Por Marc Hofstetter
(twitter: @mahofste)
Desde que el gobierno decidió hace unas semanas anunciar que entre las prioridades legislativas del semestre estaba quitarle tres ceros al peso colombiano, se han popularizado todo tipo de leyendas sobre el efecto de la medida. En medio de tanta especulación, un aspecto fundamental no parece haber calado el debate, quizás porque suena poco importante: el de la simplificación. En esta nota, como en las revistas de peluquería, se propone un quiz para saber si Ud. está de acuerdo con la importancia de simplificar nuestra moneda. Las respuestas a algunas preguntas las encuentra al final del texto. Si en el test Ud. obtiene un puntaje de menos de 8 puntos, pídale a su congresista que apoye la iniciativa. De paso, hágale el quiz. (Esta nota complementa una que escribió Munir Jalil en razonpublica.com, aclarando varios mitos y verdades sobre el tema del cambio de moneda).
1. ¿Sabe Ud. cuánto es un billón de pesos? En serio ¿cuántos ceros tiene un billón? (Recuerde que aquí solemos decir que una reforma tributaria vale un billón, que la Dian este año va a recaudar casi 100 billones, etc.). Si responde correctamente en menos de 2 segundos sume 2 puntos.
2. ¿El billón en castellano es equivalente al “billion” en inglés? Si responde correctamente sume 2 puntos.
3. Según el presupuesto del Distrito Capital, el gasto de este durante 2012 será de 9,868,662,000,000. ¿Ud. entiende esa cifra? ¿La sabe leer en menos de 2 segundos? Si responde afirmativamente sume 2 puntos.
4. 166,000,000,000,000: ese es el orden de magnitud del presupuesto general de la nación. ¿Ud. entiende esa cifra? ¿La sabe leer en menos de dos segundos? Si responde afirmativamente sume 2 puntos.
5. 17,546,000,000,000: suponga que Ud. simpatiza con la MANE y quisiera que el gobierno gastara más en educación. La cifra escrita es el gasto en educación según el PGN en 2011. Si hubiera escrito 1,754,600,000,000 o 175,460,000,000,000, ¿se habría percatado de la diferencia? Si responde afirmativamente sume 2 puntos.
6. Si tiene hijos, sobrinos o amigos de 6 años, mándelos a comprar una paleta de 2000 pesos. Al volver, ingéniese la manera de averiguar si entienden el número 2000. Si el conejillo de indias entiende qué quiere decir 2000, sume dos puntos.
Si ya sé, el quiz es una pendejada. Pero qué querían, es mi primera incursión en el género de peluquería. Pero busquemos el lado serio del mismo. ¿Cómo vigilamos el buen uso de los recursos públicos si no logramos entender las cifras? ¿De qué sirve la Urna de Cristal del gobierno que nos permite hacerle seguimiento a las inversiones, ingresos y gastos del mismo si un buen pedazo de la población no entiende los órdenes de magnitud de los que hablamos?
Póngase por un segundo en los zapatos de los miles de funcionarios que cada día deben lidiar con decisiones que involucran cifras de ese tamaño. O en los miles de trabajadores del sector bancario y bursátil que también lidian con esas cifras. O en las entidades de control que deben supervisar y vigilar al gobierno y al sector privado. Y si le parece que el ejemplo del niño y la paleta es irrelevante porque la moneda no tiene por qué estar pensada para ellos, piense en los miles de discapacitados para los cuales una cifra con tres ceros de más les hace la vida difícil y los puede llevar a tomar decisiones equivocadas.
Respuestas a 1 y 2: un billón tiene doce ceros, y un “billion” nueve. (Según parece, la RAE nos quiere enredar más aceptando el significado gringo en español, pero por ahora la respuesta correcta es la que anoté).