Este es un espacio de debate que no compromete la opinión de La Silla Vacía ni de sus aliados.
Después del debate alrededor de la grama sintética en el vecindario de la Jorge Tadeo Lozano y de la respuesta que recibí por parte del Alcalde de Bogotá, convoqué un equipo interdisciplinar y diverso para darle argumentos que lo convenzan de dejar crecer el pasto.

La grama sintética, foto tomada por Emilio Barriga el 21 de julio, paseando por el vecindario
de la universidad Jorge Tadeo Lozano de Bogotá
La anterior fue la primera foto que llamó mi atención en Facebook, pensé entonces que correspondía a un titular de Actualidad Panamericana, pero no, siguieron otras fotos y con ellas mi confusión. En el texto que escribí antes de compartir una variación de la imagenes de la alfombra verde, esa vez de Andrés Arriaga, preguntaba: El Espacio público nos pertenece. La administración local está a su cargo representando en su gestión nuestros intereses. ¿Qué nos interesa proteger al conocer esta intervención? ¿Qué le interesa a quien la propuso? Dicen que hay una argumentación científica en esta cubierta respecto a la vida que rodea ¿la pueden hacer pública quienes la propusieron y la implementaron? ¿cómo se manifiesta la comunidad educativa de la universidad Jorge Tadeo Lozano respecto a esta intervención aledaña a su campus? Muchas preguntas y mucho que hacer. Solo en chiquito podemos actuar y manifestarnos antes de que esta sea la solución para remplazar el pasto tratando de imitarlo. A las preguntas contestaron varios y el disparador de este texto, nuestro Alcalde. Me sorprendió, no sólo por el contenido de su respuesta, sino porque no lo conozco en persona, así que no lo tengo como uno de mis amigos, pero un equipo diligente contestó con su nombre y en su nombre:

En mi ejercicio de todera pero apoyada en la sabiduría de los amigos que han aportado a este debate en persona y por escrito desde sus disciplinas, oficios y vida, esta tarde te respondo Enrique:
Que la grama sintética es maravillosa sobretodo para cubrir zonas duras que necesitan ser amortiguadas en diferentes funciones, di tu tipo debajo de juegos para niños en tantos parques de cemento por toda la ciudad, pero este no es el caso, porque basta ver la foto para entender que la raíz de este problema exige no negar la raíz del árbol sino comprenderla. Que el paisaje desnivelado del que nos quieres proteger corresponde al de un país diverso y lleno de accidentes geográficos, que el tono de verde con que unificas, sin duda con alta tecnología y cierto nivel de permeabilidad a través de esta alfombra sintética, uniforma el color que falta en los escudos y banderas, y que es el que cubre nuestra tierra. Que el árbol respira para que tu respires y que con el alcalde anterior o anterior o anterior te ahogas por ti mismo si lo ahogas. Que basta ver la foto para sentir lo mosca en leche que se vuelve la hoja caída, y que a este costo del tapete te tocará sumar aspiradoras. Que el árbol para vivir necesita su franja y capa de tierra, que su follaje, hojas y frutos son el alimento de otros seres desde pájaros, hasta hongos y gusanos que también tu y yo alimentaremos cuando estemos bajo tierra. Que si quieres obras solo te retires al campo que prefieras a observar a la maestra, a la naturaleza, porque si bien Alcalde, necesitamos tanto, es humildad para comprendernos parte y para desearnos, así no seamos amigos en Facebook, vivir sanos.