Margarita Cabello, Procuradora Delegada, es precandidata a la gobernación del Atlántico con el apoyo de los Name, los Gerlein y los Char.
Elsa Noguera, ex candidata a la vicepresidencia por Cambio Radical, se lanzará a la alcaldía, Su nombre ha recogido apoyos claves.
El alcalde Alex Char es el principal impulsor de la campaña de Elsa Noguera. Noguera heredará parte de la buena imagen., los logros y las dificultades de Char.
El Senador Fuad Char es uno de los principales barones políticos del país. Es pieza esencial de Cambio Radical e impulsor del acuerdo para apoyar a Noguera y Cabello.
José Name Terán es la cabeza de una dinastía política. y fue senador por más de treinta años En 2007 fue derrotado por Eduardo Verano para la gobernación, pero su hijo José David es senador por el partido de la U.
El senador Roberto Gerlein es la principal figura del Partido Conservador en el Atlántico, y el tercero de los grandes barones electorales que apoya a Cabello y Noguera.

Una nueva alianza entre los tres mayores barones electorales del Atlántico promete poner en el poder a dos mujeres: Margarita Cabello en la gobernación y Elsa Margarita Noguera en la alcaldía de Barranquilla.

El conservador Roberto Gerlein, Fuad Char, de Cambio Radical, y José Name Terán, de la U, son los tres pesos pesados que tienen cocinado un acuerdo para impulsar a estas dos candidatas. Esa alianza no es nueva: ya en 2007 se unieron para lanzar a Alex Char a la alcaldía y a José Name Terán a la gobernación. Después de ser enconados rivales durante dos décadas, esa fue la primera vez que los más grandes caciques de la región unieron sus fuerzas.

Con esa alianza, Char conquistó la alcaldía, pero la gobernación la obtuvo el Partido liberal con Eduardo Verano de la Rosa. Es decir, ninguno de los tres grandes barones se quedó con la gobernación.

Ahora piensan repetir la alianza, pero esta vez no van a lanzar a miembros de sus dinastías políticas sino a dos herederas de la elite barranquillera más tradicional: Elsa Noguera, quien es muy cercana a Alex Char, y Margarita Cabello, que para algunos es del lado conservador de Roberto Gerlein y según otros es cercana a la casa Name. Se trata de un enroque entre la elite política y la elite social más tradicional, y eso es lo interesante de estas elecciones en el Atlántico.

En las últimas décadas hubo un recambio político en el Atlántico. Apellidos como Mier, de la Hoz, Fernández, Carbonell o Jimeno tienen una larga tradición, mientras que Name, Slebi o Escaff, de origen sirio o libanés, son más recientes. Estos últimos, que para muchos son los representantes del clientelismo y la compra de votos (especialmente Name) en la región, han ido copando el poder político desde los años sesenta del siglo pasado. Pero, con la derrota en la gobernación hace cuatro años, Name y Char vieron la necesidad de aliarse para asegurar ese cargo. Y Gerlein no se quedó atrás, al igual que otros grupos más pequeños, como el que lidera el presidente del Senado, Armando Benedetti

La candidatura de Elsa Noguera parece inatajable. Los empresarios admiran su habilidad financiera y su gestión en la Secretaría de Hacienda de Barranquilla, las elites tradicionales la quieren y conocen su historia de trabajo y su tezón para superar sus problemas físicos, los políticos la ven como la segura ganadora y le han ido dando su apoyo. El reto de Noguera, si sale elegida, será similar al de Alex Char: mantener a raya los apetitos burocráticos de quienes la apoyan, sin terminar en guerra con ellos.

La alianza que se está armando alrededor de Noguera sirve para que los grandes caciques se aseguren de no volver a perder la gobernación. Margarita Cabello resulta una carta interesante para ese cargo porque, como Noguera, tiene una muy buena imagen, es un nombre nuevo en las lides políticas y es vista como ajena al clientelismo.

Aún es temprano para afirmar, como dicen algunos, que la alianza de los tres caciques es invencible -aunque por ahora lo parece. Lo que sí es claro es que todos los alcaldes de Barranquilla y gobernadores del Atlántico que han sido elegidos popularmente, lo han logrado gracias al apoyo de varias facciones políticas. Y una de las claves de su éxito o su fracaso está en el perfil de sus candidatos. Que en el caso de Elsa Noguera y Margarita Cabello, tienen más similitudes que diferencias: las dos son mujeres, tienen vínculos familiares con la elite tradicional, son vistas como técnicas y estudiosas y no forman parte de algún partido político, por lo menos formalmente. Pero ya son conocidas por la opinión local.

Trayectorias de trabajo

Margarita Cabello es una respetada abogada que ha recorrido toda la escalera de la carrera judicial. Graduada de colegios religiosos de clase media, estudió derecho en la Corporación Universitaria de la Costa. Empezó como escribiente en un juzgado de Barranquilla y fue juez penal, de menores y civil de circuito, todo entre 1980 y 1990.

Mientras Cabello se labraba su carrera, Elsa Noguera se enfrentaba a otra lucha: su discapacidad física. Noguera estudió en colegios bilingües y exclusivos, primero en el Karl C. Parrish y luego en el Marymount. Con el apoyo de sus padres, el abogado y político conservador en su juventud Vicente ‘Tico’ Noguera Carbonell y Elsa de La Espriella, Noguera se sobrepuso y se divirtió como cualquier otra adolescente. Su gran amiga del colegio, la “Chechi” Donado, fue reina del Carnaval. Y Noguera se gozó las fiestas.

