El pasado 9 de febrero, día del periodista, el exministro Juan Fernando Cristo convocó a una rueda de prensa en el restaurante La Dacha, de Cúcuta. Un lugar famoso por los pastelitos de garbanzo, comida tradicional de esa ciudad. 

“Juan Fernando, eso sí, muy amable. Brindó los pastelitos para todos”, le dijo a La Silla uno de los periodistas asistentes. Sentado frente a una mesa de madera con el bulto de micrófonos de los medios locales, Cristo hizo el lanzamiento de su partido político, En Marcha.

Ese partido logró el reconocimiento de su personería jurídica a mediados de diciembre. Es uno de 14 nuevos partidos (de 28 en total) que ha surgido desde el 2018, de la explosión de personerías promovida por la jurisprudencia de la Corte Constitucional y el Consejo Nacional Electoral. En este nuevo mar de enanos políticos que fragmenta la política colombiana, Cristo se lanza a buscar jugar en las elecciones regionales.

Este mes emprendió una gira para presentarlo, anunciando una asamblea nacional a finales de marzo. Una asamblea que posiblemente cuente con figuras visibles como el exalcalde Lucho Garzón o el exsenador Horacio José Serpa, pero en la que la única estructura política protagonista es la del exministro del interior de Juan Manuel Santos.

El lanzamiento en Norte

Después de las medias nueves con los periodistas cucuteños, en la noche, Cristo presidió una reunión con toda su estructura en Norte de Santander, en el hotel Bolívar. El salón, decorado con el rojo liberal en la mesa principal y en un par de vallas con la cara de Cristo, el nombre de En Marcha y el #SoyCristo, se llenó con más de 300 personas.

“La organización Cristo, eso sí, es disciplinada. Ahí llegaron las cuotas que Cristo ha podido ubicar en cargos por todo el departamento, con sus invitados”, dijo a La Silla uno de los cuatro miembros de ese equipo con los que habló La Silla y que asistieron al evento.

La casa política de los Cristo era conocida en Norte de Santander por la bandera roja de renovación liberal, la corriente del Partido Liberal liderada por el médico y senador Jorge Cristo Sahium (asesinado por el ELN). A los 30 años, Juan Fernando como hijo mayor heredó la curul de su papá y hasta este momento de la inauguración de su propio partido, los asistentes recordaron el legado de Cristo papá.

Cristo abrió el evento agradeciendo por asistir a una convocatoria fugaz. Explicó que de aquí a marzo van a estructurar el partido y que la intención es hacerse contar en las elecciones locales de octubre.

Aunque en principio aclaró que no iba a hablar ni de apuestas a Alcaldía de Cúcuta o Gobernación de Norte de Santander, al final dijo “lo único que puedo adelantarles es que aquí en Cúcuta, En Marcha tendrá candidato y vamos a ganar la alcaldía de Cúcuta”.

Su apuesta es Juan Carlos Bocanegra, quien lleva años como miembro de su equipo (fue su asesor en el Congreso) y llegó a la Asamblea en 2019 con su respaldo. Renunció el año pasado para emprender la campaña a la Alcaldía por firmas pero es el candidato que su estructura desde ya identifica como propio.

“Cúcuta no puede dejar pasar la oportunidad clara (…) a través del doctor Juan Carlos Bocanegra”, dijo micrófono en mano durante el evento el exconcejal de Ocaña Fernando Álvarez, hermano del procurador regional Libardo Álvarez García, otra de las caras visibles de ese grupo en Norte.

Pero Bocanegra no estuvo en la mesa principal ni tampoco figuró en el auditorio. Estuvo en la salida del evento, marcando asistencia pero desde la distancia. Según dos congresistas y un líder de base que conoce a los Cristo por dentro, la estrategia interna es no etiquetar aún a Bocanegra con el exministro ante la opinión pública.

“Lo están dejando que vaya más como alternativo a ver cómo va cogiendo vuelo. Juancho (Cristo) aún no quiere mostrar todas las cartas”, le dijo a La Silla uno de los congresistas.

El que sí estuvo de frente junto a Juan Fernando, fue el senador que heredó su curul familiar, Jairo Castellanos. Él centralizó su discurso a agradecer el esfuerzo del exministro por tener tolda propia, a la que él pertenece ahora, luego de que el ASI lo expulsara como parte de los acuerdos políticos con En Marcha.

“Fue su visión (la de Cristo) lo que nos tiene recorriendo el país a los que queremos construir una plataforma política diferente”, dijo el senador que hace parte de la estructura de los Cristo hace más de una década.

Después de Castellanos hablaron concejales y líderes de varios municipios lanzando su precandidatura por En Marcha. Todos, con años de militancia cristista, ratificando que más que un nuevo partido, es una estructura tradicional que consiguió avales propios para octubre.

El riesgo es no ser lo suficientemente fuertes para apostar solos. Un miembro del partido verde en Norte de Santander le dijo a La Silla que existe la posibilidad de que hagan alianzas para listas al Concejo con En Marcha y el Pacto Histórico pero que puntualmente con Cristo no se han sentado a hablarlo.

En todo caso, no sería la primera vez que Cristo pida pista en los verdes en ese departamento.

La apuesta de Cristo en otras regiones

Pero más allá de las alianzas en Norte con otras colectividades, en otras regiones también se está proyectando con liberales disidentes como él. Por ejemplo, en Santander

Hoy Juan Fernando está en Bucaramanga y ayer estuvo en Barrancabermeja. Junto al senador Gustavo Moreno, otro avalado por la ASI que fue expulsado para entrar a En Marcha, están promocionando su partido en Santander.

Ayer, en Barrancabermeja, la reunión, también decorada de rojo, fue con la estructura política de Moreno, que llegó gracias al respaldo burocrático de la administración municipal de Alfonso Eljach.

Hoy en Bucaramanga, están en rueda de medios y en la tarde en reunión con bases liberales del grupo político del exsenador Horacio José Serpa. Él, quien es aliado político del alcalde Eljach y también le puso votos a Gustavo Moreno, tiene intenciones de ser candidato a la Alcaldía de Bucaramanga con el aval precisamente de En Marcha.

Y así como esa alianza con Serpa, Cristo está trabajando con el senador (también expulsado del ASI) Guido Echeverri en Manizales, aliado de Mauricio Lizcano, el secretario general de Petro. También con el concejal Luis Bernardo Vélez que ya empezó a recoger firmas para lanzarse a la Alcaldía de Medellín. Y según dijo en Cúcuta, en lo que resta de mes visitará Valle del Cauca y Cartagena.

Su rol de componedor ya lo probó con esa pequeña bancada de tres senadores con la que arranca su partido. En octubre medirá su potencial electoral como jefe de partido político propio, en medio de la elección que más jefes de partido ha tenido en muchas décadas. 

Cubro política menuda en los santanderes y conflicto en la frontera colombovenezolana. Soy comunicadora social con énfasis en periodismo en la Universidad Autónoma de Bucaramanga. En 2015 gané el premio de periodismo regional Luis Enrique Figueroa Rey, y en 2019 y 2020 el premio de periodismo regional...