Fue una victoria arrasadora para Federico Gutiérrez y una derrota sin paliativos para Daniel Quintero. El eje político en Medellín y en Antioquia ha virado al compás de la popularidad de “Fico”, quien se ha convertido en la figura política más prominente de la región. Sus votos fueron un factor clave para que el uribismo, de la mano de Andrés Julián Rendón, obtuviera la primera gobernación con candidato propio.

En la lona quedaron Quintero, quien se marcha de Medellín en el desprestigio y siendo irrelevante para la campaña de Juan Carlos Upegui. Golpeados también quedaron la maquinaria que respaldó al exgobernador Luis Pérez, uno de los grandes derrotados de las elecciones, y el actual gobernador Aníbal Gaviria, quien termina su enrevesada administración sin dejar sucesor.

Estas son las principales conclusiones de las elecciones regionales para Medellín y Antioquia:

Alcaldía de Medellín

  1. Federico Gutiérrez confirma que es la figura central de la política paisa

“Fico” obtuvo la votación más alta en la historia de Medellín, hizo elegir a la tercera parte del concejo de la ciudad y sus votos fueron decisivos para darle la victoria al uribismo en la Gobernación de Antioquia. Con estos tres logros, Gutiérrez se alzó como el principal jefe político de la segunda región más rica y poblada de Colombia. 

Con cerca de 690 mil votos, Gutiérrez estuvo a punto de triplicar su votación frente al 2015 (244.636). Y le sacó una ventaja de cerca de 390 mil votos a la votación que obtuvo el exalcalde Daniel Quintero en 2019, quien impuso el récord en aquella elección (303.420). En la primera vuelta de las presidenciales de 2022, Gutiérrez mostró parte de esa fuerza al imponerse en la ciudad por cerca de 30 puntos porcentuales frente a su inmediato perseguidor, el entonces candidato Gustavo Petro. En estas regionales, “Fico” obtuvo 86 mil votos más en Medellín que el año pasado. 

La apabullante votación de “Fico” ha tenido su reflejo en el Concejo de Medellín y en las Juntas Administradoras Locales (JAL). Lo hizo con su recién reconocido partido, Creemos, que tuvo resultados importantes. En el 2023, Gutiérrez hizo una apuesta para convertir su fuerza personal en un partido poderoso. Además de la Alcaldía, ahora cuenta con un robusto aparato político en Antioquia y en otras regiones del país.

En el preconteo, Creemos tiene 7 de los 21 concejales: 1 de 4 votos de los medellinenses fueron para la lista de “Fico”, compuesta por hombres y mujeres de su confianza, algunos de ellos altos funcionarios durante su primera administración. Entre ellos, su exsecretario de Seguridad, Andrés Tobón, quien obtuvo más de 43 mil votos y es el concejal más votado en la historia de Medellín, duplicando la marca que la exconcejala Nataly Vélez dejó en las locales de 2019 con 20 mil votos. 

Creemos, además, fue el partido más votado de las 16 comunas de Medellín, y se convirtió en la primera fuerza en las JAL, incluyendo los cuatro corregimientos de la ciudad. “Las personas de mejores condiciones económicas se indignaban por un titular sobre el escándalo de Buen comienzo. Pero a la gente de los barrios populares les robaron Buen comienzo. Eso moviliza mucho más”, dice Tobón sobre el programa de alimentación escolar que registró el mayor escándalo de corrupción en la administración saliente.

Pero sin duda el efecto más importante de la aplanadora de “Fico” se vio en la Gobernación. “Hoy la política antioqueña tiene dos actores fundamentales: el Centro Democrático y Federico Gutiérrez”, le dijo a La Silla, al principio de la campaña, el hoy gobernador electo Andrés Julián Rendón. Con el apoyo anticipado que le dio “Fico” a Rendón, el uribista sacó una gran diferencia en Medellín que el exgobernador Luis Pérez, su principal rival, no pudo recortar con la maquinaria de sus aliados en las subregiones. La imagen de Rendón esperando a Gutiérrez en su puesto de votación fue elocuente con el impulso decisivo que le dio su figura. “Luego subo a votar a Rionegro”, le dijo el uribista a La Silla.

