La propuesta y el presupuesto que se discuten en el Distrito para la celebración del Bicentenario surcan las alturas. William Ospina, militante reconocido del Polo, anda con la idea de gastarse 30 mil millones de pesos llenando el cielo bogotano de globos con próceres a bordo, una cifra un tanto desmesurada para un país con tan poco prócer. Además, resulta paradójico cuando la respuesta del Distrito para muchos otros proyectos de índole cultural es que no hay plata y hay que ahorrar.