La Silla Paisa visitó el corregimiento en el que hace más de tres años no hay un solo asesinato, y en el que los partidos Farc y la UP tienen una base social tradicional para llegar al poder.

En la foto, el rostro de Bartolomé Cataño, concejal de la Unión Patriótica asesinado en 1996 y fundador de San José de Apartadó. Al lado está su nieto, Jesús, representante de ese partido por Urabá y líder campesino del corregimiento.

Una de las metas que tiene el partido de la Farc en Antioquia es ganar votos en el eje bananero, como habíamos contado. En esa región se formó el frente 5 y controló poblaciones a las que aún les quedan marcas.

Una de esas es San José, el corregimiento más grande de Apartadó, a media hora por carretera destapada desde el casco urbano de ese municipio.

La zona fue un día fue bastión de la Unión Patriótica, a través de líderes como Bartolomé Cataño, que asesinaron paramilitares en 1996, y de la exguerrilla.

Hoy al corregimiento le quedan dos asociaciones campesinas con integrantes de la UP, el Partido Comunista y la Farc. También tres aldeas neutrales o Comunidades de Paz que se asentaron allí cuando las AUC se fueron y llegó la Fuerza Pública.

Esas aldeas hoy tienen casi el diez por ciento de la población total del corregimiento y, aunque no participan en política, son las que hacen denuncias de resonancia internacional sobre los abusos de nuevos grupos armados que quieren conquistar la zona, que es rica en cacao, banano y carbón.

Mientras que en Apartadó hay hasta tres muertos por semana por riñas y ajustes de cuentas por microtráfico según la Secretaría de Gobierno de ese municipio, en San José no matan a nadie desde el cese al fuego con las Farc. Ahora ellos se dedican a renovar por vía política las bases de izquierda que allí conquistaron.

La comunidad ha denunciado ver en seis veredas del corregimiento (que en total son 32) hombres de camuflado y brazalete. La última amenaza que estuvo cerca de ser homicidio ocurrió el viernes 29 de diciembre, cuando presuntos paramilitares entraron a la Comunidad de Paz con el fin de agredir a Germán Graciano, uno de sus líderes.

Así es el pueblo.

 

Después de tener tres alcaldes seguidos de la UP en los 90, en Apartadó no volvió a haber candidatos por ese partido hasta el 2015. En esas últimas elecciones locales, la candidata de la Unión Patriótica se llevó el 45 por ciento de los votos de San José.

En el plebiscito de octubre de 2016, 387 de 422 votantes en el corregimiento dijeron Sí al fin de las Farc como guerrilla. En total San José hay poco más de 6 mil habitantes, de los cuales 1257 tienen la cédula inscrita.

Con las elecciones que vienen en los próximos dos años, se verá si en la zona en que un día mandaron las Farc habrá votos para ellos como partido, o si querrán que su tradicional brazo político vuelva por el legado que les dejó.

Comunicadora social de la universidad Eafit. Cuento historias de Antioquia y el Eje Cafetero. @sararuizmo