Todo el mundo quiere ser alguien diferente cuando grande. Y si se es un político joven, el sueño de construir un país más justo, más moderno o más incluyente es más fuerte. ¿Pero qué pasa de los sueños a las realidades? ¿Por qué al final, crecen y son más o menos iguales -tan bueno o tan malos- como sus antecesores?
Una de las razones es que una cosa es tener una ilusión y otra muy diferente, tener un plan, una estrategia para hacer política de manera radicalmente diferente. La otra es que con frecuencia la estructura misma de la política es la que obliga a los políticos a comportarse de una manera específica si quieren sobrevivir y por más jóvenes e idealistas que sean terminan aprendiendo y jugando el juego. Por eso, si se quiere un cambio es difícil que lo haga un individuo solo.
Por eso, unidos con la idea de repensar las principales problemáticas de Colombia, concejales, representantes a la cámara, ediles y otras personas que han desempeñado cargos de elección popular, y que nacieron después de 1970, firmaron hace unos meses un Acuerdo Generacional con la intención de hacer política de una forma diferente.
Sus visiones sobre el país se encuentran consignadas en el libro “Colombia 2030 vista por sus protagonistas” que ahora comienzan a discutir en diferentes lugares del país. La publicación muestra un diagnóstico sobre ocho problemáticas estructurales que deben abordarse de distinta manera para conformar el país que se sueñan en veinte años.
La unión de estos 21 políticos, se fundamenta en el respeto y la dignidad en la contienda política y en la búsqueda de soluciones pacíficas y constructivas a los grandes retos que tiene Colombia en temas económicos, sociales y demás. La Silla Vacía entrevistó a algunos de ellos y les preguntó por una cosa que los diferenciaba de las generaciones políticas anteriores. Esto fue lo que respondieron. Seguramente, lo mismo que habrían respondido sus papás y sus abuelos. ¿Lo cumplirán?
Haga clic en las flechas laterales o en el autoplay para conocer las respuestas.
Fotografías: Laura Rico Piñeres