Esta semana en el debate de Semana y El Tiempo, el candidato a la presidencia de Colombia Humana, Gustavo Petro dio nuevos detalles sobre su propuesta pensional. Como suele suceder sus declaraciones levantaron un polvorín entre sus contendores electorales, economistas y gremios económicos. Estas son las cinco preguntas claves (y sus respuestas) que le ayudarán mejor a entender el nuevo round del debate pensional:

1. ¿Qué es lo que propone Petro?

No hay una propuesta oficial y por escrito. El debate se armó a partir de lo que dijo el candidato en el debate de esta semana, y la entrevista que dio su asesor económico, Ricardo Bonilla. A partir de eso, hay 3 puntos claros de la propuesta.

  • Quiere unificar los dos regímenes de pensiones que existen hoy: el privado, Régimen de Ahorro Individual con Solidaridad (RAIS), manejado por las Administradoras de Fondos de Pensiones (AFP); y el público o Régimen de Prima Media (RPM) que maneja Colpensiones. Hoy las personas que cotizan pensión pueden escoger en qué régimen están hasta que les queden 10 años para pensionarse. En esa última década de su vida laboral ya no se pueden cambiar.

La propuesta es unificar las pensiones en un solo régimen que funcionaría de la siguiente manera: todas las personas que ganen de 0 a 4 salarios mínimos (hasta 4 millones de pesos) deberán hacer aportes a Colpensiones. Para los que ganen más de eso cotizarán sus primeros 4 salarios con Colpensiones y lo que ganen de ahí para arriba en un fondo privado. Si quieren, también podrán hacer aportes a pensiones voluntarias.

La idea es que al final de la vida laboral de cada aportante, Colpensiones responda a lo equivalente a la pensión que se puede atribuir a esos aportes hasta los 4 salarios mínimos, y los privados respondan por la pensión atribuíble al resto de los aportes.

  • Una vez entre en vigencia este nuevo régimen le permitirá a Colpensiones aumentar significativamente sus ingresos y le garantizará que a la entidad cubrir la totalidad de las pensiones de los 1,4 millones de personas pensionadas que están hoy bajo su responsabilidad. Como hoy el Estado tiene que financiar cerca de 20 billones de pesos de esta plata con dinero del Presupuesto General de la Nación, el nuevo esquema le permitirá al Gobierno ahorrarse esa plata con los aportes que ya no se harán para los fondos privados sino a Colpensiones. Con el ahorro que generará esa medida en el presupuesto Petro propone pagar a 3 millones de personas un subsidio de 500.000 pesos al mes.
  • Bonilla, además dijo en su entrevista en Blu, que debería reducirse el monto máximo de pensiones que puede pagar el Estado para que el nuevo sistema pueda sostenerse en el tiempo. Esto no podría aplicar a los pensionados que ya reciben pensión sino a los nuevos, y en algunas condiciones específicas, para evitar vicios de constitucionalidad y respetar los derechos adquiridos de los cotizantes. Pero sobre este punto en particular no amplió mucho.

Bonilla también dijo que habrá un plan de transición, pero no explicó cómo sería. Y que la propuesta deberá ser aprobada por el Congreso.

2. ¿Petro quiere expropiar las pensiones de los que tienen su ahorro pensional en fondos privados?

No. Pero la preocupación de que Petro va a expropiar las pensiones surge de una afirmación que hizo en el debate.

Dijo que los aportes a las pensiones que hacen los trabajadores y los empleadores son plata pública: “¿Es que usted cree que la cotización que crea la ley, que es un parafiscal (…) no es dinero público? Es dinero público mi amigo”, le dijo respondiendo una pregunta a Federico Gutiérrez.

En efecto, los aportes a pensiones son un parafiscal, que se considera plata pública, la diferencia es que en algunos casos la administra el estado a través de Colpensiones, y en otros un privado, las AFP. Pero, como en Argentina, el Gobierno de Cristina Kirschner usó un argumento similar para utilizar el dinero ahorrado en los fondos privados de pensiones de ese país para fondear gasto público, la afirmación de Petro genera susto. Lo que se demuestra en afirmaciones como esta del exministro de Hacienda Juan Camilo Restrepo o en este artículo de Portafolio.

Bonilla, sin embargo, dijo que la propuesta de Petro no pretende tocar los ahorros que a la fecha tienen los cotizantes en fondos privados, que ascienden a unos 300 billones de pesos (casi el monto del presupuesto anual de la nación). Dijo que esa plata la seguirán manejando los fondos privados de pensiones, pero que le pondrán límites a las inversiones de la plata de los fondos en deuda pública.

Por otro lado, el presidente de Asofondos (el gremio que reúne a las AFP), Santiago Montenegro, dijo en esta entrevista en Blu Radio que traspasar a Colpensiones los aportes pensionales de los ahorradores del régimen privado puede ser expropiatorio. Su argumento es que al hacer ese traspaso se le expropiará a los trabajadores la rentabilidad que podrían ganar sus aportes en un fondo privado. Esto porque Colpensiones no invierte la plata de los aportes, sino que la utiliza para pagar pensiones.

Para algunos expertos, referirse a esos traslados como una expropiación en el sentido en que lo hace Montenegro no es preciso: “Se utiliza la palabra expropiación de forma muy gratuita (…) es un argumento que trata de darle un barniz de tecnicismo a una idea que es una opinión respecto a cuál sería la estructura más deseable de la estructura pensional. El uso de esa palabra está mal”, dijo a La Silla Kevin Hartmann, abogado e investigador en temas pensionales y laborales de la Universidad de Lovaina, Bélgica.

