Este es un espacio de debate que no compromete la opinión de La Silla Vacía ni de sus aliados.
Analizando los resultados electorales, como era de esperarse, Gustavo Petro pasó a segunda vuelta, pero no con Federico Gutiérrez, sino con Rodolfo Hernández. Esta fue la gran sorpresa de esta primera vuelta, ya que ninguna encuesta se aproximó a lo acontecido. Ahora bien, con estos resultados el panorama no pinta nada bien para el petrismo, dado que tocó casi su mismo techo de votos que en las elecciones de 2018, específicamente en segunda vuelta, con 8.040.449.
Frente a esto, son pocas las opciones que tiene para lograr obtener los votos necesarios para ganar, a menos que logre persuadir al electorado del candidato Sergio Fajardo, que obtuvo el 4 % de los votos válidos, o que convenza a los abstencionistas, que para estas elecciones fue la cifra más baja en las últimos años con el 46 %. Pero aún así no sería una tarea tan fácil con tan poco tiempo.
Por su parte, Rodolfo Hernández ha logrado sin mayor esfuerzo el apoyo de políticos tradicionales y del mismo candidato Federico Gutiérrez, quien obtuvo el 23,91 %, lo que hasta ahora le garantizaría la Presidencia de Colombia.
Con este panorama electoral, proponemos algunas hipótesis a tener en cuenta:
El establecimiento no ha sido sacado del poder, como muchos se han aventurado a señalar
El establecimiento recibe un duro golpe al no tener un candidato propio para los comicios electorales, pero todavía cuentan con una parte importante del órgano legislativo electo de su lado. De acuerdo con Juan Lewin y Manuela Galvis, en el Senado es improbable que Petro logre una mayoría, a diferencia del excandidato de derecha Federico Gutiérrez, quien tenía a su favor el 49 % de los senadores. Así mismo, en lo que refiere a los órganos de control que deberían ser independientes y autónomos, el presidente Duque ha realizado algunas movidas para amarrar el poder al presidente que será electo. Entre esas se aseguró de que de los 10 finalistas para próximo contralor, al menos nueve fueran de la cuerda del establecimiento, como lo mostró Tatiana Duque en La Silla Vacía. La cooptación de los entes no termina ahí; el actual Fiscal General de la Nación, Francisco Barbosa, y la Procuradora General de la Nación, Margarita Cabello Blanco, tienen una evidente cercanía con el actual presidente.
Rodolfo Hernández: ¿plan C del uribismo?
¿Es Rodolfo Hernández uribista? La respuesta es “no”. Hernández no es el candidato del uribismo, pero si quiere llegar a la Casa de Nariño debe hacer alianzas y acuerdos con ellos. Adicionalmente, entre los dos candidatos, quien tiene mayores coincidencias con el establecimiento y recoge muy bien el antipetrismo es Rodolfo Hernández. Por eso, congresistas del uribismo ya han expresado su apoyo y adhesión a la campaña del candidato, aunque este públicamente ha señalado que no acepta estas alianzas, pues entiende que lo único que le garantiza el triunfo en segunda vuelta es mantener el discurso de independiente entre Uribe y Petro.
Ahora bien, pese a que no los acepte, la derecha le pondrá una votación importante, no por lo que él representa, sino para derrotar a Petro. Hernández asegura que el uribismo murió el domingo, pero él lo resucitará este 19 de junio y le tocará aliarse con ellos para lograr gobernabilidad.
Gustavo Petro es el ganador en primera vuelta, pero la tiene difícil en segunda
Gustavo Petro ganó en esta primera vuelta, como no lo había hecho otro candidato de izquierda en la historia del país. Sin embargo, en segunda vuelta el panorama no es tan claro para él: ¿de dónde sacarán los votos que le hacen falta? Lo único que puede hacer es mover el electorado abstencionista, arañar los votos que obtuvo Rodolfo del electorado indeciso y llamar a los votantes de Fajardo, pero aún así dudamos mucho de que le alcance.
Por otro lado, las estrategias en esta etapa son cruciales para movilizar votos y convencer. Si Gustavo quiere lograr ser el presidente del cambio, tal como se denomina, debe salir del discurso estigmatizador para el opositor, que ha sido una constante en los seguidores del petrismo, porque no gobernará solo para los del Pacto Histórico, sino para todas y todos los colombianos.
Por tanto, es necesario que entienda que el lenguaje, el fondo y las formas son importantes y generan confianza. Si no, el miedo seguirá siendo el gran ganador ante cualquier proyecto de política de izquierda.
Esta columna fue escrita en coautoría con Gianis Giacometto Márquez