2. Medellín será el epicentro de la oposición desde las regiones

Federico Gutiérrez no esperó demasiado para cargar en contra del gobierno Petro. En su discurso como ganador, “Fico” le pidió al gobierno redefinir su rumbo. “El país ha decidido que ahora sí hay un verdadero cambio”, dijo en medio de la multitud que lo ovacionaba. Gutiérrez felicitó a los candidatos que ganaron en las principales ciudades del país, como Jaime Beltrán en Bucaramanga y Alejandro Eder en Cali, e interpretó sus triunfos como un voto de censura frente al gobierno nacional. 

Gutiérrez también aprovechó para felicitar a los altos funcionarios que se han enfrentado al presidente, como el fiscal general, Francisco Barbosa, y a la procuradora Margarita Cabello. “Han demostrado estar a la altura para defender la institucionalidad del país. Gracias a eso se han podido llevar a cabo unas elecciones en términos democráticos”, dijo. 

Desde el principio de la campaña, “Fico” planteó las elecciones regionales como un plebiscito en contra del gobierno Petro. Y su partido, Creemos, se ha sumado a las fuerzas opositoras en diferentes regiones del país. Es el caso de su candidato a la Alcaldía de Bucaramanga, Manuel Parada, quien adhirió al pastor Beltrán, el ganador en la capital santandereana y quien también le hace oposición abierta al petrismo. La oposición frontal de “Fico” implica un riesgo para la administración de Medellín. De su interlocución con el gobierno dependen proyectos claves de infraestructura para la ciudad, como el Metro de la 80 y el Tren del Río.

3. El quinterismo sufre una derrota amarga y sin matices

La derrota estaba en las cuentas de Independientes ante la popularidad de “Fico”. Su objetivo era, a pesar de perder, consolidar un electorado duro en la ciudad, liderando los sectores progresistas que vienen en crecimiento en Medellín. Con esto, le sumaban un engranaje más a la plataforma nacional que el exalcalde Quintero pretende construir para las presidenciales de 2026, erosionando el tradicional voto de derecha en la ciudad. 

La estrategia implosionó ante un fracaso electoral sin paliativos. 

El fracaso toma una mayor dimensión frente a la campaña hostil que emprendieron. Esta incluyó la presentación engañosa de resultados de encuestas, mentiras para respaldar propuestas como el metro gratis y la renuncia de un alcalde en ejercicio para impulsar la campaña de su sucesor, algo inédito en la historia de la ciudad. 

El exalcalde Quintero publicó en su cuenta de X, días antes de las elecciones, encuestas sin fichas técnicas que mostraban a Upegui remontando la diferencia con “Fico”.  Y el 28 de octubre, un día antes de la elección, la campaña de Upegui denunciaba, sin pruebas, una compra masiva de votos en los barrios populares de la ciudad y señalaba a la campaña de Gutiérrez de instalar cámaras para espiar su sede de campaña. Nada de esto impidió la fuga de votos del quinterismo. Upegui dilapidó poco más de 200 mil votos, frente a la votación de Quintero en las elecciones de 2019 (303.420). 

Las votación al Concejo de Medellín también registró la debacle del quinterismo. La lista de Independientes pasó de 62.404 votos en 2019 a 33.530 en estas elecciones, obteniendo sólo una curul. La segunda va a estar en cabeza de Upegui, quien entrará al recinto por el estatuto de la oposición. Entre los quemados destacados están la exsecretaria Ana María Valle, la cabeza de lista, y quien pertenece al primer círculo de Diana Osorio, la esposa de Quintero. También se quemaron Carlos “El Mocho” Romero, quien fue director del Inder en la actual administración, y el edil Fernando Pulgarín, cercano al congresista Álex Flórez.

