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“Algo se hizo bien en el gobierno de la Bogotá Humana, revisen las cifras” dijo Morris en twitter sobre la seguridad en tiempos de Gustavo Petro al frente de la Alcaldía de Bogotá. Le hice caso y desempolvé mis archivos.
Durante el primer ‘Gran Debate’ de La W con los 4 aspirantes a la Alcaldía de Bogotá, realizado el pasado 8 de agosto, Carlos Fernando Galán dijo que la Alcaldía de Enrique Peñalosa “fracasó en su política para enfrentar los hurtos en la ciudad”. Reconoció haber votado por Peñalosa y haberlo apoyado en su campaña, pero también dejó claro que no formó parte de su equipo de gobierno y eso le permite evaluar con independencia lo que se hizo bien y debe continuar y lo que se hizo mal y debe mejorar.
En respuesta, el candidato Hollman Morris afirmó que “Carlos Fernando Galán (…) dice que la política de Enrique Peñalosa es un fracaso en materia de seguridad y Miguel [Uribe], usted tiene que reconocer que todas las cifras se dispararon en materia de inseguridad. Entonces algo se estaba haciendo bien en Bogotá en la administración anterior”.
Esa misma tarde publicó el siguiente mensaje en su cuenta de Twitter: “Galán dice que la política de seguridad de Peñalosa es un fracaso, ellos la inventaron y ahora la critican. Eso quiere decir que algo se hizo bien en el gobierno de la Bogotá Humana, revisen las cifras”.
Me pregunté entonces: ¿será que la administración de Petro sí disminuyó los hurtos a diferencia de Peñalosa?, ¿será que sufro de mala memoria y la inseguridad que recuerdo durante su Alcaldía era pura percepción, pero en realidad la ciudad iba por buen camino? Entonces le hice caso a Hollman Morris -por primera y única vez- y revisé las cifras.
Desempolvé mis archivos con las cifras de hurtos ocurridos en Bogotá durante el gobierno de Gustavo Petro y su ‘Bogotá Humana’. Considero que la forma más simple analizarlas es comparar lo que encontró Petro (hurtos ocurridos durante el 2011, último año de la administración Moreno-López) con lo que dejó Petro (hurtos ocurridos durante el 2015, último año de su administración). Así podemos ver el impacto de sus políticas en el lapso de 4 años:
– Hurtos a personas: subieron de 17.113 a 26.533 (55%).
– Hurto de motos: subieron de 1.856 a 3.247 (74.9%).
– Hurtos de bicicletas: subieron de 733 a 1.633 (122%). En 2016 publiqué una columna en La Red Cachaca sobre este tema titulada “Por la protección de los héroes cívicos”. Pueden leerla en el siguiente enlace.
– Hurtos al comercio: subieron de 3.173 a 5.871 (85%). En 2016 también publiqué una columna en La Red Cachaca sobre este tema titulada “El hurto al comercio creció 85% durante el gobierno Petro”. Pueden leerla en el siguiente enlace.
– Hurtos a residencias: bajaron de 4.869 a 3.490 (-28.3%).
– Hurto de automotores: bajaron de 3.108 a 2.281 (-26.6%).
(Estos datos me fueron entregados por la Policía en enero de 2016, en respuesta a un derecho de petición).
Pero además de las cifras, que son bastante elocuentes, quiero recordar las palabras de Gustavo Petro el 6 de agosto de 2012 cuando presentó con orgullo la primera de las motos eléctricas con las que dotaron a la Policía durante su administración: “La moto que vieron sin ruido, sin contaminación, será la moto que comprará el Fondo de Seguridad y Vigilancia de ahora en adelante.
Para el mes de octubre vienen 100 de estas motos que no solamente tienen un efecto positivo desde el medio ambiente –no contaminan- sino que desde el punto de vista de la seguridad ciudadana, urbana, tienen un componente eficaz: no hacen ruido. No se anuncia la llegada de la Policía a un determinado lugar crítico, a una emergencia o a un lugar donde se ha establecido un robo o algún delito”. Petro confiaba en que estas motos contribuyeran a la seguridad de Bogotá. ¿Qué ocurrió? Las motos eléctricas no funcionaron como se esperaba y el contrato mediante el cual se adquirieron presentó graves irregularidades, al punto que esta semana fue condenado el exgerente del Fondo de Vigilancia por ese motivo.
Conclusión: específicamente hablando sobre cómo enfrentar el hurto, como bogotano no quiero de vuelta las políticas de la ‘Bogotá Humana’ porque no funcionaron. Tampoco quiero continuismo sin evaluación ni autocrítica de las actuales políticas de Peñalosa, porque los hurtos han seguido creciendo de forma dramática. Espero que el próximo Alcalde o Alcaldesa de Bogotá tenga en consideración lo que se ha hecho en el pasado, sin apasionamientos, e implemente nuevas estrategias basadas en evidencia empírica y la recomendación de los expertos en la materia, con participación de las comunidades. Es momento de preguntarse si el plan cuadrantes debe reformarse o transformarse. De balancear las entregas de dotación a la policía con capacitación y entrenamiento específico en seguridad urbana. De entender por qué tantos bogotanos consideran que denunciar no sirve y apoyarlos para que lo hagan y vean resultados. De articular las cámaras instaladas por el sector privado con las del sector público, para contar con una red más amplia recaudando evidencias para judicializar a los delincuentes. De enfrentar con contundencia las peligrosas bandas criminales que operan en Bogotá y controlan los mercados ilegales de armas y drogas. Y de implementar nuevas tecnologías como la de reconocimiento y seguimiento de placas que puso en funcionamiento recientemente la Alcaldía de Medellín y ya está dando resultados.
* Nota aclaratoria 1: no hablo en la columna sobre las cifras de homicidios. Seguramente los seguidores de Petro me dirán que es el gran logro de su administración en materia de seguridad y efectivamente lo es. Durante su gobierno, los homicidios cayeron de 1.654 (2011) a 1.346 (2015). También a la administración de Peñalosa le reconozco que continuó por esa senda de disminución de los homicidios y en 2018 ya habían caído hasta 1.041, cifra histórica. Es un gran logro de ambos, Bogotá lo agradece y lo reconoce. Pero aquí estamos hablando de hurtos, que fue el delito al que se refirió Galán y sobre lo que respondió Morris. Por eso tampoco me refiero a lesiones personales, estafas, incautaciones de estupefacientes, porte ilegal de armas, etc.
* Nota aclaratoria 2: no comparo cifras de hurtos entre las administraciones de Petro y Peñalosa porque la Policía Nacional, en respuesta a un derecho de petición que envié el diciembre de 2018, me aclara que los datos de los años recientes no son comparables con otras anualidades por los cambios metodológicos en la recolección de la información, la actualización de información con datos de la Fiscalía y la puesta en marcha del aplicativo ADenunciar. En pocas palabras, lamentablemente no se puede comparar los datos de ambas administraciones por los cambios metodológicos (me gustaría poder hacerlo y si alguien lo ha hecho, teniendo en cuenta los cambios metodológicos, le agradezco que me comparta sus hallazgos).