El anuncio de Cambio Radical de no apoyarlas hace imposible que el Congreso las apruebe.

La decisión de la bancada de Cambio Radical de votar contra las seis objeciones que presentó el presidente Iván Duque contra el proyecto de ley estatutaria de la JEP hace imposible que el Senado o la Cámara las aprueben. Sin Cambio, como contamos desde la noche en la que Duque anunció sus objeciones, es imposible que el Gobierno las logre aprobar.

Sin embargo, eso no significa que necesariamente las rechace el Congreso. Eso porque para hundirlas se necesitan que la mayoría de senadores (54) y la mayoría de representantes (86) voten en su contra, y entre impedimentos y posibles ausencias el día de la votación, no es obvio que la oposición ampliada logre hundirlas.

Más porque la decisión de hoy de Cambio no fue unánime, como dijo a la salida de la reunión el representante por el Atlántioc César Lorduy (del grupo charista), por lo que no sería raro que se ausentaran algunos a la hora de votar. La Silla supo que Lorduy y el senador Antonio Zabaraín, ambos charistas, dijeron que apoyan las objeciones.

Con Cambio y La U completos, el no a las objeciones podría sumar 62 votos en Senado y 108 en la Cámara.

Eso deja un margen de nueve senadores que puede ser insuficiente si el día de la votación terminan impedidos algunos como Iván Cepeda, cuya esposa trabaja en la JEP, y no van algunos cercanos al gobierno, como Carlos Fernando Motoa, Arturo Char, Antonio Zabaraíny Luis Eduardo DiazGranados de Cambio (que no estuvieron en la reunión de hoy), José David Name o Eduardo Pulgar de La U o incluso el liberal Mauricio Gómez Amín.

En su decisión de la semana pasada, la Corte Constitucional ya dijo que si no hay una votación mayoritaria de acá al 20 de junio, el Congreso le debe mandar el proyecto de ley estatutaria y será ella quien decida. La decisión de Cambio de hoy hace probable que eso sea lo que pase.