Este es un espacio de debate que no compromete la opinión de La Silla Vacía ni de sus aliados.
Desde junio de 2011 los seguidores de la serie Game of Thrones de HBO han visto a sus protagonistas enfrentarse de la manera más sangrienta y despiadada en un mundo lleno de fantasía por el poder absoluto de Westeros. El #RecomendadoDeLiderazgo es ese artículo publicado en la revista Forbes que resalta las lecciones de liderazgo que deja esta batalla incansable.
Estos son algunos apartes en español tomados del texto original en inglés en Forbes

En muchos aspectos, Westeros no se parece al mundo real: no hay dragones, no hay caminantes blancos, no hay personas sin rostro, no hay huargos, y los asesinatos misteriosos entre rivales políticos son menos frecuentes. En Westeros no hay celulares o televisión por cable, mientras que en el mundo real la gente ve Game of Thrones, la serie más popular y exitosa de HBO.
Son las relaciones: lealtades familiares, amor, secretos, traiciones, venganza, amistad, camaradería y política las que trascienden la fantasía. El juego de tronos en Westeros es mucho más sangriento que en el mundo real, donde la competencia radica en superar adversarios, desacreditar sus opiniones y disminuir su influencia. Tal como ocurre en Westeros, llegar al poder es difícil, pero mantenerlo lo es aún más, y cada personaje escoge distintas maneras de aproximarse a este.
Aquí están algunas lecciones de liderazgo que nos deja Game of Thrones:
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Escuche a sus consejeros
En el segundo episodio de la cuarta temporada, Tywin Lannister le habla al siguiente en línea al trono, su nieto Tommen Baratheon, junto al cuerpo recién asesinado de su hermano mayor, el Rey Joeffrey, acerca de lo que significa ser un buen rey.
Tywin: ¿Qué clase de rey crees que serás?
Tommen: ¿Un buen rey?
Tywin: Creo que lo serás. Tienes el temperamento para eso. ¿Pero qué hace a un buen rey? ¿Cuál es la cualidad más importante de un rey?
Tommen: ¿Santidad?
Tywin: Baelor el Bendecido era santo y piadoso. El creó esta secta. También nombró a un niño de seis años líder de la secta porque pensó que podía hacer milagros. Terminó muerto antes de tiempo, dejó de comer porque la comida era de este mundo, y este era un mundo pecador.

Tommen: Justicia.
Tywin: Un buen rey debe ser justo. Orys I fue justo. Todo el mundo aplaudió sus reformas. Nobles y comunes por igual. Pero no duró mucho. Fue asesinado por su propio hermano mientras dormía. ¿Fue eso verdaderamente justo de su parte? ¿Dejar a sus súbditos en manos de un mal que el mismo por su credulidad no pudo reconocer?
Tommen: No.
Tywin: No.
Tommen: ¿Qué tal fuerza?
Tywin: El rey Robert era fuerte. Ganó la rebelión y aplastó la dinastía Targaryen. Solo asistió a 3 reuniones del consejo en 17 años. Pasó el tiempo con mujeres, cazando y bebiendo hasta que esto lo mató. Así que tenemos un hombre que se mata de hambre, uno que permite que su propio hermano lo asesine, y otro que cree que ganar y gobernar son la misma cosa. ¿Qué les hace falta a todos?
Tommen: Sabiduría.
Tywin: ¡Si! ¿Pero qué es sabiduría? Una casa con gran riqueza y tierra fértil pide tu protección en contra de otra casa con una fuerte armada que algún día podría oponerse a tu reino. ¿Cómo sabes cual opción es sabia y cuál no? ¿Tienes alguna experiencia en tesoros, o graneros o barcos y soldados?
Tommen: No.
Tywin: Claro que no. Un rey sabio sabe lo que sabe y lo que no. Tu eres joven. Un rey joven y sabio oye a sus consejeros y sigue sus recomendaciones hasta que se hace mayor. Y los reyes más sabios continúan haciéndoles caso mucho tiempo después.
Esto es por supuesto una manipulación del poder, pero hay personas peores a Tywin Lannister que podrían estar en el poder y nadie sabe esto mejor que Tywin Lannister. Es un tema común en Game of Thrones el que los consejeros sean más sabios que sus gobernantes: Ned Stark es más sabio que Robert Baratheon, Davos es más sabio que Stannis, Samwell Traly y Maester Amon son más sabios que Jon Snow, Tyrion y Jorah son más sabios que Daenerys. Pero ellos no tienen ni la visión ni el carisma de sus líderes (o el apellido o la fortuna), así es que le prestan su sabiduría a aquellos que tienen estas características. Los mejores líderes en Westeros o en el mundo real se rodean de gente más sabia que ellos, y los escuchan.