Los aliados del quinterismo en el Concejo también quedaron en la lona. Entre ellos, el concejal conservador Lucas Cañas, el verde Jaime Cuartas y el liberal Fabio Rivera, quienes estaban entre los favoritos para repetir curul y terminaron quemándose. 

En contraste, los opositores más duros llegaron al Concejo. Uno de los casos más notables es el de Andrés “El Gury” Rodríguez, concejal electo por el Centro Democrático, y quien lideró el fallido proceso de revocatoria y organizó varias de las marchas con Quintero y el gobierno Petro en la ciudad. “Yo se los repetía a mis compañeros. Tenía que ser una victoria contundente. Este lunar en la historia de la ciudad no puede volver a sucedernos. Debemos tenerlo vivo y presente”, dice Rodríguez.

Gobernación de Antioquia

  1. La aplanadora de ‘Fico’ neutralizó la maquinaria de Pérez y le limpió el camino a Rendón

La elección a gobernador de Antioquia estuvo lejos de ser apretada. El uribista Andrés Julián Rendón, abrazado por “Fico” Gutiérrez, derrotó la maquinaria que alcanzó a engrasar el exgobernador Luis Pérez en las regiones por fuera de Medellín. La carta del Centro Democrático celebró el domingo una abultada victoria jalonada desde el Valle del Aburrá, el cinturón más poblado del departamento, dejando a la maquinaria a mitad de camino.

En Medellín, el candidato uribista obtuvo 424.561 votos (61% del total de votos obtenidos por ‘Fico’) frente a 135.999 de Pérez. Y en el resto del Valle de Aburrá, el hoy gobernador electo sacó 226.686 votos, por encima de los 112.187 del exgobernador. Esto le permitió a Rendón neutralizar la maquinaria activada en las regiones. Rendón ganó en 8 de los 10 municipios de la subregión. Sólo perdió ante Pérez en Girardota y Barbosa, dos municipios donde el equipo del senador Carlos Andrés Trujillo es fuerte.

Rendón selló su victoria con 944.239 votos (36,7% del total). El uribista superó a Sergio Fajardo como el gobernador más votado de la historia (925.956, en 2011). El margen fue evidente y bastó con el silencio de Pérez, quien canceló a última hora su evento de clausura en el centro comercial San Diego, para evidenciar lo certero del golpe. De allí salieron, cabizbajas, cerca de 200 personas que perdieron la cargada de banderas y pancartas con los logos de Piensa en Grande, como nombró Pérez su proyecto. 

Rendón supo montarse a la marea de “Fico” y sumar varias estructuras políticas de derecha. “Fue una combinación de voto de opinión, en la que nos ayudó mucho Federico Gutiérrez en Medellín y el área metropolitana, y de estructura política. Luis Pérez, Julián Bedoya y Carlos Trujillo sobrevaloraron la maquinaria”, dice Eugenio Prieto, jefe de debate de Rendón y quien se adhirió a su campaña, como candidato oficial del Partido Liberal, luego de dos encuestas que los midieron.

Rendón perdió por fuera del Valle de Aburrá y esto ocurrió porque, aunque corta en andamiaje, la maquinaria reunida por Pérez funcionó. El proyecto del exgobernador se sobrepuso en el Urabá, una zona donde la derecha es más débil. Allí, el petrismo obtuvo 110 mil votos en la segunda vuelta presidencial de 2022. “Urabá, Bajo Cauca y parte del Magdalena Medio. Sabíamos que nos costaría en esas subregiones”, dice Luis Fernando Begué, gerente de la campaña.

Pérez no solo conquistó Urabá sino parte del Norte, Nordeste, la franja limítrofe con Chocó, varios municipios del Suroeste y el Bajo Cauca. En estas zonas, los equipos Bedoya, Trujillo y el senador liberal Jhon Jairo Roldán son fuertes. 

