías de la información. Fue docente de ingeniería de la Universidad de Cartagena y en 2019, durante tres meses, fue coordinador de liderazgo Fundación Mamonal, que es el brazo social de la Asociación Nacional de Empresarios de Colombia (Andi) en Bolívar. Ese mismo año aspiró al Concejo de Cartagena por el Mais en una lista llamada Coalición Alternativa, que incluía al Polo Democrático y a la Colombia Humana-Unión Patriótica y ganó la curul.
Su campaña tuvo un discurso anticorrupción, se movió principalmente por redes sociales y tuvo el apoyo público de William Dau, que resultó elegido alcalde sorpresivamente. En un principio fue el único concejal de la línea de Dau. No obstante, durante el primer año de gobierno de Dau, Julio Bejarano se distanció y se convirtió en su principal opositor. El concejal estuvo en desacuerdo con la falta de comunicación que tuvo el gobierno de Dau con él y rechazó decisiones como no abrir licitación para escoger el operador del alumbrado público.
Algunas de las críticas de Bejarano fueron fundamentadas, pero otras carecían de fundamentos, como la denuncia de supuesta influencia de la casa Char en la administración de Dau. La pelea entre ambos escaló a tal punto que Dau lo tildó de “grandísimo hijueputa” y de “viejita chismosa”. De hecho, tras una tutela que interpuso Julio Bejarano, un juez ordenó a Dau a retractarse y a no referirse al concejal con calificativos ofensivos.
Julio Bejarano también es indagado por la Procuraduría, junto a una decena de concejales más, por irregularidades en la elección del contralor. Ahora busca dar el salto a la Alcaldía de Cartagena con el aval del Mais y el respaldo de varios partidos del Pacto Histórico. Para conseguirlo tuvo una dura puja con el exfuncionario Liner Campo, cercano a la representante del Pacto Dorina Hernández.
