Las denuncias por la compra de juegos de cama con plumones de ganso que hizo la Presidencia de Gustavo Petro y por la contratación a empresas y amigos de Petro, incluyendo a la youtuber Lalis, en Colombia Compra Eficiente, tienen un nombre en común: Daniel Briceño, un abogado de 31 años que ha revelado en su cuenta de Twitter esos y otros casos que han puesto al Gobierno a dar explicaciones y le han dado combustible a la derecha.
Briceño es la cara más nueva en el universo de los influenciadores políticos colombianos, y tiene dos características que definen por qué se ha vuelto importante: defiende posiciones de derecha en un ecosistema en el que los influenciadores de izquierda, progresistas y en particular del petrismo han llevado la voz cantante.
Y, por otra parte, publica denuncias documentadas. “Briceño es hoy la versión matrix recargada del influenciador porque, además de opinar, aporta pruebas de sus denuncias para soportar su premisa de que ‘el Cambio no existe’”, dice Carlos Arias, gerente de la firma Estrategia y Poder.
Eso es una rareza en un mundo donde el éxito de los influenciadores depende de la originalidad de su humor o de las distintas formas que tome su indignación, y no tanto de noticias que ellos mismos generen después de recabar en contratos e informes de contabilidad, que es lo que ha hecho Briceño.
Está viviendo una nueva semana de exposición y entrevistas después de revelar el contrato de Lalis, por el que la Procuraduría abrió una indagación preliminar.
Y arranca un año en el que, con elecciones locales en octubre, no descarta aprovechar el impulso que ha cogido para lanzarse al Concejo de Bogotá. Al fin y al cabo, primero aprendió a buscar votos que a manejar Twitter.
El arranque: grabar videos de su concejal
Daniel Briceño es un abogado externadista que creció junto a su madre soltera en La Candelaria, la localidad del centro histórico de Bogotá donde arrancó a hacer política.
Es nieto Samuel Briceño, pastor cristiano de la Iglesia Cuadrangular, y es por él que desde niño ha sido cercano a Emel Rojas, actual concejal cristiano de Colombia Justa Libres. Un contexto que lo fue formando con posturas conservadoras, aunque hoy no es un cristiano practicante.
Aunque volanteó para la campaña presidencial de Germán Vargas Lleras en 2010, sus primeros ejercicios para buscar votos los hizo de la mano de Rojas. Primero se midió en una consulta para elegir candidatos a ediles del Partido de la U, al que alguna vez estuvo vinculado Rojas. Recuerda que se quemó con 71 votos.
En 2015, con Rojas como candidato al Concejo por el entonces movimiento Libres, Briceño recogió firmas para lanzarse como edil y también para lanzar a la Alcaldía de Bogotá al pastor Ricardo Arias.
Fueron las elecciones que ganó Enrique Peñalosa. Rojas fue elegido concejal y metió a Briceño a su equipo en el Concejo para que lo asesorara en asuntos jurídicos. También lo puso a atender periodistas y a manejarle prensa, y en esas fue que Briceño pensó en las redes como una herramienta estratégica. “Emel hacía un trabajo muy juicioso, pero no lo sacaba en redes. Le dije que moviéramos su cuenta de Twitter”, recuerda. “Comencé a grabarlo con mi celular y subíamos los videos. Entonces comencé a aprender de Twitter”.
Briceño tenía su propia cuenta desde 2010, pero la usaba muy poco. Trinaba versos y baladas de Santiago Cruz intercalados con loas al estratega político de la derecha JJ Rendón y referencias al pasado guerrillero de Petro, con el fin de criticarlo en su campaña a la Alcaldía de 2011. Su impacto era nulo. Por eso, cuando cogió la cuenta del concejal Rojas la usó como espacio de aprendizaje.
En 2019 Rojas fue reelegido, y con Claudia López como alcaldesa se sentó en una silla de opositor que lo obligó a ser más incisivo. Arrancó a hacer denuncias de contratación en las que estaba la mano de Briceño, que dice que fue en ese momento que aprendió a manejar el Secop (el sistema de contratación estatal)”.
Eso es clave para entender a Briceño porque es un influenciador especializado en sacar a la luz contratos y documentos que, aunque son en su mayoría accesibles para cualquier persona con internet, no suelen ser de dominio público porque andan alojados en plataformas que no todo el mundo domina.
Es una pericia que ha reforzado con una especialización en derecho público y una maestría en análisis político en una universidad española que, según él, le sirvió sobre todo para dominar programas de manejo masivo de datos.
Con eso en mente, el 31 de diciembre de 2021 incluyó en sus propósitos de año nuevo reactivar su cuenta de Twitter para 2022, pleno año de campaña.
De la narcoavioneta a los plumones de ganso
“Esta es una cuestión a la que le dedico dos horas de mi vida todos los días, una en la mañana y una en la noche, hasta los domingos. Lo cogí como una rutina”, cuenta Daniel Briceño. Así ha creado un método de trabajo para recabar la información que le ha servido para volverse influyente en Twitter.
En esas dos horas diarias revisa cuatro grupos de bases de datos: la página de postulaciones de la Presidencia y las de postulaciones de la Procuraduría, Contraloría y Fiscalía, para mirar nuevos nombramientos; el Diario Oficial (“ahí hay muchos nombramientos intermedios que no se publican en la página de la Presidencia”); la página de decretos de la Presidencia (“ahí sale a quién nombraron embajador, de cónsul”); y el Secop, “que es el gran protagonista de esto: Secop 1 y 2, más el sistema de compras públicas”.
Su primer golpe de opinión viral, sin embargo, lo dio buscando en Cuentas Claras, la página donde los candidatos deben reportar sus gastos de campaña.
El primero de agosto de 2022, una semana antes de la posesión de Petro, Briceño reveló que la empresa con la que las campañas del recién elegido presidente y varios candidatos del Pacto Histórico al Congreso habían contratado avionetas privadas era la misma a la que pertenecía la avioneta cargada con cocaína que piloteaba el esposo de la presentadora Alejandra Azcárate, capturado en 2021.
1. En la consulta presidencial el presidente electo @petrogustavo gastó $1.109.017.836 en avión privado contratado con esta empresa tal y como se evidencia en este formato reportado en el aplicativo de Cuentas Claras del CNE. pic.twitter.com/P0KeSEjjhm
— Daniel F. Briceño (@Danielbricen) August 1, 2022
Briceño no reveló ahí ningún delito y su hilo apenas lo retomó un medio local.
Pero logró que lo retrinaran 3.100 veces y armó una pelea típica de Twitter al meterse con un tema en el que influenciadores petristas como Físico Impuro, Don Izquierdo y Levy Rincón se habían ido con toda contra Azcárate, que tiene posiciones de derecha.
Es curioso como tantos petristas se indignaron por el caso de la narcoavioneta y la emprendieron contra Alejandra Azcarate pero nunca mencionaron que la empresa dueña de dicha avioneta tiene relaciones tan estrechas con el mismo Gustavo Petro. Así actúan siempre. ????
— Daniel F. Briceño (@Danielbricen) August 1, 2022
Con Petro posesionado, Briceño se ha dado un banquete.
El 8 de agosto, con el Gobierno apenas acomodándose en su silla, fue el primero en revelar la millonaria demanda que tenía contra la Nación la designada ministra de las TIC, Mery Gutiérrez. Un pleito que al final le impidió a ella posesionarse.
Su hilo fue viral (2.200 retrinos), pero su nombre fue poco o nada mencionado en medios porque se trató de un caso que casi al mismo tiempo publicó El Tiempo, y luego retomó Daniel Coronell.
Fue en octubre cuando Briceño dio el primer golpe por el que se llevó todos los créditos: la compra en Presidencia de plumones de ganso:
La Presidencia acaba de gastar $173.084.200 en la compra de nuevos electrodomésticos y juegos de cama para Petro y Francia Márquez.
1 televisor de 85 pulgadas de $27.499.900
2 vitrocerámicas por $34.815.000
2 plumones de plumas de ganso por $8.159.800
Entre otros ???????? pic.twitter.com/GA47I8F0Vi
— Daniel F. Briceño (@Danielbricen) October 2, 2022
No hubo medio de comunicación que no retomara su hilo en Twitter. Le abrió tanto la puerta a la indignación, la emoción que más vende en redes, que obligó a pronunciarse a Petro y a Francia Márquez.
Y la semana pasada reveló los contratos que firmó Colombia Compra Eficiente con la youtuber petrista Lalis y empresas relacionadas con el exconcejal petrista Hollman Morris. Puso en evidencia el amiguismo con el que allá se está manejando la contratación, una crítica del petrismo a gobiernos pasados.
El trampolín
Briceño cumplió a cabalidad el propósito de año que se impuso en diciembre de 2021. Su Twitter arrancó 2022, recuerda, “con más o menos 600 seguidores”, y hoy cuenta con 80.300.
Eso lo posicionó al lado de otros tuiteros influenciadores de derecha, como Natalia Bedoya, Jaime Arizabaleta y David Ghitis.
Terminó el año, además, como uno de los tuiteros más leídos por líderes de opinión, según el Panel de Opinión de Cifras y Conceptos; y como invitado constante a programas de opinión en canales como Red Más, Cable Noticias, NTN, otros de Venezuela y al programa de Vicky Dávila en Semana, donde le ofrecieron una columna de opinión desde este año. Ya ha publicado dos.
Cuando arrancó, recuerda, llamaba a amigos para pedirles que lo retrinaran. Hoy tiene tracción suficiente para que un trino suyo tenga más de mil retrinos en menos de una hora.
Briceño se presta y se nota que le gusta hablar de todo este proceso, que todo indica terminará en una campaña política. Al ponerle el tema, de hecho, habla como político: “Me lanzo si se da la posibilidad…”.
Lo pone en duda porque sabe que no es tan fácil convertir seguidores en votantes, pero está de salida de su trabajo como asesor del concejal Rojas, con la idea de preparar una candidatura en caso de que decida lanzarse.
En busca de más influencia y de más exposición, que es el principal activo que tiene ahora, comenzó a extenderse en redes: hace seis meses abrió cuenta en Tiktok (33.000 seguidores), hace cuatro en Facebook (11.000 seguidores) y puso su Instagram (11.200 seguidores) en función de su nuevo oficio. En esas tres redes cuelga videos cortos criticando al Gobierno.
Y, como otros influenciadores, ha hecho afirmaciones engañosas que ha reportado el Detector de Mentiras de La Silla Vacía, como sobre la deuda de las EPS, y en campaña replicó información falsa sobre las propuestas de Petro.
Son salidas que, en todo caso, le siguen dando la exposición que busca.
Si finalmente se lanza, no quiere hacerlo por el partido cristiano de su concejal Rojas, sino por algún otro por el que sienta afinidad, y pone como ejemplo el Centro Democrático, Salvación Nacional y Cambio Radical.
Su mira está en esos lados. Él mismo lo dice: “No soy periodista ni influencer. Soy un actor político”.