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La Fundación Corona promueve proyectos que contribuyen a posicionar a la educación como motor de la movilidad social, entendida como mayores oportunidades para que las personas puedan desarrollarse y mejorar sus condiciones de vida. Esta filosofía busca a través de la educación, generar las competencias necesarias en la población para impulsar un desarrollo inclusivo y sostenible socialmente, objetivos que recaen sobre los gobiernos y las metas de desarrollo de las Naciones Unidas, la banca multilateral y la OCDE.
La Fundación Corona promueve proyectos que contribuyen a posicionar a la educación como motor de la movilidad social, entendida como mayores oportunidades para que las personas puedan desarrollarse y mejorar sus condiciones de vida. Esta filosofía busca a través de la educación, generar las competencias necesarias en la población para impulsar un desarrollo inclusivo y sostenible socialmente, objetivos que recaen sobre los gobiernos y las metas de desarrollo de las Naciones Unidas, la banca multilateral y la OCDE.
En este sentido, el sector privado, la sociedad civil y el sector no gubernamental, en general tienen la responsabilidad de asumir un papel activo en el proceso de toma de decisiones para no sólo lograr la inclusión de una agenda de desarrollo que sea representativa y genere oportunidades, sino también para promover una cultura de rendición de cuentas entre las administraciones públicas y la sociedad civil. En la gobernabilidad democrática que buscan todas las sociedades en este siglo, los asuntos públicos son una responsabilidad compartida entre el sector gubernamental y una ciudadanía activa que participa para incidir en su elaboración y también en el control de su ejecución.
¿Qué tendencias son las que actualmente dirigen las agendas de los gobiernos del mundo en esta dirección? Durante la conferencia de Rio+20 en 2011, Colombia fue uno de los proponentes de nuevas metas de desarrollo que profundizan los logros alcanzados por los Objetivos de Desarrollo del Milenio e incluye nuevas categorías alineadas con los retos que trae el siglo XXI. Se espera que las 17 metas de Desarrollo Sostenible (ODS-SDG) las cuales abordan muchas cuestiones, como la erradicación de la pobreza y el hambre, la mejora de la salud y la educación, la construcción de ciudades más sostenibles, la lucha contra el cambio climático y la protección de los bosques y océanos, influencien significativamente las prioridades de los gobiernos para alcanzar un desarrollo sostenible e inclusivo hacia el futuro.
¿Cómo nosotros desde la sociedad civil podríamos aportar a incluir estas tendencias en la agenda pública? Las ciudades Cómo Vamos, una iniciativa de la sociedad civil apoyada por la Fundación Corona desde 1998, fomenta la cultura de rendición de cuentas e incide en las políticas públicas a través de un trabajo activo con los tomadores de decisión en cada una de las 13 ciudades de Colombia donde tiene presencia. Este programa, que ha estado a la vanguardia en la medición de otros índices mundiales como el Índice de Progreso Social a nivel municipal en 2015, cuenta con las características apropiadas para hacer seguimiento a los nuevos objetivos de desarrollo sostenible en entornos urbanos y ser protagonista una vez más en las tendencias vanguardistas que buscan mejorar la forma como se mide el desarrollo.
Estas acciones son piezas para la construcción de una verdadera gobernabilidad democrática, cuyo aporte desde la sociedad civil a través de programas como los Cómo Vamos es clave para posicionar los temas más importantes ante los tomadores de decisión y la ciudadanía, generando la necesidad de ajustar falencias en las propuestas de gobierno o en las políticas dirigidas a sectores específicos que afectan la calidad de vida. Su resultado son mejores políticas públicas impulsadas por la sociedad civil y fundamentada en evidencia empírica.
Es también importante resaltar dentro de las piezas de la gobernabilidad democrática el papel central de la educación para fortalecer las competencias ciudadanas y crear una ciudadanía activa que demande resultados de sus gobernantes; los asuntos públicos en una sociedad democrática son responsabilidad de todos. En este sentido, la educación ciudadana actúa como uno de los pilares que soporta la filosofía del desarrollo inclusivo y sostenible, son los mismos ciudadanos los que detentan cargos públicos, los que eligen a sus gobernantes, y los beneficiarios de las políticas públicas.
¿Y la movilidad social? La educación ciudadana para el voto informado y la incidencia en políticas públicas refleja la corresponsabilidad con los asuntos públicos y la búsqueda de la movilidad social a través de mejores políticas que generen condiciones más equitativas de desarrollo, cuyo eje transversal es la educación. A través del seguimiento a las de tendencias internacionales como los ODS y la búsqueda de su inclusión en los programas de gobierno, iniciativas como los Cómo Vamos pueden generar futuros aportes importantes para que las políticas públicas logren un mayor nivel de representatividad e impacten positivamente el nivel de desarrollo de la población en general.