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Las redes sociales pueden servir mucho a las organizaciones de todos los tamaños, sectores y naturalezas, pero quizás donde es posible que tengan más juego es en los emprendcimientos. Estas son 10 recomendaciones sencillas, pero efectivas.
Me encantaría poder decirle que las plataformas de redes sociales existen desde los años 50. En serio, me encataría poder confirmárselo. Le tengo una noticia buena y una mala. Empezaré por la mala: No.
La buena noticia es que las redes sociales sí han existido siempre. La razón es que las relaciones humanas han necesitado construir nodos para dar soporte a toda la red, a las comunidades. A su vez, las comunidades son una especie de mecanismo de defensa para lograr más resultados desde la fuerza del colectivo que desde el esfuerzo individual.
Hoy, miles de organizaciones entran en la aventura de explorar cómo es que pueden llegar a sus públicos objetivo. Los emprendimientos en particular tienen muchas probabilidades de explotar las plataformas de redes sociales en su beneficio para apalancarse cuando entran al mercado. Desde luego, la clave está en crear presencias digitales conexas entre sí, como en un ecosistema, para que se nutran mutuamente y los públicos encuentre en cada una, la respuesta a sus necesidades. Al final, la meta es tener un ecosistema estimulante para capturar la atención de los segmentos objetivo.
Por esas razones me he permitido compartir las siguientes recomendaciones para los empresarios que estén considerando tener presencia en las redes sociales y otros medios sociales:
1. Si va a estar en las redes sociales, tenga una presencia activa. Lo dice sabiamente la coloquial sentencia de barrio: “El que tenga tienda que la atienda”. Muchos de los intentos mueren por falta de atención del responsable a cargo.
2. Comprenda que las redes sociales son un espacio para el encuentro, para la conversación. Si usted tiene un sitio web convencional, hasta cierto punto puede darse el lujo de demorarse en contestar, de no actualizar con cierta regularidad. En los medios sociales, no tiene ese privilegio. Sus consumidores le van a cobrar cara la ausencia.
3. Asimile que participar en las redes sociales puede generarle mucho tráfico de comentarios. Y esos pueden ser buenos o malos para la reputación de su organización. Aprenda a conversar con las audiencias y siempre presente argumentos, no cace peleas con los comentaristas; algunos de ellos solo buscarán sabotear.
4. Sea sincero. Toda mentira e incluso las imprecisiones pueden ser cobradas en el futuro. Nadie que mienta en la red puede sostener una falacia por mucho tiempo. Está comprobado.
5. Sea informal, pero no indisciplinado. La presencia en este tipo de medios otorga todas las condiciones y facilidades para que la organización muestre un lenguaje de mayor proximidad, se relacione con los clientes y usuarios de una forma más informal. Sin embargo tenga toda la disciplina para ser coherente entre lo que dice en un espacio y lo que afirma en otro.
6. Arme un equipo para mantener su presencia activa en las redes sociales. El trabajo no termina cuando publica el último contenido durante el día que creó un perfil o un grupo en Facebook. Ese es solo el comienzo de un largo ritual de conversación. Usted no va a poder hacerlo solo, asesórese de personas que estén inmersas en esta dinámica y ojalá que trabajen en su empresa. No basta con saber manejar las herramientas o con solo saber del negocio, necesita las dos perspectivas.
7. Construya un ecosistema con las herramientas disponibles. Si bien tener de todo en la presencia de la organización en la red, si le conviene saber que hay instrumentos para cada cosa: blogs, wikis, redes sociales y microblogging, videos, audios y otros recursos para lograr una presencia impactante. Configure un ‘diálogo’ entre las diversas herramientas y no pierda de vista ninguna que haya creado. Administre bien cada presencia que cree en la red.
8. Asegúrese de invitar a su grupo, medio o causa solo a las personas que podría interesarles. De nada sirve tener una comunidad de miles de personas si muy pocas de estas tienen algo que decir o no son usuarias de su producto o servicio. En este punto fallan muchas campañas al valorar más la cantidad que la calidad y compromiso de los miembros.
9. Finalmente, nunca deje de aprender ni se case con una sola posibilidad. Si hoy están de moda ciertas herramientas, mire con ojo crítico su participación en ellas y olvídese de apalancar toda su estrategia en una sola durante todo el tiempo. Todavía no se ha creado la herramienta que dominará el mercado dentro de los próximos tres años.
10. Desborde estas recomendaciones y personalice su estrategia. Siéntese con su equipo a evaluar las necesidades, las brechas entre el hoy y mañana, los objetivos, las audiencias, los medios, los lenguajes y los momentos para comunicarse con sus públicos. Es posible que ni siquiera sean redes sociales lo que su organización requiere.
Este artículo es una actualización de: ’10 consejos básicos para las empresas sobre el uso de las redes sociales’, publicado en ¿Comunicación? – Blog de Víctor Solano en 2010