En el seminario Rol de la Presidencia, organizado por la Escuela de Gobierno Alberto Lleras Camargo de la Universidad de los Andes, el ex Secretario General de la Presidencia Bernardo Moreno mostró abiertamente cuál era su papel en el gobierno Uribe.

En un panel de ex secretarios generales, varios de ellos manifestaron su incomodidad con el hecho de que ese cargo tiene la función de repartir los puestos públicos y por ende manejar a los congresistas. Algunos plantearon la necesidad de cambiar esa situación, porque además quita mucho tiempo, el 30% dijo uno, el 50% dijo otro, y el Secretario debe además apoyar al Presidente coordinando a los ministros y a los consejeros presidenciales, y manejar un departamento administrativo de 1.000 empleados y 350.000 millones de presupuesto.

Moreno discrepó de sus antecesores manifestando no solo que esa “función” debía mantenerse, sino que él le dedicaba el 90% de su tiempo a atender parlamentarios.