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El desarme es una realidad, pero la sociedad civil no confía en las Farc
Empiezo por preguntarme: ¿Qué es lo que realmente polariza a los colombianos hoy?
La más reciente encuesta de Gallup muestra que no es claro cuál es el problema que más les preocupa a los colombianos y también, que definitivamente ya no es el orden público, como lo fue durante varias décadas.
Si solo se compara la dejación de armas de las Farc que culminó el 27 de Junio de 2017 en todo el país, con la relación armas/hombre del más reciente desarme de los paramilitares en Colombia entre 2003-06, el primero ya lo supera en casi 50%
¿Cómo explicarse entonces que muchos colombianos cuestionen la mayor entrega de armas de que se tenga noticia, según relación armas/hombres desmovilizados?
Podríamos fácilmente concluir que todo lo que tenga que ver con las Farc genera desconfianza entre un sector importante de la población dada la polarización actual de los colombianos frente a este proceso. Pero, eso no explica ¿porqué se cuestionan actos verificables como la dejación de armas?
¡La entrega de armas es verificable! Existen suficientes videos, fotos y reportajes de fuentes y medios legítimos que documentan la dejación, además de que todo el proceso ha sido ratificado por Naciones Unidas.
Entiendo que puede haber temores fundados en el tema específico de la dejación de armas, como, por ejemplo: el hecho incontrovertible de que nadie sabe cuántas armas tenía las Farc; ni tampoco cuantos miembros de esa guerrilla han desertado o pueden desertar, como lo hicieron los mandos medios de los paramilitares; o, si se encontrarán todas las caletas, si son más, o incluso, cuál es su verdadero contenido. Pero ninguno de estos temores cuestiona lo que se entregó.
De hecho, ¿porqué entregarían las Farc más armas que hombres desmovilizados y las coordenadas de 900 caletas, si quisieran continuar armados?
No entiendo los verdaderos argumentos de quienes todavía se resisten a reconocer la trascendencia de que se hayan desarmado las Farc y busco desesperadamente alguna explicación.
Dentro de estas, encuentro una que quiero compartir. Existe una tesis en psicología que expone el profesor Fiery Cushman en sus clases y escritos, que dice que los hombres tenemos prejuicios implícitos casi imposibles de erradicar, como el racismo. Aunque no soy experta en este tema, se me ocurre pensar que, dado que muchos colombianos han sido condicionados cultural e históricamente a sentir un odio visceral hacia las Farc, las han deshumanizado a tal punto que hoy no pueden aceptarlas como ciudadanos. Por eso y, además de las razones políticas que subyacen la polarización actual, ni siquiera esa guerrilla desarmada representa una prueba suficiente de que se acabó la guerra con las Farc.