En 1990, mientras Noguera estudiaba ingeniería industrial en la Universidad del Norte, la universidad privada más prestigiosa de Barranquilla, Cabello tuvo un pequeño interregno en su carrera de juez: fue, por tres meses, jefe jurídica de Cofinorte, una entidad financiera del Grupo Santodomingo. Pero resultó nombrada magistrada en la sala de familia del Tribunal Superior del Atlántico, donde estuvo hasta 1996. De ahí pasó a la sala civil, donde fue magistrada hasta mazo de 2009. Desde abril de ese año es Procuradora Delegada, donde ha tomado decisiones como inhabilitar a Agustín Chávez, ex director de Cardique.

En todos estos años, Cabello se ganó una fama de ser discreta, estudiosa y trabajadora. Terminó tres especializaciones, dictó clases en universidades de Barranquilla como la CUC, la del Norte y la Libre, así como cursos y conferencias, entró a la masonería (como José Name, aunque están en logias diferentes) y al Instituto Colombiano de Derecho Procesal. Fue reconocida varias veces, como mejor juez, mejor magistrada y mujer sobresaliente del Atlántico (ver hoja de vida)

Mientras tanto, Noguera avanzó en su carrera, donde también ha resaltado por estudiosa y conocedora. Se fue a Bogotá, donde terminó economía en la Universidad Javierana. Hizo una maestría en administración de empresas en la Universidad del Norte y, un posgrado en negocios internacionales en la American University de Washington; ayudó en empresas de su familia, como Tropipalma, y finalmente terminó entrando a Fundesarrollo, el tanque de pensamiento barranquillero donde empezó a estudiar a fondo las finanzas públicas de su ciudad y su región.

Como otros analistas de Fundesarrollo, Noguera saltó al sector público. Carlos Rodado, en ese entonces gobernador y hoy Minsitro de Minas, la nombró tesorera departamental en 2007. En esos meses, y en su corto paso luego por la dirección de la Fiduciaria la Previsora en Barranquilla, profundizó más sus conocimientos del manejo de los dineros públicos. Todo eso le permitió llegar con un gran conocimiento del tema a la Secretaría de Hacienda de Barranquilla cuando Alex Char asumió la alcaldía, en 2008.
 

El salto a la política

Elsa Noguera se dio a conocer en el país cuando Germán Vargas Lleras la nombró como su fórmula vicepresidencial, a principios de 2010. A finales del año anterior, el nombre de Margarita Cabello empezó a aparecer en los medios, cuando Álvaro Uribe la nombró en su terna de candidatos a Fiscal General, en reemplazo de Virginia Uribe. Es decir, desde hace algunos meses aparecieron en el escenario nacional.

A escala local, Noguera ya era una figura conocida. Su paso por la secretaría de Hacienda de Barranquilla la hizo famosa por haber sanado las finanzas de la ciudad. Cabello, aunque una figura mucho menos pública, también era conocida en círculos de abogados de la ciudad.

Las dos tenían, además, contactos en la política local. De nuevo, los de Cabello menos fuertes que los de Noguera. Vicente Noguera Carbonell, aunque está retirado de la política, escribe ocasionalmente en El Heraldo, es un portavoz reconocido en algunos temas y tiene muy buenos contactos. Dos tíos de Elsa, Roberto Zabaraín y Juan B. Fernández Renowitzky, son prestantes figuras con muy buenos contactos: Zabaraín es constructor y fue gerente de la empresa encargada de los megaproyectos en Barranquilla, y Fernández es uno de los accionistas de El Heraldo y fue director del diario hasta 2005. Por el lado de Cabello, su hermana María Elvira es muy cercana a Noemí Sanín, fue segundo renglón de Mauricio Pimiento al senado en la campaña por la que él terminó condenado por parapolítica, y es actualmente cónsul de Caracas.

Noguera tiene más terreno abonado en conocimiento público. No sólo ya participó en una campaña política, con Germán Vargas Lleras, sino que después de la segunda vuelta presidencial Alex Char la nombró Alta Consejera para la Inversión Social, cargo que para algunos fue una plataforma para ‘mojarla de pueblo’. Es decir, sus movidas del último año la perfilan claramente como candidata y dan pie a su salto a la política electoral. Además, el apoyo de Alex Char y el que tenga contactos políticos propios la hacen menos dependiente del apoyo de los otros grupos políticos que la apoyan.

Para Cabello el terreno parece más inclinado, lo que la hace depender más de su trabajo en campaña. De entrada, existe el debate sobre si está inhabilitada por no haber renunciado a su cargo en la Procuraduría en octubre pasado. Además, su carrera en la rama judicial no le ha dado la notoriedad de Noguera. Sin embargo, sus contactos políticos a nivel nacional son importantes. El polémico episodio de su visita, junto con el entonces secretario jurídico de la Presidencia, Edmundo del Castillo, al despacho del magistrado de la Corte Constitucional Nilson Pinilla el día del fallo sobre el referendo reeleccionista, da fe de sus contactos. Y los apoyos que tienen en el Atlántico también sugieren el peso que tendrá su candidatura.

Las candidaturas de estas dos mujeres ponen a prueba la reputación de machistas de los costeños y también la idea de que es imposible recibir el apoyo de grandes caciques y gobernar con una agenda propia.

Fui usuario y luego periodista de La Silla Vacía. Tras más de una década haciendo de todo en esta escuela de periodismo, de la que fui director editorial, me fui a ser lector y SuperAmigo. Ahora me desempeño como redactor jefe de El País América Colombia.