3. ¿Con la propuesta de Petro se acabarían los fondos privados? 

No, pero casi. En el sistema de pilares que propuso Petro seguirán coexistiendo Colpensiones y las AFP. Pero estas últimas tendrán un rol mucho más limitado que hoy en día.

Esto porque, según el Dane, de la población ocupada en el país el 95 por ciento gana menos de 4 salarios mínimos. Eso quiere decir que los fondos privados solo podrán operar con las contribuciones del 5 por ciento de los trabajadores en el país, si ellos deciden afiliarse.

Es decir, con los fondos hoy cotizan regularmente cerca de 7 millones de trabajadores, la reforma de Petro les permitiría manejar los ahorros pensionales de menos de 500 mil.

Petro también ha criticado el hecho de que las AFP sean compañías que hagan parte de conglomerados financieros, pero lo que ha dicho de su propuesta pensional, hasta ahora no incorpora ninguna restricción en este sentido. En efecto, el 82 por ciento de los ahorros de los AFP están concentrados en dos jugadores financieros: Protección, que hace parte del Grupo Empresarial Antioqueño y comparte accionistas con Bancolombia y GNB Sudameris de los Gilinski, y Porvenir, que es del Grupo Aval, de la familia Sarmiento Angulo.

Finalmente, el marchitamiento de los fondos de pensiones privados, tendría un impacto enorme en el mercado de capitales de Colombia. El ahorro de los pensionados es uno de los jugadores principales en la compra de acciones y deuda pública y privada en el país. Sin este dinero en el mercado, el ya lánguido panorama de este mercado sería aún menos atractivo. 

4. ¿Qué problemas soluciona la propuesta de Petro?

La propuesta permitiría al Gobierno liberar plata del Presupuesto General de la Nación para garantizar un ingreso mínimo a 3 millones de personas de la tercera edad que hoy no tienen pensión.

Hoy existe el programa de Colombia Mayor que es un subsidio de 80.000 pesos mensuales a las personas que no pueden acceder a pensión, porque no cotizaron las horas suficientes ni ahorraron lo suficiente para obtenerla. Este programa tiene 1,7 millones de beneficiarios.

También garantizaría, en teoría, una pensión vitalicia para todos los trabajadores que cumplan las condiciones de días trabajados y edad para jubilarse. De acuerdo con este artículo publicado esta semana por profesores de la Facultad de Economía de la Universidad de los Andes, hoy en día solo 1 de cada 10 pensionados que se jubilan por el régimen privado alcanzan a ahorrar una renta vitalicia.

Los demás se jubilan con una opción que se llama retiro programado cuyo monto varía año a año según las condiciones del mercado.

Además eliminaría la competencia entre ambos regímenes de pensiones, algo que expertos han criticado del sistema pensional colombiano como una fuente de inequidad. Esto porque mientras unos trabajadores pueden acceder a pensiones altas y subsidiadas por el estado, otros quedan sujetos a su capacidad de ahorro durante su vida laboral.

Al mismo tiempo, para los aportantes que no alcanzan a jubilarse, en un régimen, el de Colpensiones, no reciben intereses por sus ahorros pensionales, sino que solo lo ajustan con la inflación; mientras que en el régimen privado sí reciben intereses.

5. ¿Qué problemas no soluciona la propuesta de Petro?

La reforma no ataca al que es hoy uno de los principales problemas del sistema pensional: la gente no alcanza a cumplir las condiciones para jubilarse. Como no hace referencia a dichas condiciones no resuelve esto.

Tampoco hay un punto concreto para solucionar el problema de los subsidios del Gobierno para altas pensiones que han sido criticados por comités de expertos, docentes y organizaciones como la Ocde. Si bien el asesor económico de la campaña sugirió que debería haber un tope a esta propuesta, no hay un punto específico en este sentido.

Pero la mayor crítica a la propuesta es su sostenibilidad dado que para que sea sostenible en el tiempo requiere que en la población económicamente activa siga habiendo más personas jóvenes (que paguen aportes), que viejas (a quienes toca pagarles pensión con esos aportes). La tendencia en Colombia, y en otros países, es que la población tiende a envejecer.

Esto hace que, si bien la cuenta sea positiva en el corto plazo, en el largo plazo puede no cerrar e implicar una mayor inversión por parte del Estado para garantizar las pensiones de su población de la tercera edad.

En palabras del experto de La Silla Llena y profesor de la Universidad de los Andes, Óscar Becerra: “Usar estos recursos generaría un alivio en el corto plazo, con un costo fiscal significativo en el largo plazo, ya que financiar las pensiones de todas las personas mayores, pensionadas y no pensionadas, quedaría a cargo del Estado. Esta propuesta es crear un esquema insostenible en el largo plazo”.

En entrevista con La Silla Vacía, Gustavo Petro dijo que ese punto es “un problema del futuro”, que hoy tiene Europa, pero que Colombia aún no tiene. Y su respuesta frente a la sostenibilidad del sistema es que su modelo económico va a aumentar la productividad lo suficiente como para que haya suficientes personas aportando suficiente dinero, para que el hueco fiscal no sea tan grande.

Sin embargo, el aumento de la productividad no está garantizado, por eso la sostenibilidad de las pensiones bajo este nuevo régimen, tampoco lo estaría.

Fui periodista de temas económicos de La Silla Vacía. Estudié periodismo en la Universidad Pontificia Bolivariana. Fui corresponsal de El Tiempo en Bucaramanga y cubro temas económicos desde 2010, primero en Vanguardia Liberal (Santander), y después en el diario Portafolio, donde también fui coordinadora...