El senador de La U Musa Besaile, el director de la CVS, José Fernando Tirado y el gobernadore Edwin Besaile. (Foto tomada de laventanadecordoba.com)

La máxima autoridad ambiental de Córdoba debe más de 45 mil millones de pesos de un préstamo que, según su Director, no puede pagar. El poder detrás de esa entidad es el Senador más votado de la coalición del Gobierno Nacional.

La Corporación de los Valles del Sinú y San Jorge (CVS), la CAR de Córdoba, se ha declarado en una crisis financiera porque no tiene dinero para pagar una deuda de más de 45 mil millones de pesos de un préstamo que  hizo en 2010 para invertir en el Plan Departamental de Aguas, una estrategia del gobierno Uribe para apalancar los proyectos de acueducto y alcantarillado en los que las CAR estaban llamadas a aportar recursos.

Aunque es un secreto a voces en Córdoba, lo que nadie ha detallado es que hace 10 a?os esa CAR es manejada políticamente por el senador más votado de la coalición de Gobierno: Musa Besaile, uno de los llamados ??o?os?. Un súper poderoso que maneja la Gobernación, vía su hermano Edwin Besaile, manda en el centro agropecuario del Sena y tiene injerencia en más de 10 Alcaldías cordobesas.   

La crisis

La CAR no ha podido pagar su deuda (cuyo préstamo original fue de 55 mil millones de pesos) porque desde 2012 ha disminuido significativamente su presupuesto por cuenta de la reforma a la Ley de Regalías.

Al menos eso dice su director José Fernando Tirado.

Resulta que la CAR manejaba recursos anuales por el orden de los 55 mil millones de pesos. De ese monto el 60 por ciento correspondía a giros por concepto de compensación de regalías, por el impacto ambiental que causa en Córdoba la explotación de Níquel en Cerro Matoso.

Al dejar de entrar esos recursos y con un presupuesto de 16.500 millones de pesos, como el de este a?o, la entidad ve difícil sacar los 9 mil millones de pesos que que debe pagar antes de que acabe el 2017. De una cifra similar o mayor debe disponer para el pago anual de aquí al 2026, cuando se espera haber pagado el total de la deuda.

La situación está tan crítica que el Director de la CVS pensó en proponer un impuesto departamental a la ganadería para abonar esos eventuales ingresos al pago de los 45 mil millones del préstamo. Esa idea no prosperó. 

 Por recomendación de Besaile, Tirado citó una reunión con los congresistas del departamento para pedirles que intercedan ante el Gobierno Nacional y que este les lance un salvavidas para salir de la deuda de más de 45 mil millones de pesos que hoy afrontan.

Por ahora, se está a la espera de esa gestión, pero si no surte efectos, Tirado tiene otra opción: ya ordenó el avalúo de varias propiedades de la CAR que pondría a la venta para amortiguar parte de la deuda.

Esa movida de Besaile para reunir a los parlamentarios cordobeses alrededor de la CVS es apenas una muestra de que su poder, aún en la crisis, está intacto.

El musismo de la CAR

Las CAR son apetecidas por los políticos porque al tener a alguien de su confianza en una de esas entidades no solo conocen el detalle del millonario presupuesto para inversión que manejan anualmente (el de 2017 en la CVS para ese fin es de 12.477 millones de pesos) sino que además pueden incidir en los permisos y sanciones que se profieren desde esa, que es la máxima autoridad ambiental.

Musa Besaile ha ejercido poder en la CVS antes, durante y después del préstamo que la tiene en crisis, vía sus amigos que han quedado como directores en los últimos a?os.

En 2007 fue elegido por la junta de la CVS el ingeniero Elder Oyola. Desde su elección fue visto como cuota de Besaile porque, además de ser amigos de toda la vía en su natal Sahagún, ?(Elder) le cumplía (a Musa) con puestos?, como nos detalló alguien del interior de la entidad. Oyola estuvo ahí hasta 2012.

Desde ese a?o la cabeza de la CAR es otro aliado de Besaile: José Fernando Tirado, gemelo de Roberto Tirado, otro de los hombres de confianza de Musa a quien tiene mandando como secretario General en la gobernación de su hermano Edwin Besaile.

Tener a alguien del primer círculo de la musismo en esa entidad le ha servido a Besaile para fortalecerse políticamente, porque en época electoral los más de 65 empleados, entre gente de planta y contratados por OPS, le ayudan con votos.

Según nos contaron por aparte tres fuentes, dos funcionarios de la CVS y un político activo, en las regionales pasadas a los empleados ?los alinearon a votar para Edwin Besaile a la Gobernación?, como nos dijo una de las fuentes.

?A los (trabajadores) de planta les pedían apoyo con su voto y a los que están (contratados) por OPS les pedían hasta de a 10 votos?, nos detalló uno de los empleados que nos habló fuera de micrófonos.

Pero además de eso, el senador Besaile ha usado esa entidad para hacer acuerdos con caciques políticos de la región.

Por ejemplo, para las regionales de 2015, según nos contó off the record un congresista cordobés, Musa acordó con el veterano exparlamentario liberal condenado por parapolítica Juan Manuel López Cabrales, esposo de la senadora roja Arleth Casado, un importante cargo en la CVS a cambio del respaldo de su casa política a la candidatura de su hermano Edwin.

En efecto, en abril de este a?o fue nombrado como subdirector de Planeación de la CAR el exalcalde liberal de Canalete Edgardo Ely. Él es miembro activo del grupo de López y llegó a la entidad precisamente como representación de esa casa política.

Según supo La Silla Caribe por una fuente del grupo de López, ?el trato era que le dieran (a los López) la misma dirección, pero en vista de que no se daba la movida pusieron a Ely en planeación?.

Habrá que ver si Musa, el poder detrás del poder en la CVS, ayuda a salvar la máxima autoridad ambiental de Córdoba o si deja que se termine de quebrar la entidad con la que ha armado parte su su fortín electoral.