Los jefes de los partidos políticos son responsables de los avales que entreguen para las próximas elecciones ya que si la Corte aprueba la reforma política tal como quedó y alguno de los avalados termina condenado por parapolítica o Farc política el partido político podría llegar a perder la personería jurídica como pena máxima.
El problema es que los directores de los partidos tienen muy pocos insumos para tomar la decisión puesto que el DAS no puede entregarles información sobre los aspirantes si no la solicita el mismo aspirante. La Policía tampoco puede entregar oficialmente un reporte sobre posibles actividades ilegales de los candidatos. Y la Fiscalía les entrega información sobre aperturas de investigación pero no sobre el estado del proceso y casi cualquier funcionario público en Colombia tiene por lo menos una investigación abierta.
Total, los jefes tienen toda la responsabilidad pero muy pocos insumos para tomar una decisión verdaderamente informada.