Este es un espacio de debate que no compromete la opinión de La Silla Vacía ni de sus aliados.
El Atlético Bucaramanga nos dio una alegría, pero el deporte en Santander sigue relegado.
Primero que todo quiero dejar claro que me alegra la victoria y el ascenso del Atlético Bucaramanga, especialmente por sus jugadores, pero además, porque ya era hora que la ciudad tuviese un equipo en la primera categoría del fútbol colombiano, especialmente uno que de gusto ir a ver, así como pasa con el actual campeón de la copa de baloncesto.
Sin embargo, llámenme aguafiestas, pero esta misma semana, en Santander quedamos séptimos en los juegos nacionales, 321 medallas menos que Antioquia, y Santander no participó en fútbol, ni en fútbol sala, solo en fútbol de salón y no quedó dentro de los primeros puestos. ¿En dónde está la estructura deportiva y el apoyo a los semilleros que nos generen los próximos deportistas profesionales?
Así mismo, para quienes no recuerdan, hace tan solo unos meses hubo un aviso preventivo para utilizar algunas graderías del estadio debido a su precario estado, en varias ocasiones advirtiendo ésta situación, incluso limitando su uso, ¿continuaremos así ahora que estamos en la A?
Quiero aprovechar este momento de euforia Bucara para que pensemos y reclamemos por el deporte en Santander, ayer se ganó tan solo una batalla, pero a largo plazo, seguiremos relegados en la competencia deportiva, gracias al escaso apoyo que se brinda al deporte en el departamento y que en muchos casos, como ha sido desde el siglo pasado, sigue dependiendo de rifas, limosnas, recursos propios y mucha pasión para tratar de salir adelante.
Esto es tan solo un llamado a que así como nos alegramos por el atlético Bucaramanga, pidamos respeto por el deporte en general y por quienes dedican parte de su vida a representar al departamento, para que algún día, podamos tener aún más alegrías por el deporte regional.