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Conozca sus debilidades
En el cuarto episodio de la tercera temporada, Cersei visita a su padre para preguntarle si están haciendo todo lo posible para liberar a su hermano gemelo Jamie Lannister. Pero también le deja saber que ella tiene más que ofrecer que sus hermanos. Tywin le contesta: “No desconfío de ti porque seas mujer, desconfío de ti porque no eres tan inteligente como crees que eres”. Cersei no confía en nadie, es incapaz de delegar y no inspira a las personas a que la sigan, sino a que le teman.
Ya es muy tarde cuando Cercei comprende los errores que cometió: tener una relación incestuosa con su hermano; matar a su esposo; complacer a su hijo Joffrey hasta el punto de no poder controlarlo; permitir que Joffrey matara a Ned Stark; consentir que Arya escapara; no escuchar a su hermano Tyrion acerca de Joffrey o acerca del Night’s Watch o de ninguna otra cosa. La mayoría de estos errores fueron cometidos para lograr un solo objetivo de corto plazo (eliminar a un enemigo), sin medir las implicaciones a largo plazo. Un buen líder sabe que es posible convertir debilidades en fortalezas, reconociéndolas y enfrentándolas, pero lo primero es saber que existen.
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Lidere con el ejemplo
Jon Snow quiere probar constantemente que es más que un bastardo, y como su padre (que en realidad es su tío) Ned Starck, él es un héroe al punto de liderar la batalla hacia su propia muerte. Jon persuade a Tormund Giantsbane, el nuevo líder de los Wildlings, de convencer a su gente de vivir dentro del muro (the wall) y hacer las paces con los Night’s Watch. Los dos saben que están arriesgando su vida al tratar de persuadir a los Wildlings de esto, pero es la única manera de salvar a su gente. Snow y Tormund Giantsbane dan discursos conmovedores y la mayoría de los Wildlings accede a seguirlos. Cuando la gente se está organizando para empezar el camino hacia el muro, el Nigth King y su ejército los atacan dejando como sobrevivientes a unos pocos. Estos logran llegar hasta las puertas del muro donde son recibidos por los Night’s Watch. En ese momento, Allister Thorne le dice al oído a Jon Snow: “Tú tienes un buen corazón Jon Snow, pero vas a hacer que nos maten a todos.”
Jon Snow sabía que ésta era una decisión difícil, que algunos de sus hermanos del Night’s Watch no estarían de acuerdo, pero lo hizo de todas maneras porque era lo correcto. Es lo que hace grande a Jon Snow, es lo que lo hace un gran líder y un gran hombre y es la razón por la que tantas personas se acercan a él y lo siguen.

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La inclusión es una ventaja
Los consejeros de Daenerys incluyen al líder del ejército inmaculado, una esclava liberada, y al enano Tyrion Lannister. Ninguna otra persona en Westeros ha convertido los prejuicios de otros en sus fortalezas como lo ha hecho Daenerys. Su instinto más brillante es no juzgar a las personas por su origen sino por su talento.
Debido a que Daenerys mantiene una mente abierta, ha logrado reunir el mejor grupo de consejeros de todos los que están luchando por el Iron Throne. El camino para conquistar Westeros es largo, pero ella tiene más posibilidades que los demás gracias a este grupo de consejeros –y, por supuesto, a sus dragones.

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Un gran liderazgo trae grandes sacrificios
Game of Thrones se trata más que nada del precio del poder. Cuando Jon Snow es capturado por los Wildlings, y ve la oportunidad para escapar, lo hace dejando atrás a la joven Wildling de la que se enamoró, para mantener su lealtad con los Night’s Watch. Por el contrario, Rob Stark no mantuvo su palabra de casarse con una de las hijas de Walder Frey, así es que este lo traicionó aliándose con los Lannister y asesinándolo. El poder es un negocio peligroso y tiene un precio alto. La serie muestra una y otra vez que aquellos que están dispuestos a hacer grandes sacrificios son mejores líderes, y aquellos que no, fracasan.