El pañuelo verde, símbolo de la lucha por los derechos y la autonomía de las mujeres, tomó una nueva forma: un libro. En esas páginas se resguarda la memoria del movimiento Causa Justa a través de la mirada de cinco integrantes que desde sus organizaciones contribuyeron a consolidar el movimiento que nos unió como mujeres y como colombianas, y que nos dio la libertad de decidir sobre nuestro proyecto de vida, según nuestros valores más íntimos.

“Causa Justa por el aborto, voces detrás de la demanda” es resultado de un trabajo colectivo, así como lo fue la demanda que llevó a la histórica sentencia que despenalizó el aborto hasta las 24 semanas de gestación y mantuvo el modelo de causales después de ese plazo.

Pero, sobre todo, este libro es fruto del deseo de que las voces de quienes hicieron parte de esta lucha y la de las mujeres que nos precedieron, se mantengan vivas y sirvan como alimento e inspiración para otras victorias del movimiento feminista.

El libro lo escribimos y lo discutimos de la misma forma en que construimos la demanda en aquellos días de 2019: sumando vivencias y testimonios, compartiendo experiencias, reflexiones y búsquedas profundas.

Cada página se convirtió en una muestra de sororidad, que nos invita a reconocer nuestra fuerza y a tejer redes de apoyo para buscar la garantía de nuestros derechos reproductivos, que son derechos humanos reconocidos por diferentes organismos de derechos humanos internacionales y regionales, incluidos Comités de Naciones Unidas y la Corte Interamericana de Derechos Humanos.

Los derechos reproductivos comprenden, a su vez, una constelación de derechos como el de la salud, la vida, la autonomía, la igualdad y no discriminación, la prohibición de tratos crueles inhumanos y degradantes, entre otros. Hago eco del derecho a la vida, porque contrario a lo que distintos sectores fundamentalistas han querido ventilar, la despenalización del aborto no busca desconocerlo, sino proteger el derecho a la vida de mujeres, adolescentes, niñas y personas con capacidad de gestar que se someten a abortos inseguros o a embarazos que las ponen en riesgo.

En el libro explicamos cada uno de los argumentos que presentamos y que la Corte Constitucional de Colombia acogió en su mayoría, entre ellos que la existencia del delito de aborto es ineficaz, contraproducente, injusto y discriminatorio, que vulnera el derecho a la salud y, más específicamente, el derecho a la salud reproductiva de las mujeres.

Además, este delito va en contra del derecho a la libertad de conciencia, ya que la decisión sobre la continuación de un embarazo debe ser tomada por la propia mujer de acuerdo con sus convicciones religiosas, morales, éticas o espirituales, y que viola el derecho a la igualdad, especialmente para las personas en situación migratoria irregular o aquellas que viven en mayores condiciones de vulnerabilidad, que son las que han enfrentado barreras adicionales para acceder a servicios de aborto. 

Queremos que se entienda, en resumidas cuentas, que esta Causa Justa es una lucha por nuestra libertad y ciudadanía, por este poder decidir sobre nuestros proyectos de vida a través del goce de nuestra autonomía reproductiva.

El ejercicio de este derecho nos dignifica y nos permite participar en igualdad de condiciones en esta democracia. La existencia de un delito como el del aborto no solo resulta ser desproporcionado e ineficaz, sino que además nos priva de vivir la promesa de la igualdad.

Ojalá en un futuro nos cause tanta indignación pensar que fuimos perseguidas por este delito durante años, como nos causa hoy el pensar que en el pasado las mujeres no tuvieron derecho al voto o a tener propiedad.

Este libro también lo escribimos para contar las historias detrás de todas esas acciones de comunicación, incidencia y movilización que hicieron posible el éxito del movimiento, porque sí: la demanda fue solo una parte de una apuesta más integral y más grande, la de la conversación nacional, la de la pedagogía y la de la despenalización social.

Nos propusimos poner a hablar a la gente sobre quiénes son las mujeres que abortan y concluimos que somos todas, pero que las perseguidas, criminalizadas y aquellas que exponían su vida por recurrir a abortos inseguros eran, sobre todo, las que hacían parte de grupos históricamente discriminados.

Viéndolo en retrospectiva, gran parte del éxito de la Causa Justa estuvo en lo colectivo, en esa capacidad de organizarnos, de crear vínculos, de resolver diferencias y trabajar por un propósito común.

Nos gustaría creer que a través de estos esfuerzos que han llevado a una decisión histórica, podemos ofrecer al mundo ciertos aprendizajes valiosos como el nacimiento y consolidación de un movimiento sólido que participa, exige, informa, educa, lucha y defiende lo ganado.

Hoy en América Latina hemos conquistado logros históricos para la garantía y promoción de los derechos reproductivos: en Argentina el acceso al aborto está protegido por la ley, en México la Suprema Corte declaró inconstitucional la criminalización absoluta de este procedimiento de salud y en Ecuador el Tribunal Constitucional despenalizó el aborto en casos de violación sexual.

Todos esos logros son el resultado del trabajo de la marea verde, que ha convertido a la región en un referente mundial. Pero todavía seis países mantienen vigente la prohibición absoluta y 17 más condicionan las decisiones a factores como riesgo para la vida y la salud.

Por eso este libro también se convierte en un llamado a la acción para reconocer que los derechos que gozamos hoy fueron una conquista y no una concesión, y en una invitación a ratificar que no daremos ni un paso atrás.

Cada página está dedicada a las mujeres y niñas que tuvieron que arriesgar sus vidas, su salud y su dignidad en momentos en que el marco legal les fue adverso. Con él rendimos un homenaje a las mujeres y organizaciones que hacen parte del movimiento Causa Justa, porque esta lucha que es la libertad de todas, solo es posible con el trabajo de todas.

Nuestra Causa Justa es la libertad.

*Causa Justa por el aborto: voces detrás de la demanda fue escrito por Ana Cristina González Vélez, de La Mesa por la Vida y la Salud de las Mujeres; Catalina Martínez Coral, del Centro de Derechos Reproductivos; Laura Gil, del Grupo Médico por el Derecho a Decidir; Sandra Mazo, de Católicas por el Derecho a Decidir; y Mariana Ardila, quien para el momento de la demanda estaba en Women’s Link Worldwide. Es editado por Tirant Lo Blanch.

Es la directora regional para América Latina y el Caribe del Centro de Derechos Reproductivose e integrante del movimiento Causa Justa. Estudió dos maestrías en derecho internacional público y relaciones internacionales de la Universidad Panthéon Sorbonne y del Instituto de Estudios Políticos de...