Pero Rendón también hizo los deberes en casa y conquistó buena parte del Oriente antioqueño. En Rionegro, donde fue alcalde (2016 – 2019), se llevó la mitad de los votos (39.828 apoyos). En el resto de la subregión aseguró 18 de los 23 municipios. Fue clave el apoyo del senador Esteban Quintero, del Centro Democrático, fuerte en el Oriente. Y también el de la dupla conservadora del senador Mauricio Giraldo y el representante Luis Miguel López, quienes aterrizaron en esta campaña con sus votos en comunidades católicas.

2. Rendón promete hablarle duro a Petro

“Desde la campaña presidencial, algunos acuñaron que si Antioquia cambiaba, el país cambiaba. Hoy decimos que si Antioquia resiste, Colombia se salva”, dijo Rendón el domingo en su discurso de victoria como gobernador electo a propósito del eslogan que utilizaron el Pacto Histórico e Independientes para hacer campaña en 2022.

Durante la campaña, Rendón centró su discurso en temas neurálgicos que crispan las relaciones con Bogotá: la intervención de Savia Salud, la pérdida de autonomía en temas mineros, la desfinanciación de las vías 4G y la más reciente intervención de Comfenalco, la segunda caja de compensación más grande del departamento. Rendón también es un duro crítico de la política de la paz total del gobierno Petro.

El fenómeno registrado en Medellín con Creemos fue un espejo de la elección del gobernador. ‘Fico’ y Rendón tuvieron varias salidas duras en contra del gobierno Petro durante la campaña. “Con Federico y Andrés Julián le haremos frente a las decisiones con las que el petrismo quiere sitiar a Antioquia”, le dijo a La Silla el representante Juan Fernando Espinal, del Centro Democrático. Sin embargo, Rendón va a estar acompañado por políticos más pragmáticos, como el liberal Prieto, quien asegura que la próxima administración tendrá un “talante de respeto” frente al gobierno Petro.

Pero el caudal de “Fico” no solo puso al gobernador sino que también sirvió para reconfigurar la Asamblea. Allí los vientos soplarán en favor de Rendón porque el Centro Democrático (408.288 votos) y Creemos (247.398 votos) tuvieron las listas más votadas, asegurando 11 de 26 escaños. Los conservadores y liberales perdieron sillas, pero podrían sumarse fácilmente a un gobierno de coalición. Aún se desconoce si Pérez aceptará la curul que le corresponde por el estatuto de oposición. 

3.  La gestión gris de Aníbal Gaviria enterró al oficialismo

Luis Fernando Suárez, la carta del gobernador Aníbal Gaviria, obtuvo 355.609 votos y se ubicó tercero, con el 13,8%. Suárez estuvo muy lejos de la votación de Gaviria en las elecciones de 2019 (831.646). El bajo rendimiento de Suárez se dio a pesar de haber conseguido, a última hora, la adhesión del excongresista Juan Diego Gómez, candidato oficial del conservatismo y otro de los derrotados de la jornada.

Suárez no pudo capitalizar la visibilidad que le dio ser gobernador encargado durante buena parte de la administración, luego de que Gaviria recibiera detención domiciliaria. El exsecretario enfrentó los principales retos del cuatrienio ante la ausencia de Gaviria por sus problemas judiciales. Entre ellos, la pandemia del covid-19 y graves problemas de orden público, como la crisis minera y el paro orquestado por el Clan del Golfo tras la extradición de alias Otoniel. Pero el fenómeno “Fico”-Rendón y las ausencias de Gaviria, quien estuvo 431 días por fuera del cargo, terminaron por pasarle factura.

Suárez no logró ganar en ninguno de los municipios metropolitanos. En Medellín, se ubicó tercero, siguiendo a Rendón y a Pérez, con 128.704 votos (14% del total). La sorpresa la dio en Envigado (19.980 votos) y Sabaneta (13.644 votos), donde le arrebató el segundo puesto a Pérez.

Cubro al gobierno del presidente Gustavo Petro en La Silla Vacía. Estudié Periodismo en la Universidad de Antioquia.

Periodista y casi politólogo. Trabajé en El Colombiano. Ahora soy el corresponsal de La Silla Vacía en Medellín y Antioquia.