Este es un espacio de debate que no compromete la opinión de La Silla Vacía ni de sus aliados.
¿Cuántas veces ha donado sangre en su vida? Yo solamente una, de hecho hace muy poco decidí hacerlo. Quiero decir que me ha dado una de las mejores lecciones de vida. Es algo que me hubiera gustado haber hecho hace mucho. Esta es una reflexión que quiero compartir, sobre todo con quienes nunca han donado sangre pero les llama la atención. Para mí, es algo que vale TODA la pena.
En Colombia podemos donar sangre después de los 18 años y luego de cumplir una serie de requisitos muy importantes para cuidar nuestra salud y la de las personas que reciben nuestra sangre. De los 8 años en los que hubiese podido donar, únicamente lo he hecho una sola vez, hace una semana. El pasado viernes decidí hacerlo porque estaba muy cerca al Hemocentro Distrital de la Secretaría de Salud (Cra 32 #12-81) ya que tuve que pagar una multa de tránsito en la Secretaría de Movilidad de Bogotá (no olviden revisar que tengan los papeles al día ). Tenía tiempo y desde hace rato me dije que era algo que tenía que hacer así que me animé.
El proceso es bastante sencillo. Primero llené un formulario que es completamente confidencial y que nos ayuda a evaluar si estamos en capacidad de donar sangre. Luego fui valorado por el personal del banco de sangre y resolví un par de dudas que tenía del cuestionario. Afortunadamente cumplí con todo lo necesario para hacer mi donación (y aún si no hubiera cumplido, estaría bien también. Lo importante es nuestra seguridad y la de los pacientes).
Después pasé a un espacio donde me tomaron una gotica de sangre para mirar mi nivel de hemoglobina, me regalaron agua para hidratarme y luego pasé a la silla en donde se recolectaría 450ml de mi sangre, lo cual al final es mucho más poquito de lo que uno se imagina. El proceso tomó solo 7 minutos y de mi donación se puede extraer plasma, glóbulos rojos y plaquetas, por eso se dice que podemos ayudar a salvar 3 vidas. Al final me dieron un pequeño refrigerio para reponer energía y listo!
Desde que hice mi donación he caido en cuenta de muchas cosas. Me arrepiento mucho de no haberlo hecho antes. Caí en cuenta que no importa la justificación que tuviese, en últimas todas han sido excusas para no ayudar a salvar la vida de alguien más, pudiendo hacerlo a través de algo tan simple. Pensé en las personas que amo y en lo devastador que sería si mi vida o la de ellos estuviese en riesgo porque la sangre con la que contamos no es suficiente. Muchas veces reflexionamos en los momentos más difíciles y aveces en los más tardíos, pero no siempre tiene que ser así.
Es más duro cuando se piensa que esa es la dura realidad que tienen que enfrentar muchas familias a diario, personas que requieren sangre y sus derivados para compartir más cumpleaños con sus familiares y amigos, madres que traen al mundo a sus hijos para llenar de felicidad sus hogares o niñas y niños que dependen de las donaciones para luchar contra inevitables injusticias de la vida. Nuestra donación puede contribuir a cambiar la vida de otras personas, a darles esperanza y fuerza para enfrentar las adversidades que se les han presentado en el camino. Algo tan simple como sentarme en una silla por 7 minutos, me ha hecho profundamente feliz. Aún si tomara 1, 3 o 5 horas, seguiría valiendo la pena.
La donación de sangre es uno de los actos más maravillosos que he experimentado. Mi sangre puede servir para apoyar a una niña con cáncer o incluso para salvarle la vida a mi peor enemigo. Nunca sabré quién la recibirá y eso está bien, es lo que lo hace un acto verdaderamente altruista. Es el hacer el bien sin mirar a quien, literalmente.
Esa reflexión que genera donar sangre es lo que necesitamos en este país para alcanzar una paz verdadera, una justicia social y una menor desigualdad. Necesitamos líderes y ciudadanos que actuen sin esperar nada a cambio, que den lo mejor de sí a todos, sin importar que eso implique dar a quienes opinan o piensan distinto y que lo hagan siempre y en toda ocasión, no únicamente cuando se presente una situación grave. ¡Necesitamos más y más personas que donen sangre y que adopten el significado de la donación en su actuar!
Los invito a donar sangre esta semana, cualquier día. Piensen en todas las excusas que en este momento van sacando en su mente y vénzanlas! Inténtenlo una vez, así sea solo una pero háganlo por ustedes mismos, por las personas que aman y por todos los que no conocen pero que van a estar felices de recibir lo mejor de ustedes. Vayan acompañados, así también es más divertido. Sé que no es EL plan, pero eso tan simple para alguien más será un regalo inigualable. Si les gusta, háganlo regularmente e inviten a más personas, por supuesto respetando siempre la decisión de quien no esté de acuerdo.
Con tan solo una persona a quien logre llamar la intencióin y que done sangre gracias a este artículo, estaría más que feliz. Yo no gano nada, ganamos todos. Desde ya le doy las gracias y un fuerte abrazo!
Todo lo que necesitan saber para donar sangre en Colombia, lo pueden encontrar en la página web de la maravillosa campaña Lo Rico Que Se Siente, la cual también me motivó a donar: [http://loricoquesesiente.com/index.html]. A propósito, les dejo uno de sus videos: