En los últimos 10 años, época en donde se educó parte de la generación millennial se han graduado más del 50% de los ingenieros de petróleos en Colombia, de los cuales a la fecha un 70% está desempleado, lo que afecta la competitividad y la visión de los jóvenes en regiones como Santander y Norte de Santander. Un precio alto que se paga por la alta especialidad.

A diciembre de 2016 el DANE reportó un 9.2% de desempleados en el país y aunque los esfuerzos del Gobierno por revelar cifras de un dígito y de caracterizar al sector industrial como el gran motor de la ocupación, el sector petrolero se mantiene en un momento de reinvención. Con las lecciones aprendidas tras la crisis del barril, los petroleros revalúan su política de empleo, contratación y salarios de los trabajadores.

El problema no son solamente los 40.000 desempleados que según la ministra de Trabajo perdieron su puesto en 2015 y 2016, y que ha golpeado a regiones petroleras como Norte de Santander en donde el desempleo es uno de los más altos del país, en Cúcuta, por ejemplo, superó el 15%. Ahora lamentablemente, en el sector también hay un tema generacional.

En los últimos 10 años, durante la época en donde se educó la generación millennial se han graduado más del 50% de los ingenieros de petróleos en Colombia, de los cuales a la fecha un 70% está desempleado según estima la Asociación Colombiana de Ingenieros (Acipet). “Llegaron los mejores estudiantes a las universidades, preparados hasta con 4 idiomas, incluso yo fui parte del comité de selección de la Universidad América, muchos con una disposición para el liderazgo”, precisa Julio César Vera, presidente de la Asociación. Sin embargo, la generación millennial, no se ubica laboralmente a diferencia de sus colegas de años anteriores, quienes aunque no ocupan grandes posiciones gerenciales, se integraron al boom petrolero de los grandes campos, como Cusiana y están mejor aferrados laboralmente.

Para enfrentar el desafío generacional, que no es para nada fácil, porque además de un barril con un precio debil que limita nuevos proyectos en el mundo, otro reto que enfrenta el gremio es que, “difícilmente los toman encuenta para posiciones gerenciales”, comenta el presidente Julio Vera. Parece que las aptitudes de liderazgo y visión de los jóvenes millennials recién egresados, no se encuentran en el momento, claramente, para asumir posiciones administrativas que aprovechen sus aptitudes y puedan emparejar las competencias gerenciales, con otras profesiones.

Para lograrlo el gremio se prepara a través de convenios universitarios y programas como: “Comparte tu Conocimiento”, el cual busca que los nuevos egresados no entren 0 kilómetros, y puedan obtener experiencia laboral, así como capacitaciones masivas en recobro mejorado y costa afuera, en donde el país tiene sus perspectivas de desarrollo petrolero, justamente, para evitar el desabastecimiento y la reactivación industrial que permitirá nuevos empleos. Ahora, se espera que los jóvenes puedan conectarse laboralmente como lo hicieron sus predecesores en los grandes campos de los llanos orientales.

Las actitudes críticas y exigentes de la generación millennial también debe compaginarse con las lecciones aprendidas de la industria y entenderse las épocas de crisis y bonanzas. El bajón de los precios de los últimos años, obligó a un reajuste salarial que, con los nuevos pagos, que en un principio no son tan prometedores, muchos juniors y seniors dentro del sector, eligen no trabajar.

Para mayor información sobre impactos sociales y económicos del sector petrolero en colombia, visite:www.crudotransparente.com  

Politólogo de la Universidad de los Andes y Master en periodismo del Clarín con una investigación sobre luchas sociales en entornos digitales, por proyectos petroleros no convencionales, fracking. Especialista de la facultad de comunicación de la Universidad Javeriana en Televisión. Mis intereses...